La Casa Blanda
Entrenador de fútbol sin resultados. Sale. Entrenador de baloncesto sin resultados. Fuera. Ahora, ¿directora del servicio secreto de Estados Unidos con intruso en la Casa Blanca? A la calle y de inmediato.
Entrenador de fútbol sin resultados. Sale. Entrenador de baloncesto sin resultados. Fuera. Ahora, ¿directora del servicio secreto de Estados Unidos con intruso en la Casa Blanca? A la calle y de inmediato.
Ahora los turistas que deseen sacarse una foto con la majestuosa Casa Blanca deberán alejarse
dos metros más. Norma de seguridad y ¿símbolo de distancia?. ¿Distancia que los ciudadanos mantienen con los políticos?, ¿o la distancia que los políticos mantienen con la vida real?
Colarse en una fiesta puede llegar a convertirse en una aventura políticamente incorrecta. Pero nadie podrá negar que puede tener su dosis alta de diversión. Todo depende de quién sea el anfitrión y la categoría de los invitados.
La vida es más perversa que una película. Más enrevesada que uno de esos guiones de quiebros increíbles en sus tramas. Va un ciudadano con su coche particular y lía él solito una peli de espionaje en toda regla. A coste cero y rentabilidad máxima.
Segunda parte de las declaraciones del último número de Inspire, que se presenta como magazine yihadista editado por Al Qaeda en la Península Arábiga.
Afirma Maquiavelo que la experiencia muestra que las decisiones duras y difíciles se deben ejecutar de golpe, rápidamente, de una sola vez. Y así ha obrado Putin. Ha llegado a Crimea para quedarse, y nadie está en condiciones de impedírselo.
Michelle Obama da una fiesta para sus allegados en la que solicita que acudan con calzado cómodo para bailar y cenados de casa.
No todos los días pisa uno la moqueta de la Casa Blanca, ni siquiera siendo presidente del Gobierno. Pero todo llega.
Quizá es necesario espiar las conversaciones de millones de ciudadanos de todo el mundo
Espiar o traficar son prácticas razonables. Lo que no hay que hacer es contarlo. El mensajero paga el pato