Aldama solicitó una licencia para abrir un banco en África y desviar los fondos de la trama
El comisionista inició gestiones en 2022 para canalizar los beneficios del fraude en un banco en Guinea-Conakri

Ilustración de Alejandra Svriz.
El comisionista de la trama Koldo, Víctor de Aldama, tuvo un papel principal en el entramado de los hidrocarburos, como consta en la ingente documentación que obra en poder de THE OBJECTIVE. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil le atribuye una función de «codirector» y le sitúa en la «cúspide» del complejo entramado societario encaminado a defraudar el IVA en la compra venta de los hidrocarburos. Las pruebas de esa dirección ejecutiva constan en los múltiples mensajes de WhatsApp publicados por este periódico en los que el propio Aldama da directrices a sus socios, evidenciando su elevada posición en la jerarquía de la organización criminal.
Los mensajes ya publicados por este diario, en los que Aldama daba órdenes al entramado para la compra/venta de combustible a través de las empresas dirigidas por su socio, Claudio Rivas, evidencian que mintió este miércoles en su entrevista en la Cadena COPE, en la que culpó al Gobierno de prefabricar una causa para incriminarle porque él puede «acabar con este Gobierno». Los nuevos documentos a los que ha accedido este periódico revelan que el comisionista ordenó la apertura de un banco en África con la intención de desviar los fondos obtenidos de forma presuntamente fraudulenta por la evasión del pago del impuesto del valor añadido.
Según la conversación a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, el 17 de septiembre de 2022, Víctor de Aldama solicitó información a un socio sobre el estado de las gestiones realizadas para abrir un banco en Guinea-Conakri. «¿Algo del tema de los temas de licencia bancaria?», preguntó el cabecilla del entramado a este empresario encargado de las gestiones para la apertura de esta entidad bancaria con la que pretendían desviar los fondos obtenidos ilícitamente por la evasión de impuestos en la compraventa de petróleo.

Una licencia bancaria en Guinea-Conakri
A los tres días, el 20 de septiembre de 2022, Aldama volvió a comunicarse con el mismo empresario, a quien le reclamó saber «cuál era el país de África que había contactos». Este socio le respondió diciendo que no lo recordaba, «pero se lo pregunto y te digo». El empresario se refería a un tercero implicado en las gestiones, un testaferro afincado en Portugal, con quien había construido la ramificación portuguesa de la trama de los hidrocarburos y gracias a quien abrió una decena de empresas y cuentas bancarias en el país vecino, que le sirvieron para la «despatrimonialización de sus bienes en territorio nacional», según el escrito del juez instructor.

Un tercer mensaje de WhatsApp al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE evidencia las gestiones previas entre el interlocutor de Aldama y el testaferro portugués en abril de 2022. Tras ser instado por Aldama, éste informa al segundo empresario de los hidrocarburos de la existencia de una «reunión hoy para mirar que relaciones se puede abrir en transacciones con África». En este mensaje, con fecha 29 de abril, su contacto portugués informa que «se puede abrir desde una empresa simple, empresa de capitales o una fundación. También se tienen cosas diplomáticas».
No obstante, fuentes conocedoras de la operación aseguran que ése fue sólo el primer paso, y que el objetivo era abrir un banco para ocultar el dinero obtenido por una «trama milmillonaria», que excede con creces los 182 millones de euros de fraude del IVA. El informe de la UCO conocido esta semana añade a esa cantidad otros 74 millones de euros que la trama habría «transferido fondos de procedencia delictiva a Portugal, China y Colombia» por un importe cercano a los 74 millones de euros. Como avanzó este diario, Aldama creó entre septiembre de 2022 y marzo de 2023 siete sociedades pantalla en Portugal, cuatro de ellas en la ciudad portuguesa de Elvas, con la finalidad de evadir el pago de impuestos.

Sin embargo, la instrucción de Aldama fue solicitar una licencia bancaria, justo en el mismo mes -septiembre de 2022- en que lograron definitivamente la licencia de operadora para Villafuel SL, y en previsión del ingente volumen de negocio que se abría en el horizonte. De hecho, según las fuentes del entramado de los hidrocarburos, no sólo se intentó abrir bancos en este país del continente africano, sino en otros, con la ayuda de colaboradores personales de Aldama.
La ramificación portuguesa
Precisamente Portugal fue el país donde el cabecilla de la trama, Claudio Rivas, Aldama y sus ‘mosqueteros’ edificaron una compleja estructura con una decena de empresas y cuentas bancarias a nombre de cada uno de los integrantes de la presunta red de cobro de comisiones del caso Koldo. Siguiendo el mismo esquema que el empleado en el fraude de las mascarillas, Aldama se apoyó en sus socios Ignacio Díaz Tapia, Javier Serrano, Luis Alberto Escolano y César Moreno para desarrollar sus negocios en Portugal y República Dominicana. Los investigadores del caso Koldo ya apuntaron que los mencionados habían ayudado al comisionista a despatrimonializar sus bienes en España a través de un complejo entramado.