MyTO

Demócratas

  • La última rueda de prensa de Obama, entre el balance y los consejos a Trump

    Entre los temas que ha tratado están las últimas medidas tomadas por su Gobierno. Por ejemplo, la sorprendente conmutación de la pena de la soldado Manning: «Chelsea Manning ha cumplido ya una dura pena de prisión. No creo que cualquiera que esté pensando en filtrar información pueda pensar que vaya a quedar impune”, ha declarado Obama. Otra medida reciente ha sido la eliminación de la política ‘pies mojados, pies secos’, que ha defendido como el fin de los privilegios migratorios de los cubanos. Para Obama, ésta era un “remanente” de la “vieja y fracasada” política de aislamiento hacia la isla. La nueva política es la “justa y apropiada para la naturaleza cambiante de la relación” con La Habana, ha declarado.

    En cuando a la política internacional, el presidente saliente ha afirmado que sigue “profundamente preocupado por la situación en Israel y Palestina, es insostenible”. Obama ha asegurado que ha invertido grandes esfuerzos en resolver ese conflicto, pero que no ha podido forzar una solución. De Rusia, Obama ha dicho que “por los intereses de Estados Unidos y del mundo, necesitamos tener una buena relación con Rusia, por eso le animé a que formara parte activa de la comunidad internacional”, añadiendo que “es importante que Estados Unidos se pronuncie cuando un país grande invade y acosa a otro más pequeño”, refiriéndose al conflicto de Moscú con Ucrania.

    Su sucesor en el cargo, Donald Trump, también ha tenido un espacio propio en la última rueda de prensa de Obama. Entre otras cosas, ha afirmado que “Trump cambiará muchas de sus opiniones cuando escuche a sus asesores”, y le ha lanzado algunas ‘pullas’ al recordar que “el fraude electoral son noticias falsas”. A pesar de las diferencias que mantiene con el presidente electo, ha anunciado que seguirá con la tradición y asistirá a la ceremonia de inauguración de la presidencia de Donald Trump.

    En cuanto a su gestión, Obama ha destacado un hito que le hace sentir especialmente orgulloso: «la transformación que ha atravesado nuestro país en la última década», refiriéndose a los logros de la comunidad LGTB, respaldada por su apoyo personal al matrimonio igualitario. «Creo que hicimos algunas contribuciones importantes, pero la más importante fue la de los activistas, ciudadanos y parejas que alzaron la voz y se mostraron orgullosos de ser quienes son», ha sentenciado.

    El mensaje que ha querido destacar Obama sobre todos los demás es el de la esperanza. “Creo en este país, en que hay más gente buena que mala”, ha dicho. Sus planes de futuro son el descanso y el tiempo en familia, explicando que quiere aprovechar también para escribir. No obstante, ha aclarado que él será siempre «ciudadano», «por lo que es importante que los demócratas y quienes perdieron en las elecciones puedan distinguir que entre todas las políticas que se debaten, hay determinados asuntos en los que nuestros valores están en juego». Por ello, Obama no callará si los valores que dice defender se ven atacados por la administración Trump.

  • Seguidores de Clinton piden un recuento de los votos por posibles irregularidades

    Un número creciente de académicos y activistas están pidiendo que las autoridades estadounidenses realicen una auditoria completa o un recuento de los votos de las elecciones presidenciales de 2016. El grupo, que está instando a la campaña de Hillary Clinton a unirse a su lucha, se prepara para entregar un informe detallando sobre sus preocupaciones a presidentes de comisiones del Congreso y a las autoridades federales a principios de la próxima semana, según publica The Guardian. La petición se produce después de que la inteligencia estadounidense publicara las evaluaciones públicas de que los hackers rusos estaban detrás de intrusiones en los sistemas electorales regionales y el robo de mensajes de funcionarios demócratas antes de las elecciones. De los análisis llama la atención la victoria desproporcionada que acumuló Trump en los condados que usaban el voto electrónico en comparación con aquellos que usaban sólo papeletas de papel.  Sin embargo, miembros de alto rango del partido se han mostrado reacios a sugerir que hubo irregularidades en el resultado porque durante la campaña criticaron duramente a Trump por afirmar que las elecciones estarían “manipuladas” contra él.

