El Gobierno nombra a Delgado fiscal de Memoria pese al rechazo de sus compañeros
Llop preguntó a la Abogacía del Estado si podía frenar el nombramiento en el Consejo de Ministros, pero le advirtieron de que no tenía margen legal
Delgado llega a una reunión con organizaciones memorialistas durante su época de ministra. | Jesús Hellín (Europa Press)
El Gobierno ha nombrado este martes a Dolores Delgado fiscal de Sala de Memoria Democrática. Lo hace a propuesta de su sucesor, Álvaro García Ortiz, y bajo las críticas de buena parte de la carrera fiscal. Dos asociaciones de fiscales solicitaron ayer mismo a la ministra Pilar Llop que frenara la designación porque la elección fue «nula de pleno derecho». La titular de Justicia elevó la cuestión a la Abogacía del Estado, que indicó que no tenía margen legal para dejar de elevar la cuestión al Consejo de Ministros. El nombramiento será publicado este miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Las dos asociaciones críticas con la designación de Delgado hicieron ayer un último intento para evitar su nombramiento enviando cartas a varios ministros. La mayoritaria Asociación de Fiscales pidió a Llop que no elevase la propuesta al considerar que era nulo de pleno derecho. En su opinión, la elección incurre en incompatibilidades, ya que su pareja sentimental, el exjuez Baltasar Garzón, dirige una fundación dedicada a materias de derechos humanos que serán objeto de esta nueva Fiscalía.
Tras recibir la carta, Llop solicitó un informe a la Abogacía del Estado para consultar si podía impedir o paralizar la tramitación de una propuesta del fiscal general sobre un nombramiento de carácter discrecional, según ha adelantado El Español. Los Servicios Jurídicos indicaron a la ministra que tenía la obligación legal de trasladar la propuesta al Gobierno, cosa que ha hecho este martes, ha confirmado la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
El ascenso de Delgado
«Les puedo confirmar que la fiscal de Sala de Memoria Democrática, y también la de Delitos de Odio, han sido cubiertas», ha indicado Rodríguez. La titular de Política Territorial ha indicado que se trata de «un procedimiento transparente» consecuencia de una ley que «viene a atender y dar respuesta a esas víctimas y lo correcto es no privarlas de esa oportunidad».
Rodríguez ha aclarado que, en el caso de Delgado, el nombramiento «no supone un ascenso, ya que ella es fiscal de Sala». La exministra de Justicia consiguió escalar hasta el máximo escalafón de una manera polémica, lo que causó también un gran descontento entre la carrera fiscal.
La ya fiscal de Memoria Democrática consiguió en septiembre convertirse en fiscal jefa de la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo pese a que en esa ocasión tampoco contó con el respaldo del Consejo Fiscal. El órgano consultivo votó mayoritariamente por Luis Rueda, teniente fiscal del Tribunal de Cuentas. Sin embargo, se impuso el criterio de García Ortiz en la que significaba su primera decisión como fiscal general, puesto en el que semanas antes había sustituido a la exministra.
García Ortiz propuso el pasado jueves a Delgado para la recién creada plaza de Memoria Democrática. Siete de los 11 vocales del Consejo Fiscal se negaron a deliberar y votar el nombramiento en señal de protesta. Al puesto aspiraban otros tres candidatos. La Asociación Profesional Independiente de Fiscales (APIF) sostiene que al Consejo Fiscal se le hurtó la posibilidad de decidir sobre la idoneidad de la persona para el cargo, como establece el artículo 58.1 del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal.
Impugnar la decisión
APIF ya advirtió días antes del cónclave de que Delgado podía incurrir en posibles incompatibilidades para el puesto por un conflicto de intereses motivado por su relación sentimental con Garzón. La asociación que preside Salvador Viada pidió entonces retrasar el Consejo Fiscal al 19 de junio, como estaba previsto en un principio, y debatir la cuestión, a lo que García Ortiz se negó. Se excusó en que varias predecesoras realizaron nombramientos discrecionales con unas elecciones generales convocadas.
Rodríguez ha mantenido ese relato tras el Consejo de Ministro. «Váyanse a la reunión del 13 de noviembre de 2015, con otro Gobierno y días antes de las elecciones del 20 de noviembre, y verá ceses y nombramientos muy parecidos a los que se han atendido en el día de hoy». Las asociaciones críticas con la designación de Delgado estudian impugnar la decisión ante el Tribunal Supremo.
