«Vamos a eliminar tareas aburridas, repetitivas, peligrosas, y vamos a liberar a personas para que hagan cosas de mayor valor», explicó el cofundador de Zume Alex Garden, un exdirectivo de Microsoft y presidente del estudio de juegos móviles Zynga Studios. En Silicon Valley y otros lugares, nuevas empresas tecnológicas fabrican robots para hacer hamburguesas gourmet y BistroBot, otra firma de San Francisco, ha diseñado una máquina que prepara sándwiches ante la mirada de los clientes.
La automatización del trabajo se está introduciendo en uno de los sectores que más empleo genera en Estados Unidos: los restaurantes de comida rápida. Un avance que podría poner en peligro los puestos de trabajo de miles de personas. Los fundadores de Zume señalaron que la empresa no tiene previsto eliminar a ninguno de sus aproximadamente 50 empleados, sino trasladarlos a nuevas tareas conforme los robots asumen más labores de cocina y la empresa abre nuevos locales. «Siempre habrá un modelo aquí en Zume en el que robots y humanos trabajan juntos para crear comida deliciosa», aseguran.
Sin embargo el ex CEO de McdDonald Ed Rensi ya advirtió que sería más rentable comprar un robot que pagar salarios a personas con puestos insignificantes. «Es más barato comprar un brazo robótico que contratar a un empleado ineficiente que gana 15 dólares la hora por embolsar patatas fritas’.