    Donald Trump es el presidente electo de Estados Unidos, pero no fue el más votado en los comicios del pasado 8 de noviembre. La demócrata Hillary Clinton obtuvo 1.752.899 votos más que el magnate republicano en todo el país. Clinton obtuvo 63.757.077 votos por los 62.004.178 del próximo inquilino de la Casa Blanca, según los datos de The Cook Political Report .

  • A Hillary Clinton le votaron 1,75 millones más de personas que a Donald Trump

    El voto popular no elige al presidente. Lo hace el Colegio Electoral, integrado por 538 electores o compromisarios de todos los estados. Esa cifra es igual al total de senadores y congresistas (100+435) del país y los tres representantes del Distrito de Columbia, en Washington. La senadora demócrata Barbara Boxer ha iniciado una campaña para que esto cambie. Para ello ha introducido un proyecto de ley para enmendar la Constitución de EE.UU. y modificar su sistema electoral para que el ganador del voto popular en comicios futuros sea quien llegue a la Casa Blanca. La iniciativa que pretende impulsar la senadora Boxer, que en enero deja su cargo, eliminaría el Colegio Electoral e instauraría el sistema de una persona un voto, pero , al tratarse de una enmienda constitucional, requiere el apoyo de dos tercios de las dos cámaras -ahora en manos de los republicanos-, además del 75% de los estados, por lo que es improbable que se apruebe.

  • La reaparición más difícil de Hillary Clinton tras su derrota

    Clinton escogió la cena de la organización Children’s Defense Fund (Fondo de Defensa Infantil) para reaparecer tras el duro golpe recibido en las pasadas elecciones. Confesó que lo que le motivó para salir de casa es la causa de la cena, la defensa y ayuda de los niños. Clinton mantienen una fuerte vinculación con esta organización, a la que pertenece desde que salió de la Universidad. La exsecretaria de Estado expresó su profunda decepción por los resultados electorales -su cara hablaba por sí sola-, tanto que reconoció no poder expresarlo. «Yo también estoy decepcionada, más de lo que jamás pudiera expresar», afirmó. Pero lanzó un mensaje reconciliador: «Nuestra campaña nunca fue sobre una persona o unas elecciones, fue sobre el país que amamos y sobre construir unos Estados Unidos con esperanza, incluyente y con un gran corazón», precisó. Asimismo, animó a sus simpatizantes a no decaer en sus principios y a seguir «comprometidos a todos los niveles» para «superar» la era Trump. Les pidió no darse por vencidos y no cuestionar lo que es Estados Unidos. «Las divisiones que estas elecciones mostraron están en los más profundo de Estados Unidos. Pero por favor escuchen cuando les digo: Estados Unidos lo vale. Crean en su país, peleen por sus valores y nunca se den por vencidos», remarcó.

  • Buenas palabras en la primera reunión de Obama y Trump en la Casa Blanca

    Después del encuentro a puerta cerrada, Obama a dicho a los periodistas que «mi prioridad número uno en los próximos dos meses es intentar facilitar una transición que garantice el éxito a nuestro presidente electo». También ha explicado que en la conversación se habían abordado asuntos de política exterior y doméstica, y que se había sentido «muy animado» por el interés mostrado por Trump en trabajar de forma conjunta en asuntos a afrontar por Estados Unidos. Trump corroboró las palabras de Obama diciendo que «estoy deseando» trabajar en el futuro con el presidente.

  • Nebraska vota restablecer la pena de muerte

    Esta decisión salida de las urnas este martes supone enmendar la votación de la cámara legislativa de Nebraska de mayo de 2015, por la que se prohibía la pena de muerte con 31 votos a favor y 15 en contra. Pese a que el Estado sólo tiene 10 presos en el corredor de la muerte, el asunto ha sido objeto de un intenso y acalorado debate a lo largo y ancho de Nebraska.
    En Oklahoma, la mayoría del electorado ha votado a favor este martes de una medida para proteger la pena capital. Y en California, los votantes no sólo han rechazado una propuesta contra la pena de muerte, sino que han aprobado agilizar los procesos para las ejecuciones.

