El Gobierno aprueba este martes el DNI digital: una «revolución» en la identificación ciudadana
El nuevo documento permitirá que los ciudadanos puedan identificarse a través de una aplicación del teléfono móvil
Oficina de la Policía Nacional para la expedición del DNI.
El Consejo de Ministros tiene previsto dar luz verde este martes a la expedición del nuevo Documento Nacional de Identidad en formato digital, una iniciativa impulsada por el Ministerio del Interior y desarrollada por la Policía Nacional. El proyecto, que lleva años gestándose en los despachos de Interior, representa —en palabras del propio Gobierno— una «profunda revolución» en la forma de relacionarse con la Administración Pública y también con el sector privado.
La cartera que dirige Fernando Grande-Marlaska comenzó a perfilar este salto tecnológico en la pasada legislatura. Ya en octubre de 2022, el ministro anticipó que se estaba ultimando su puesta en marcha conforme a las directrices europeas. Desde entonces, los trabajos se han acelerado con el objetivo de que este nuevo formato digital del DNI sea una realidad cuanto antes.
Según han explicado fuentes del Ministerio del Interior, el nuevo documento no sustituirá al físico, pero sí permitirá que los ciudadanos puedan identificarse a través de una aplicación móvil que actuará como su réplica virtual. Se trata del llamado DNI 4.0, enclavado en el Proyecto Identidad Digital DNIe, financiado a través del Fondo de la Unión Europea para la Recuperación y Resiliencia.
Este sistema ha sido desarrollado por distintos departamentos de la Policía Nacional, entre ellos la Subdirección General de Logística, la División de Documentación y la Unidad de Informática y Telecomunicaciones. Fue el propio director general de la Policía, Francisco Pardo, quien en 2020 desveló las primeras pinceladas del proyecto, que ahora entra en su fase definitiva.
El objetivo es claro: ofrecer una herramienta segura, interoperable y moderna para acreditar la identidad personal en un entorno cada vez más digitalizado. Con esta medida, España se alinea con otros países europeos que ya han avanzado en la implantación de sistemas de identificación digital como un complemento indispensable en la era tecnológica.
