José Manuel García-Margallo, ministro de Asuntos Exteriores en funciones, ha tildado de «extraordinariamente inoportuna» la visita del primer ministro británico a Gibraltar. «Se la podría haber ahorrado», ha añadido antes de conminar al Reino Unido a «cumplir con la legalidad internacional» y recordarle que «Gibraltar es una colonia». Además, Margallo ha avisado de que España será «implacable» en la defensa de la territorialidad del Peñón. En un acto, el ministro ha hablado de las relaciones de España con el Reino Unido: «España y el Reino Unido son dos países socios y aliados. Sin embargo, mantienen profundas diferencias sobre la cuestión de Gibraltar. No deseamos que estas diferencias interfieran en nuestra amistad con el Reino Unido”, ha asegurado. Mariano Rajoy mantiene asimismo que Gibraltar es «español» y ha añadido que «y así seguirá siéndolo gane el Brexit o pierda”. Londres llevaba tiempo preparando el viaje, pero sólo se lo ha transmitido a Madrid a través del embajador español en Reino Unido, Federico Trillo, este miércoles por la tarde, casi al mismo tiempo que se conocía en Gibraltar. La visita llega con un objetivo claro: clamar contra la salida del país de la UE. Para los llanitos habría sido la mejor ocasión de convertir la visita en una manifestación patriótica. A pesar de cancelar el mitin, Cameron se reunirá con el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, y con el líder de la oposición, Daniel Feetham.