  • La victoria de Donald Trump abre una etapa de incertidumbre dentro y fuera del país

    El discurso del populismo y del antisistema se ha impuesto a una Hillary Clinton que representaba al ‘establishment’. Trump ha alardeado de ser políticamente incorrecto con declaraciones incendiarias a favor del uso de las armas sin control – “Yo podría estar parado en medio de la Quinta Avenida y disparar contra alguien, y no perder ningún votante, ¿vale?” – Efectivamente, esta polémica frase parece haberle dado la razón. Más escandalosas aún fueron sus declaraciones sobre los inmigrantes tras manifestar en un mitin lleno de hispanos que “cuando México nos envía a su gente, no nos envía a la mejor. Envían a gente con muchos problemas y se traen los problemas, están trayendo drogas, el crimen. Son violadores. Algunos, asumo, son gente decente”. Y es que entre las prioridades anunciadas por Trump están levantar un muro a lo largo de la frontera de Estados Unidos con México y expulsar a todos los inmigrantes ilegales para que “dejen de robarnos el trabajo”.

    Pero si algo ha marcado las últimas semanas de campaña ha sido la emisión de unas imágenes de Trump alardeando de poder hacer con las mujeres lo que quiere por ser famoso, cuando no se refería a ellas en términos despectivos como “cerdas, perras y animales desagradables”. Además de ir contra los inmigrantes y las mujeres, Trump ha dejado clara su animadversión hacia los musulmanes a los que ve como “terroristas” y a los que “hay que impedir entrar en el país” porque “quieren volar nuestros edificios, nuestras ciudades”. Tampoco se ha mordido la lengua al hablar de los políticos – “No sé cómo somos tan estúpido y tenemos a un presidente como Barack Obama” – y en especial de Hillary Clinton a la que llamó mentirosa, ladrona, y a la que llegó a amenazar con meter en la cárcel si ganaba las elecciones. A ambos les acusó de crear el Estado Islámico. Ha defendido la necesidad de recuperar el sueño americano, el imperio y obtener alguna “victoria” en el exterior; ha alabado la Rusia de Vladimir Putin, ha hecho algún guiño a la dictadura de Corea del Norte y ha criticado a China por “inventarse” el cambio climático. En definitiva, Trump se ha presentado como un hombre “normal”, un “trabajador”, contrario al sistema y populista, que ha logrado generar la ilusión en una ciudadanía desencantada con la Administración Obama y con lo que representa Hillary Clinton.

    A las reacciones de sorpresa y decepción por parte de los votantes demócratas, destacan las rápidas reacciones fuera de Estados Unidos. Antes de que se proclamara a Trump oficialmente vencedor, la dirigente de extrema derecha Marine Le Pen le felicitó a través de su cuenta de twitter. Sin embargo, los mercados asiáticos reacciones con caídas tras conocerse la evolución del escrutinio a lo largo de la intensa noche electoral. La Bolsa de Tokio cerró con una caída del 5,36% mientras las autoridades de Japón convocaron de urgencia una reunión financiera cuando ya todo apuntaba a una victoria de Trump. Seúl también convocó a su consejo de seguridad ante la posible victoria del candidato republicano.

  • Los candidatos votan en medio de protestas y expresiones de apoyo

    «Hay muchas personas que cuentan con el resultado de estas elecciones, lo que significa para nuestro país y lo haré lo mejor que pueda si tengo la suerte de ganar hoy», ha dicho Hillary Clinton a la cadena ABC News.»Confiamos en la campaña que hemos realizado y en el mensaje de nuestra candidata al pueblo americano. Ahora esperamos a ver qué ocurre», ha comentado la oficina de campaña de Clinton a News.
    Donald Trump se ha mostrado tranquilo y confiado, y levantando su dedo pulgar como gesto de victoria, ha bromeado con los asistentes y con los periodistas. Con un lacónico «bien», ha contestado cuando le han preguntado cómo se encontraba.

