Montero tacha de «vergüenza» la absolución de Alves pese a ser dictada por dos jueces progresistas
La ministra ha denunciado que «se cuestione el testimonio de una víctima» que decide denunciar a los «poderosos»

María Jesús Montero preside el acto de homenaje a las conquistas de igualdad de los 50 años de España. | Arsenio Zurita (Europa Press)
La secretaria general del PSOE-A y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha considerado «una vergüenza» la sentencia que absuelve al exjugador del FC Barcelona Dani Alves por una agresión sexual a una joven, así como que «todavía se cuestione el testimonio de una víctima y se diga que la presunción de inocencia está por delante del testimonio de mujeres jóvenes, valientes, que deciden denunciar a los poderosos, a los grandes, a los famosos». Estas declaraciones por parte de la socialista llegan después de conocerse que dos de las cuatro magistrados que firmaron la sentencia de absolución -por unanimidad- son dos mujeres de izquierda y progresistas.
«Por eso desde aquí queremos decirle a esta mujer que estamos contigo, estamos con ella, estamos con todas aquellas que se enfrentan a gigantes para poder reclamar la dignidad que en su palabra, en su boca, es la dignidad de todas nosotras. No está sola, aquí estamos contigo», ha asegurado Montero en la inauguración del 16 Congreso Provincial del PSOE de Jaén.
Al respecto, la ministra ha insistido en que esta sentencia es una «vergüenza después de todo lo que nosotras hemos recorrido para luchar contra la violencia de género, que es la expresión máxima de lo que significa la falta de igualdad entre hombres y mujeres».
«Qué vergüenza después de todo lo que ha hecho el PSOE en el reconocimiento de los derechos de las mujeres, de la brecha salarial, en las pensiones, en todo aquello que refleja que a lo largo de nuestra vida hemos sido discriminadas o no hemos jugado el papel que teníamos que jugar», ha expresado.
Las asociaciones judiciales avalan la sentencia
Por su parte, rpresentantes de diferentes asociaciones judiciales han defendido en declaraciones a Europa Press que el sistema es «garantista», tras conocer este viernes que la Sección de Apelaciones del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. En este sentido, Luis Ortiz Vigil, miembro del comité nacional de la Asociación Judicial Francisco de Vitoria (AJFV), ha asegurado que se trata de un asunto judicializado y que «no hace más que seguir el camino ordinario que siguen todos los asuntos penales en el país». «Normalidad institucional es lo que está ocurriendo, sin más», ha agregado.
Precisamente, la exministra de Igualdad Irene Montero expuso en un mensaje en la red social X que la sentencia «es un claro ejemplo de violencia institucional y de justicia patriarcal». «La sentencia que absuelve a Dani Alves alegando que la víctima no es creíble es un claro ejemplo de violencia institucional y de justicia patriarcal que desprotege a las mujeres y, como dice la ONU, mantiene la cultura de impunidad de los agresores. Una y mil veces: solo sí es sí», aseguró.
Para Ortiz es «llamativo» que se realicen ese tipo de manifestaciones «cuando la ponente de la sentencia es una mujer y el tribunal, según se expresa en el texto, tiene una composición mayoritariamente femenina». «Creo que supone desconocer datos objetivos que hacen difícil llegar a concebir que esto obedezca a un modelo de justicia patriarcal», ha explicado.
A juicio de Ortiz, la sociedad española debe conocer que «a diario en España hay muchas sentencias que ofrecen un resultado condenatorio, igual que absolutorio». «Lo que no podemos es extraer la conclusión de que la única sentencia que se ha dictado en el día de hoy en España sea una sentencia absolutoria de un ciudadano de una enorme relevancia mediática», ha indicado.
Además, ha apuntado que las víctimas tienen que estar «tranquilas», en el sentido de que el sistema va a ofrecer una respuesta «con hasta dos niveles de recursos, donde muchas personas van a estudiar el tema». «Y el sistema determinará que la normalidad institucional funcione y que se ofrezca una respuesta que permita respetar los derechos fundamentales de todas las personas que intervienen en el proceso, tanto la posible víctima como la persona acusada», ha subrayado.