La cara de perro de Natalia Lafourcade a Maluma, el discurso de Jorge Drexler y lo mejor de los Grammy latinos
Los Grammy latinos nos dejaron una noche de emociones donde Uruguay se llevó su segundo gran reconocimiento cultural en 48 horas tras el Premio Cervantes de este año, que se fue para la poeta extraordinaria Ida Vitale, con los tres galardones que se llevó el músico Jorge Drexler, que tiene alma de trovador. «Viva Borges, Pessoa, la cumbia, el reggaetón. Vamos, arriba», reivindicó en su discurso en Las Vegas, con un mensaje inclusivo para todos los géneros: no importa si hablamos de flamenco, pop o reggaetón; por encima de todo está la música.
Los Grammy latinos nos dejaron una noche de emociones donde Uruguay se llevó su segundo gran reconocimiento cultural en 48 horas tras el Premio Cervantes de este año, que se fue para la poeta extraordinaria Ida Vitale, con los tres galardones que se llevó el músico Jorge Drexler, que tiene alma de trovador. «Viva Borges, Pessoa, la cumbia, el reggaetón. Vamos, arriba», reivindicó en su discurso en Las Vegas, con un mensaje inclusivo para todos los géneros: no importa si hablamos de flamenco, pop o reggaetón; por encima de todo está la música.
¡Felicidades! @drexlerjorge Mejor Álbum Cantautor 🎶👏👏👏 #LatinGRAMMY pic.twitter.com/YPXxJosa8p
— Latin GRAMMYs (@LatinGRAMMYs) 15 de noviembre de 2018
Una idea que se esforzó por mantener J. Balvin, una salvación para la música en castellano, que reclamó el protagonismo defenestrado por la crítica del género urbano más escuchado en nuestro tiempo. «A todos los que representan este género un poco discriminado, aquí seguimos luchando. El reggaetón ha salvado vidas, ha ayudado a gente a dejar la calle. Es hora de crear nuevas leyendas, de que la gente en la calle quiera ser como nosotros, porque también somos un ejemplo de vida. Somos el futuro de la música».
Una opinión que, interpretando la cara de perro que puso Natalia Lafourcade cuando Maluma recogió el premio a mejor canción pop, no parece compartir la mexicana. Su gesto habla por sí solo y decenas de tuiteros se mojaron por ella: ¡nos representas!
Natalia Lafourcade nos representa a muchísimos. #LatinGRAMMY pic.twitter.com/GqZmxK097u
— Agustín G. (@suguslandia_) 16 de noviembre de 2018
Más cuando celebró de esta manera el éxito indiscutible de Drexler.
Cuando no gana un reggaeton en los #LatinGrammy ❤️👏🏽 pic.twitter.com/1KgWjsLQw8
— Ale Hernández M. (@alehdezm) 16 de noviembre de 2018
Tampoco pasó desapercibida otra representación mexicana: Maná. La banda inmortal recibió el reconocimiento a Persona del Año y para aquellos que llevamos tiempo sin saber de la vida del grupo nos llamó la atención un detalle: ¿en qué momento el vocalista (Fernando Olvera) se convirtió en Micky Rourke?
Que bien que Mickey Rourke ahora es el líder de Maná #LatinGRAMMY pic.twitter.com/xKzr1I3auJ
— lamascarada (@lamascarada) 16 de noviembre de 2018
Por cierto, Rosalía fue otra de las protagonistas de la noche. Su Malamente le permitió llevarse dos premios en categorías distintas –Mejor fusión/interpretación urbana y Mejor canción alternativa– y su discurso no tuvo desperdicio. Con la humildad que le caracteriza, tampoco hace tanto que era una chica anónima en Barcelona, se acordó de los ídolos de adolescencia, de las mujeres que abrieron el camino en la industria de la música y de su hermano, el Guincho, con quien trabaja hombro con hombro, desde el tiempo en que “no tenían dinero ni nada”.
¿Sabíais, además, que a sus 25 años ha hecho historia al ganar dos Grammy latinos con un solo tema y se convierte en la española con más Grammy latinos por un único trabajo?
Pero otros españoles recibieron honores igual de reseñables. Manolo García fue distinguido en la categoría de Mejor Álbum de Pop/Rock, con Geometría del rayo –por el que lo entrevistamos en The Objective– y Carlos Sadness se hizo con el premio al Mejor Diseño por Diferentes tipos de luz, obra del propio cantante y compositor barcelonés. También Enrique Bunbury, que un día vaciará Ikea para colocar tantos Grammy, se llevó otro por el Mejor álbum de rock del año: Expectativas.