  • Nueva York, epicentro electoral elegido por Hillary Clinton y Donald Trump

    Supone la mayor presencia policial que ha vivido la ciudad de Nueva York en los últimos años. Incluso mayor que cuando el papa Francisco visitó el estado en septiembre de 2015 y durante la celebración de despedida de año en Times Square. El alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, subrayó que la policía local cuenta con apoyo federal y prometió que la ciudad «nunca se sentirá intimidada» ante las recientes amenazas de un supuesto ataque previsto por Al-Qaeda. También habrá policías vestidos de civiles que están entrenados para detectar actividad sospechosa.

    El Jacob K. Javits Center Convention Center, en la calle 34 oeste y la Avenida 11, será el lugar donde la candidata demócrata Hillary Clinton esperará los resultados en la noche de elecciones. Y a menos de 3.000 metros de distancia de allí, el candidato republicano Donald Trump, tendrá su evento en el hotel New York Hilton Midtown, en la calle 53 oeste y la Sexta Avenida.

  • Estados Unidos, ante el reto de volver a hacer historia

    Donald Trump puso punto final a su campaña electoral con cinco mítines en cinco estados. El último de sus alegatos lo hizo en New Hampshire, estado en el que cosechó su primera victoria en la carrera republicana por la candidatura presidencial. «La pregunta de mañana es: ¿quiénes queréis que gobierne América, la clase política corrupta o la gente?”, aseguró Trump ante una audiencia entregada que le arengaba a construir un muro para frenar la inmigración. Erigiéndose en el candidato del pueblo frente al establishment, el magnate de 70 años prometió a sus miles de seguidores que desmantelará el Obamacare, reconstruirá el Ejército y aplicará una política dura contra la inmigración ilegal. Por su parte, Hillary Clinton puso toda la carne en el asador en Pensilvania, Michigan y Carolina del Norte. «Nos enfrentamos al examen de nuestro tiempo», aseguró Clinton ante alrededor de 40.000 personas en el Independence Hall de Filadelfia, arropada por Obama; la primera dama, Michelle; su esposo, Bill, y su hija, Chelsea. Horas más tarde, la candidata demócrata acabó su último acto de campaña en Raleigh, Carolina del Norte, con unos teloneros de lujo: Jon Bon Jovi, Lady Gaga y el Boss Bruce Springsteen.

    A 24 horas del cierre de los colegios, la ventaja de Clinton en el promedio de los sondeos de ámbito nacional había ascendido hasta el 3,2%, pero la incertidumbre persistía en cada una de las batallas que se libran en estados decisivos.

    Desde The Objective iniciaremos una cobertura especial tanto en redes sociales como en nuestro directo a partir de las 22.00 horas de España.

  • Los EEUU eligen entre dos malos candidatos

    El día 8, como en cada convocatoria electoral de los EEUU, nos jugamos mucho todos, no solo los norteamericanos. Y visto lo visto, seguidas con interés la pre-campaña y la campaña, me malicio que la duda está entre dos malos candidatos. Me lo decía la semana pasada un ex alto cargo de la Embajada que tienen aquí: “Jamás había sucedido algo así. Hemos de elegir entre malo y peor. Ojito con Hillary. No os quedéis con lo estrafalario, obsceno y repulsivo de Trump. Cuando llegue la hora de la verdad, si gana ella quizá la política de defensa, lo que más afecta al mundo, sea mucho más peligrosa y agresiva con Hillary que con Donald. Que el miedo que da un tipo como Trump no empañe la realidad sobre lo que es la Clinton”.

  • Trump supera a Clinton en las encuestas a una semana de las elecciones

    Según un sondeo divulgado por el diario The Washington Post y la cadena ABC News, Trump logra superar en un punto a Clinton (46% frente al 45%). Es la primera vez, desde el pasado mes de mayo, que el magnate inmobiliario supera en apoyo a la ex Secretaria de Estado. El vuelco en esta encuesta supone un sorpasso demoscópico importante, teniendo en cuenta que hace apenas una semana Clinton aventajaba a Trump en 12 puntos. Además, parece que el viento sopla a favor del polémico empresario después de que el FBI haya confirmado que Donald Trump no tiene ningún tipo de conexión con el Kremlin, cuyos comentarios sobre Rusia han generado todo tipo de especulaciones. Tras indagar sobre los ataques informáticos contra el Partido Demócrata, las autoridades descartan que los asesores más próximos de Trump estén detrás.

