Tsunami planeó tomar el control del Barça para impulsar la hoja de ruta de Puigdemont en 2020
Dos investigados hablaron de apoyar al candidato Víctor Font frente a Laporta. Su interés no era deportivo, sino político
Los presuntos ideólogos de Tsunami Democràtic y empresarios afines a Carles Puigdemont se fijaron como objetivo en 2020 controlar la presidencia del F.C. Barcelona y poner al club blaugrana al servicio de la causa independentista. Así lo revelan las conversaciones intervenidas por la Guardia Civil a una docena de investigados, por presuntos delitos de terrorismo, en una pieza separada investigada por la Audiencia Nacional en el caso Tsunami.
El supuesto plan para convertir al Barça en una «estructura de Estado» de la futura república catalana tenía dos vertientes. De un lado, según las transcripciones incorporadas por los investigadores en un informe fechado en junio de 2020, los presuntos responsables de la ‘rama informática’ de Tsunami Democràtic intentaron vender al club el uso de Vocdoni, la plataforma tecnológica puesta en marcha para facilitar la celebración de una votación de independencia digital que permitiese proclamar la e-república ideada por el Consell per la República de Puigdemont.
Por otra parte, de las conversaciones intervenidas, la Guardia Civil acreditó que el entorno de Puigdemont y sus aliados en la Cámara de Comercio de Barcelona hablaron de apoyar la candidatura de Víctor Font frente a Joan Laporta en las elecciones a la presidencia del Barça, tras la dimisión de Josep María Bartomeu por el estallido del Barçagate. Su interés no era deportivo, sino el de controlar la institución con motivos políticos, según se desprende de las conversaciones intervenidas a los investigados: «El Barça es el medio o la herramienta más poderosa que tenemos en Cataluña como medio de comunicación (…) si tuviera un gobierno que fuera independentista sin complejos, y trabajara para el país, pues sería un éxito brutal».
El Barça como ‘estructura de Estado’
«La idea final de controlar el F.C. Barcelona es para convertirlo en una herramienta independentista, en una estructura de estado», indica la Guardia Civil en un informe que se encontraba bajo secreto de sumario desde hace tres años y medio. El documento desgrana una conversación mantenida el 14 de mayo de 2020 entre el informático Joan Arus, uno de los presuntos creadores de la plataforma Vocdoni junto a Jordi Baylina, y el político de la CUP Ferrán Reyes Gómez.
Los presuntos ideólogos de Tsunami se acababan de enterar de que la empresa encargada de llevar a cabo las votaciones internas del F.C. Barcelona había quebrado con motivo de la covid-19, por lo que era el momento propicio para venderles el uso de la herramienta digital con la que pretendían favorecer una futura declaración de independencia. Ferrán Reyes «le informa que SCYTL124, la empresa encargada de llevar a cabo las votaciones internas del Fútbol Club Barcelona, habría quebrado».
Arus le responde dando a entender «que podrían ofrecer el uso de Vocdoni al club, haciendo una aproximación aunque fuese por el Voting Service de la plataforma digital independentista». Poco después, en otra conversación, Arus le cuenta a Ferrán Reyes que iba a reunirse con ‘Toti’, uno de los inversores de Vocdoni que tendría «acceso al Barça». En la misma conversación, también le dice que otra forma de entrar en el club podría ser a través de Sergi Miquel.
El entorno de Puigdemont
Según la Guardia Civil, Sergi Miquel es una de las personas de confianza de Puigdemont. En esos momentos, ejercía funciones directivas en las entidades CATGlobal y CATCip AISBL, «las cuales dan sustento legal a las actividades del Consell per la República en Bélgica». «Situación claramente indiciaria de la existencia de vínculos entre el entorno del expresidente y los desarrolladores del proyecto Vocdoni», indicaban los investigadores.
Las sospechas se veían reforzadas, además y siempre según la Guardia Civil, al tener en cuenta que Sergi Miquel figuraba junto a su pareja como uno de los únicos miembros del consejo de administración de la mercantil Lan Sei Consulting OCP2. Fundada el 4 de marzo de 2020 y con sede social en Tallín (Estonia), la Guardia Civil creía que esa sociedad formaba parte del entramado empresarial establecido por los desarrolladores de Vocdoni en el país báltico.
Reyes le comenta en esa llamada que otro empresario independentista podría tener influencia para que el Barça tuviese en cuenta la hipotética oferta de Vocdoni. Dos años después, la plataforma de votación digital dirigida por Reyes logró hacerse con el club blaugrana como cliente. Según una nota de prensa de la propia compañía, Vocdoni ejecutó una votación de carácter internacional con el Fútbol Club Barcelona y la primera votación completamente digital organizada por un organismo público en en España, el Ayuntamiento de Bellpuig.
