Por qué conocer tu genética es decisivo para combatir la depresión
La genética es fundamental para comprender los mecanismos de la depresión, por qué unas personas tienen una tendencia mayor a sufrir esta enfermedad. Ahora, una investigación de la Universidad de Carolina del Norte ha indagado en este asunto y ha detectado hasta 44 variantes del genoma que están directamente relacionadas con la depresión, cuando hasta ahora había localizadas únicamente 14.
La genética es fundamental para comprender los mecanismos de la depresión y para averiguar por qué unas personas tienen una tendencia mayor que otras a sufrir esta enfermedad. Ahora, una investigación de la Universidad de Carolina del Norte, Estados Unidos, ha indagado en este asunto y ha detectado hasta 44 variantes del genoma que están directamente relacionadas con la depresión, cuando hasta ahora había localizadas únicamente 14.
En este artículo publicado en la revista especializada Nature Genetics se especifica que seis de estas variantes están vinculadas a la esquizofrenia. “Este estudio cambia las reglas del juego”, explica Patrick F. Sullivan, coautor de la investigación y profesor de Psiquiatría en esa universidad. “Descubrir la base genética de la depresión ha sido realmente difícil. Un gran numero de investigadores en todo el mundo ha colaborado en este trabajo y ahora tenemos una mirada más profunda sobre la esencia de esta terrible enfermedad”.
De esta manera, el profesor asume que los hallazgos permiten arrojar luz en la búsqueda de soluciones, que serán aplicables a la hora de recetar terapias mejoradas: este descubrimiento es imprescindible para desarrollar fármacos antidepresivos e incluso para su “prevención”, resume Sullivan.
En España sufrieron depresión casi 2,5 millones de personas en 2015, el 5,2% de la población
Por su parte, su compañera y coautora Naomi Wray, de la Universidad de Queensland, revela que “todos tenemos variantes genéticas para la depresión”. Sin embargo, han podido comprobar que hay quienes son “más susceptibles” para ello. “Sabemos que muchas experiencias de vida contribuyen en el aumento del riesgo de sufrir de depresión”, continúa, en declaraciones recogidas por Futuriry, “pero identificar los factores genéticos abre nuevas puertas para la investigación de los factores biológicos”.
Entre los otros hallazgos del estudio, se encuentra que la base genética de la depresión se “superpone” decididamente en el surgimiento de trastornos de bipolaridad y esquizofrenia. Pero no solo sobre estos desórdenes: también sobre trastornos del sueño e incluso con la obesidad.
“La depresión es uno de los problemas de salud pública más graves del planeta”, sostiene Steven E. Hyman, exdirector del Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos en declaraciones para la misma revista. “Pese a las décadas de esfuerzo, tenemos muy poca información sobre la influencia de los mecanismos biológicos”, agrega. “Este infortunio nos ha dificultado seriamente el desarrollo de tratamientos, dejando a muchas personas que sufren depresión con pocas opciones».
“Por eso”, concluye, “este estudio es histórico: se trata de un paso importante en el esclarecimiento de los fundamentos biológicos de la depresión”. Y esto se debe, fundamentalmente, por la profundidad del trabajo, que ha analizado los casos de 135.000 pacientes de distinta edades.
En España, casi 2,5 millones de personas fueron diagnosticadas con depresión en 2015, según los datos proporcionados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esto representa al 5,2% de la población y un aumento del 18,4% desde 2005. Desde el punto de vista global las cifras no son más esperanzadoras: más de 322 millones de personas, más del 4% del total, y 264 millones de ellas padecen también ansiedad.
Esta enfermedad provoca, además, 788.000 suicidios cada año en el mundo, según la OMS.