    Por cierto, aunque se hable poco o nada de ellos, a las elecciones también se presentan el aspirante libertario Gary Johnson, que según las encuestas obtendrá un 3% de los votos, y la ecologista Jill Stein que acapara el 2%.

  • Luz verde para que el FBI investigue nuevos correos del caso Clinton

    Esta nueva acción del FBI en relación con los correos de Hillary se produjo de forma fortuita ya que, según las informaciones, los agentes estaban registrando los archivos de Weiner por un supuesto delito de pederastia y cuando revisaban sus conversaciones con menores encontraron otros correos vinculados al caso Clinton. El ex congresista había estado casado con Huma Abedin, una de las asesoras más próximas a la ahora candidata demócrata a ocupar el Despacho Oval.

  • El voto por correo está con Hillary Clinton

    El voto por anticipado por correo o en persona ha comenzado en 37 estados. Se han depositado más de 12,5 millones de votos, un dato muy superior al de 2012, según información de Associated Press. Los datos reunidos por AP dan indicios de fortaleza demócrata en territorio tradicionalmente republicano. Clinton está mostrando buenos resultados en Florida y Carolina del Norte, dos estados que Trump necesita ganar, así como en los indecisos Nevada, Colorado y Arizona. La coordinadora de la campaña de Trump, Kellyanne Conway, ha llegado a admitir que una derrota en Florida haría mucho más difícil conquistar la presidencia. El voto anticipado también apunta a una posible victoria de Clinton en en Utah y Texas, dos estados de tendencia republicana. Ni siquiera el voto blanco puede impulsar a Trump. Trump podría seguir teniendo ventaja en Ohio, Iowa y Geogria, estados que no le bastarán para obtener la presidencia sin varias remontadas en estados de tendencia demócrata.

    En total, se espera que 46 millones de personas —o hasta el 40% del electorado— vote antes del día de elecciones, el 8 de noviembre.

  • Donald Trump intensifica sus declaraciones contra unos resultados «amañados»

    «Las elecciones están siendo absolutamente amañadas por medios deshonestos y falseadores que apoyan a la fraudulenta Hillary – pero también ocurre en muchos colegios electorales – TRISTE», ha escrito Trump, en el último de los muchos comentarios que ha realizado recientemente cuestionando la imparcialidad de los comicios. Justo después del primer debate entre ambos candidatos, en septiembre, Trump dijo que aceptaría «absolutamente» los resultados que salgan de las urnas, pero a los pocos días, precisó en The New York Times: «Vamos a ver qué pasa».
    Su comentario en Twitter se produjo horas después de que compañero de filas y candidato a la vicepresidencia, Mike Pence, manifestara que los republicanos aceptarán los resultados de los comicios entre Trump y su rival, la candidata del Partido Demócrata, Hillary Clinton. Trump, que va por detrás de Clinton en las encuestas, sobre todo tras el segundo debate, no aportó ninguna prueba de su denuncia. Algunas votaciones en colegios y por correo han comenzado ya en numerosos Estados del país.

  • Los abusos sexuales marcan la campaña presidencial de Estados Unidos

    El diario The New York Times publicó este miércoles los casos de dos mujeres muy diferentes que aseguran haber sido víctimas de toqueteos y abusos del magnate. Una de ellas, Jessica Leeds, de 74 años, afirma que hace más de 30 años empezó a toquetearla sin permiso cuando ambos coincidieron en un vuelo de primera clase hacia Nueva York. «Era como un pulpo», llega a reconocer. Otra mujer, Raquel Crooks, de Ohio, relata que cuanto tenía 22 años y era recepcionista en una empresa en la Torre Trump en Manhattan en 2005 tuvo un encuentro muy desagradable con el empresario. Crooks se presentó a Trump y le estrechó la mano, pero el magnate no se conformó y empezó a besarla en las mejillas, y después, «directamente en la boca». El candidato presidencial republicano rechaza todas las acusaciones, que califica de «ficción» y una artimaña para beneficiar a su rival demócrata, Hillary Clinton.