Creada en 2018, según su página web, el proyecto de voto digital mediante tecnología blockchain se integró a principios de este año en la Digital Catalonia Alliance (DCA), una iniciativa que «agrupa los principales sectores tecnológicos emergentes del territorio catalán en una alianza de comunidades tecnológicas innovadora, visionaria, disruptiva y colaborativa». Entre sus clientes, según una nota de prensa, está también desde el año 2020 una de las principales plataformas independentistas. Vocdoni se encargó entonces de la votación digital celebrada durante la Asamblea General y las elecciones de Òmnium Cultural, con un censo de más de 180.000 miembros.
Controlar el club
Lo anterior era una de las dos patas del plan trazado por los investigados en esta pieza separada del caso Tsunami para hacerse con el control del Barça y poner al club al servicio del plan independentista del Consell per la República de Puigdemont. La segunda, que finalmente no lograría sus objetivos, fue promovida desde la Cámara de Comercio de Barcelona. Y también tiene como nexo de unión al exdiputado de Junts y entonces director de la Casa del Consell de la República en Waterloo (Bélgica), Sergi Miquel.
Como adelantó este diario, el entonces presidente de la entidad empresarial barcelonesa y ahora diputado autonómico por Junts, Joan Canadell, y su mano derecha, Montserrat Soler, se encuentran entre la docena de personas cuyos teléfonos fueron intervenidos por la Guardia Civil en el marco de esta pieza separada del caso Tsunami. Tras alcanzar la presidencia de la Cámara de Comercio de Barcelona, según revelan las conversaciones, Canadell impulsó la candidatura de Soler para la presidencia de la Asamblea Nacional Catalana en presunta connivencia con el entorno de Puigdemont en Waterloo.
En una de las conversaciones intervenidas entre la mano derecha de Canadell y el exdirector de la Casa de la República, «queda patente que Miquel va a apoyar de manera incondicional la candidatura de Soler a la presidencia de la ANC». «Asimismo, Sergi Miquel también estaría buscando apoyos a la candidatura de Montserrat entre los máximos dirigentes del Consell, en referencia a Caries Puigdemont y Toni Comín», añade la Guardia Civil.
Apoyo a la candidatura de Font
Tras acceder a la Cámara de Comercio de Barcelona como representantes de la lista de Eine de País en esa organización empresarial, Canadell y Soler se habían fijado como objetivo el de colonizar varias instituciones sociales y profesionales de Cataluña para imponer la nueva hoja de ruta unilateral presuntamente promovida desde Waterloo. Crear las estructuras de Estado que permitieran en un futuro la desconexión de Cataluña respecto del Estado. El segundo paso era obtener la presidencia de la ANC. Y el tercero, según revelan las conversaciones entre ambos investigados, era impulsar una candidatura independentista que tuviese opciones reales de hacerse con la presidencia del F.C. Barcelona.
«La idea de que las facciones independentistas alcancen la presidencia del F.C. Barcelona, no parece un asunto baladí puesto que, como afirma la propia Montserrat Soler en una conversación con Joan Canadell, no es importante que gane partidos o ganen más o menos dinero», señala la Guardia Civil. «El Barça es el medio o la herramienta más poderosa que tenemos en Cataluña como medio de comunicación es decir, lo que hace el Barça al minuto se sabe en todo el mundo, y todos hablan, no tenemos otra cosa tan potente como el Barça a nivel comunicativo. Por tanto, si tuviera un gobierno que fuera independentista sin complejos y trabajara para el país pues sería un éxito brutal», indicaba Soler al presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona.
Motivos políticos
En una de las conversaciones incorporadas al informe policial, en mayo de 2020, la investigada Montserrat Soler le expone a Sergi Miquel su estrategia para alcanzar una presidencia de índole independentista en el club blaugrana, a imagen y semejanza de la Cámara de Comercio de Barcelona, mediante el impulso de la candidatura de Eines de Pais Barça. Su interés no era deportivo, sino de control de la institución con motivos políticos.
«A mí me gustaría meterme con este tema del Barça y tener un gobierno del Barça que, bueno, se mojase más por la independencia», dice Soler en otra conversación incorporada al informe de la Guardia Civil. En este sentido, desde el entorno de Puigdemont le recomendaron abiertamente apoyar al aspirante Víctor Font, quien finalmente acabaría perdiendo las elecciones del Barça contra Joan Laporta.
«Sergi Miquel se muestra entusiasmado con la idea, ofreciéndose a ponerle en contacto con Víctor Font, manifestando que es la alternativa independentista al Barça», señala la Guardia Civil. También le sugiere comentar a Canadell que realice una llamada al citado candidato a la presidencia del club, ofreciéndose incluso a mediar a través de un abogado cercano a Laporta que, según Miquel, acabaría apoyando a Font por su perfil independentista.