Así es la primera granja flotante del mundo en un puerto urbano
La primera granja flotante del mundo en un puerto urbano ya está en marcha. La ciudad holandesa de Rotterdam estrenará a finales de año la Floating Farm, que ya está construyendo Beladon en el puerto de Merwehaven, y que contará con 40 vacas de raza Montbéliarde que serán ordeñadas de manera automática por robots y que se estima que produzcan 800 litros de leche diarios.
La primera granja flotante del mundo en un puerto urbano ya está en marcha. La ciudad holandesa de Rotterdam estrenará a finales de año la Floating Farm, que ya está construyendo Beladon en el puerto de Merwehaven, y que contará con 40 vacas de raza Montbéliarde que serán ordeñadas de manera automática por robots y que se estima que produzcan 800 litros de leche diarios. No en vano, producir alimentos es un desafío creciente para una población mundial que crece de manera intensiva. Después de todo, cada vez hay menos tierras agrícolas aptas para producir alimentos. Las ciudades del mundo se están expandiendo para satisfacer la demanda de viviendas, de modo que el ciudadano literalmente se aleja cada vez más de la agricultura. Es por ello, que Holanda apuesta por este proyecto que acerca mucho más la granja al consumidor final.
La importancia de acortar distancias
En los Países Bajos, el transporte agrario supone un tercio del transporte de mercancías. La producción de alimentos cerca de las zonas donde viven los consumidores en las ciudades reducirá significativamente la cadena de suministro.
A Peter van Wingerden, ingeniero de la empresa, se le ocurrió la idea en 2012 cuando estaba en Nueva York trabajando en un proyecto para construir una casa flotante en el río Hudson. Cuando estaba allí, la ciudad fue azotada por el huracán Sandy. Las calles se inundaron y la red de transporte quedó paralizada. Las entregas de productos comenzaron a complicarse y, a los poco días, era casi imposible encontrar alimentos frescos en las tiendas.
«Al ver la devastación causada por el huracán Sandy, me di cuenta de la necesidad de producir alimentos lo más cerca posible de los consumidores», asegura Van Wingerden a BBC. «Ahí surgió la idea de producir alimentos frescos (para adaptarnos a los cambios del clima) en el agua».
A pesar de las dudas iniciales por el ruido y el olor, el puerto le concedió a Beladon un espacio para crear un prototipo. Desde entonces, la granja ha empezado a cobrar forma y, a comienzos del verano, la plataforma flotante fue trasladada desde el norte de Holanda hasta Rotterdam.
¿Granja sostenible?
Así lo aseguran sus creadores, ya que defienden que a pesar de que las áreas urbanas no parezcan a primera vista los lugares más lógicos para una granja, reducir la distancia que recorren los alimentos hasta llegar a los consumidores tiene mucho sentido desde el punto de vista medioambiental, ya que reduce la contaminación generada por el transporte.
«Con el objetivo de que nuestra cadena alimenticia sea menos vulnerable al cambio climático (inundaciones) y para reducir la carga soportada por el medio ambiente al limitar las pérdidas de comida y el uso de los medios de transporte, consideramos que la solución es una granja flotante de alta tecnología en la ciudad, donde haya espacio para instalarla», aseguran desde Beladon. «La Granja Flotante puede contribuir a la creación de un sistema alimenticio autosuficiente de manera sostenible y eficiente».
La granja, de tres pisos y anclada en el lecho oceánico, tiene como objetivo reutilizar y reciclar todo lo posible. «Al menos el 80% de lo que comerán nuestras vacas serán productos de descarte de la industria alimentaria de Rotterdam», explica el director general del proyecto, Albert Boersen. La granja también generará parte de su energía con paneles solares.
Además, una parte de la producción de alimentos para las vacas (pasto) se producirá dentro del propio recinto flotante. La instalación es una instalación piloto donde, además del pasto, también se está investigando el cultivo de hierbas y el cultivo de frutas con LED. Cuando esté funcionando a pleno rendimiento, el establecimiento producirá leche pasteurizada y yogurt para venderlo a Rotterdam. También procesará y venderá el estiércol de las vacas.
Según Fenton Beed, trabajador de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), las granjas urbanas son útiles porque tienden a utilizar menos agua, fertilizantes y pesticidas que los sistemas de producción convencionales y contribuir a la sostenibilidad. Pero, ¿es sostenible ganar terreno al mar para construir edificios?; ¿No se destruye el lecho marino con la construcción de estos edificios? La polémica está servida.