    Los abusos sexuales se han convertido en el arma arrojadiza durante la campaña. Cuando saltó el escándalo de la conversación de Trump en la que se jactaba de poder tocar a las mujeres por el hecho de ser famoso, el equipo de campaña sacó a la luz para contrarrestar el golpe supuestos abusos sexuales cometidos por el ex presidente Bill Clinton hacia otras mujeres.

  • La tensión marca el primer debate entre Hillary Clinton y Donald Trump

    Armas, seguridad, defensa, economía, terrorismo, política internacional, fueron temas que abordaron los candidatos en la Universidad Hofstra en Hempstead, Nueva York, a la que acudieron, él con corbata azul y no roja como es habitual en él, y ella sí, de rojo. “La cuestión central en estas elecciones es realmente qué tipo de país queremos ser y qué tipo de futuro queremos construir juntos”, respondió Clinton cuando el moderador le preguntó por qué era la mejor candidata. Aseguró que su objetivo es crear “buenos empleos” y una economía “más justa». Trump, fiel a su estilo, fue más agresivo y denunció que «nuestros trabajos se están yendo del país, se van a México se van a muchos otros países. Cientos de empresas están haciendo esto» y se comprometió a tomar medidas para evitar esto, aunque no dijo cómo.
    El debate terminó sin que ninguno de los dos se saliera del guión. Trump hizo notables esfuerzos por no soltar alguno de sus exabruptos a pesar de que Hillary le acusó de racista y de no estar preparado para presidir Estados Unidos. Ella aguantó el tirón y al finalizar parecía satisfecha.

  • La salud de los candidatos, a debate: Clinton se recupera de la neumonía y Trump tiene sobrepeso

    La campaña de la exsecretaria de Estado divulgó una carta de dos páginas elaborada por su doctora personal, Lisa Bardack, donde esta afirma que Clinton “está sana y en forma para ser la presidenta de Estados Unidos” y “recuperándose bien” de la neumonía con antibióticos y descansando. Clinton regresa a la campaña este jueves en un acto en Carolina del Norte y el viernes será entrevistada por el presentador Jimmy Fallon en NBC.

    Con este gesto de transparencia Clinton pretende disipar las dudas sobre su salud, que ha sido objeto de todo tipo de especulaciones y algunos ataques por parte de la campaña de Trump. “No lo sé amigos, ¿vosotros creéis que Hillary Clinton es capaz de estar aquí de pie durante una hora y hacer esto? Yo no lo sé. No lo creo”, ironizó el magnate durante un acto en Ohio. Para seguir con el show, Trump entregó el miércoles una copia de su historial médico al polémico presentador Mehmet Oz durante un programa grabado de The Dr. Oz Show que se emitirá este jueves. El republicano hace alarde de su buena salud, aunque reconoce que debe perder un poco de peso, ya que actualmente roza los 120 kilos.

  • Cómo afectará la neumonía de Hillary Clinton a su campaña presidencial

    Según Donald Trump, que no ha desaprovechado la oportunidad para hacer campaña, sí. El candidato republicano afirmaba que Clinton carece de la “fuerza física y mental para combatir al Estado Islámico y a los muchos adversarios que enfrentamos”. Y es que el episodio alimenta el debate sobre el estado de salud de la demócrata, cuyo golpe llega justo en el peor momento cuando las encuestas muestran como Trump lidera. Además, la presión cada vez es mayor a tan sólo dos semanas del primer debate presidencial. En este sentido, de la velocidad de su recuperación y la forma en que sus enemigos manejen el episodio dependerá en gran medida cómo respondan los votantes a su problema de salud.

    Los problemas de salud son siempre un territorio difícil para los candidatos presidenciales, ya en 2008 la campaña entre Barack Obama y su rival John McCain estuvo marcada por la diferencia de edad entre ambos y el estado de salud del McCain. En esta ocasión, teniendo en cuenta que Trump tiene 70 años y sería la persona de más edad en tomar posesión de su cargo si gana en noviembre, y Clinton sería la segunda de mayor edad, ambos candidatos se enfrentarán a la presión para ofrecer una explicación más completa sobre su salud. Ante los cuestionamientos sobre la salud de Clinton, Barack divulgó el mes pasado una declaración en que afirmaba que la candidata se encontraba “con una salud excelente y en condiciones para ocupar el cargo de presidente de Estados Unidos”.

