Espionaje

Dignidad “hackeriana”

Dignidad “hackeriana”

Hay un cierto halo de misterio que envuelve a los hackers. Si yo fuera hacker haría un llamamiento a los colegas para destapar a este sujeto y ponerlo a disposición de la justicia. La dignidad “hackeriana” lo exige.

Mi móvil es un espía

Mi móvil es un espía

Cuando oigo lo de “pues que no se hagan fotos guarras” de boca de quien sea me hierve la sangre. ¿Si me hago una foto desnuda me merezco que me la roben y la publiquen? ¡Lo que faltaba!

Privacidad infringida

Privacidad infringida

El semanario alemán Der Spiegel, a través de una nueva filtración de documentos por Edward Snowden, revela que los servicios secretos norteamericano y britanico tienen acceso a las redes de telecomunicación alemana.

Espías de película mala

Espías de película mala

La situación actual de la diplomacia internacional me recuerda demasiado a Leslie Nielsen. Sin menospreciar el talento del histórico actor fallecido que ha logrado que hasta al más desaborío arranque a reír, la relación entre países occidentales es de película.

El valor de la basura

El valor de la basura

Hace ya tiempo que la relación entre Estados Unidos y Alemania viene soltando bastante basura. Ahora al parecer se incrementa la cantidad de esta en sus relaciones anunciando que Alemania también espía al gigante americano.

Espía como puedas

Espía como puedas

Fisgamos y nos acechan. Birlamos información y nos la roban. Distinto sería si este artículo lo estuviera aporreando desde una máquina de escribir, como una Jessica Fletcher con escote, pues más de un crimen he escrito.

Escribir para siempre

Escribir para siempre

Es que en un concierto puede sonar explícito una máquina de escribir, la carga de una caballería, un cañón, o un barbero de Sevilla. Pero no un ordenador. Los ordenadores no han traído aún mejores escritores.

eDiógenes

eDiógenes

Creo que nadie se libra del síndrome de eDiógenes, que es la tendencia a acumular información obsesivamente en nuestros aparatos, un mal mucho más dañino que el propio síndrome de Diógenes ya que en este hay un límite.

La vuelta atrás

La vuelta atrás

La edad de aprender es la primera, cuando nos íbamos a la Gran Vía en verano, y al subir nos encontrábamos al calor bajando por la calle, ese sopor soleado que asfixia a la Gran Vía tras el viento que suele soplar, como si diera al mar, en las esquinas de la plaza de España.

¿Te espía tu pareja?

¿Te espía tu pareja?

Las dudas acechan. La incertidumbre te ahoga. Hay algo que te hace sospechar que la persona con la que compartes tu vida podría tener ojos para alguien más. No puedes seguir así. Existen dos opciones para poner fin a ese pesar: convertirte en espía o confiar la misión a un detective profesional. Los métodos y las leyes han cambiado, pero las parejas siguen recurriendo a todo tipo de medios para responder a la gran pregunta. Pero, ¿te has parado a pensar si es legal espiar a tu pareja? ¿Es moral? ¿Crees que te están espiando? He aquí algunas respuestas.

La gente

La gente

La gente es una entidad nebulosa que engloba todo lo que no es uno. Es un recurso lingüístico y político sin el cual tendríamos que enfrentarnos a la frustrante conclusión existencial de que, en realidad, son yo mismo con otras circunstancias.

Machitos

Machitos

No quiero ni imaginar el dineral que costarán los equipos que llevan encima esos tres hombres. No quiero imaginar tampoco la cantidad de talento humano que habrá hecho falta para crear toda la tecnología que utilizan en sus trabajos.

El factor humano

El factor humano

El espionaje supo envolverse en elegancias cuando a la hora de la verdad Bond no era más que un funcionario. La ficción nos dejó un elenco cumplido de personajes y matices, del melancólico Smiley a ese Harry Palmer menos propenso al champagne que a la cerveza.

Vigilantes

Vigilantes

Enemigos de internet. EE.UU., India y Reino Unido. Suena rotundo el pronunciamiento de Reporteros sin Fronteras (RSF), que así designa a estos tres países tras constatar que han espiado a millones de ciudadanos.

Datos

Datos

En 1978, Octavio Paz llamó a los Estados “ogros filantrópicos”: querían saber hasta el último detalle de tu vida por tu bien. Las empresas de tecnología están hoy haciendo lo mismo -y quizá las estamos alimentando con aún más entusiasmo que al Estado.

Espías

Espías

Hasta hace no mucho, todos dábamos por hecho que estábamos renunciando a parte de nuestra privacidad, pero no sabíamos hasta qué punto. La información relacionada con la NSA nos ha asustado

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