  • Hackers rusos atacan medios estadounidenses en plena campaña electoral

    El FBI y fuentes de seguridad consideran que el servicio secreto ruso es el promotor de los ataques, ocurridos en los últimos meses. Fuentes de seguridad estadounidenses creen que los ataques podrían formar parte de un ciberataque ruso de mayor escala. En las últimas semanas, el Comité Nacional Demócrata y Hillary Clinton han sido víctimas de ataques de este tipo, que llegaron a empañar las primarias demócratas. Los medios de comunicación suponen un blanco clave para los servicios secretos extranjeros porque cuentan con mucha información sobre el Gobierno del país y tienen numerosos contactos y fuentes cercanas a Washington que pueden ser de gran utilidad para las potencias extranjeras.

  • Las masacres no ponen de acuerdo a demócratas y republicanos para endurecer la venta de armas

    El impacto de la masacre de Orlando, el peor tiroteo múltiple de la historia del país en el que murieron 49 personas, no ha logrado superar los intereses que prevalecen en pleno año electoral. Los legisladores no han logrado un acuerdo que ayude a evitar que personas incluidas en listas de vigilancia por sospechas sobre terrorismo puedan adquirir armas. Ninguna de las cuatro medidas propuestas -dos presentadas por demócratas y dos por republicanos- consiguió los 60 votos necesarios para su aprobación en la Camara alta.

    La iniciativa demócrata propone prohibir la venta a personas que hayan estado en los últimos cinco años en la lista del FBI de sospechosos de terrorismo. Esto por ejemplo hubiese impedido que Omar Mateen se hiciera con el rifle militar que utilizó en el ataque al bar gay de Orlando, ya que entre 2013 y 2014 fue investigado. La propuesta republicana limita el control al momento de la compra. Es decir, si una persona que aparece en ese momento en la lista de sospechosos de terrorismo tratara de comprar un arma, la tienda debería notificarlo al Gobierno, que podría bloquear la venta durante tres días hasta que un tribunal decidiera, en ese período, si aprobara la venta. Esta medida cuenta con el respaldo de la Asociación Nacional del Rifle, el mayor lobby armamentístico del país.

    El consenso en este asunto se hace casi imposible, dada la mayoría republicana que domina tanto el Senado como la Cámara de Representantes.

  • Trump es más favorito que Hillary Clinton

    Las encuestas, encuestas son. Pero el caso es que marcan una tendencia en un momento determinado. Y en base a eso Hillary Clinton lo va a tener muy difícil para cumplir sus aspiraciones. Según sondeos publicados por la cadena ABC News y el diario The Washington Post, la precandidata demócrata tiene un respaldo del 44% frente al 46% del empresario Donald Trump. Sin embargo, si fuese el senador Bernie Sanders el candidato demócrata a la Casa Blanca vencería al magnate por un 50,3% contra 39,5%. Según el diario The Wall Street Journal, la principal razón por la que Trump “se ha comido la ventaja de Clinton es porque goza de un apoyo más amplio entre los republicanos tras su decisiva victoria en las primarias de Indiana”. Los expertos coinciden en señalar que aún queda un largo camino hasta el 8 de noviembre, por lo que los sondeos serán más determinantes después de las convenciones de ambos partidos en la segunda quincena de julio.

     

  • ¿Qué tienen en común Bernie Sanders y Donald Trump?

    Sus críticas contra los intereses de Wall Street y sus promesas para reactivar la tambaleante economía han logrado movilizar a los desencantados de derechas e izquierdas. Eso sí, sus propuestas para el cambio son totalmente opuestas. Sanders propone impuestos a los ricos y Trump quiere construir muros en la frontera, deportar a los indocumentados y emprender guerras económicas con China y México. «Estas son las preocupaciones de las que hablan Trump y Sanders de maneras muy diferentes, pero están apelando a las mismas preocupaciones», asegura Felicia Wong del Instituto Roosevelt a CNN.