Viktoria Modesta, la artista con una pierna biónica que ha conquistado París
A los 20 años, la artista se sometió a una cirugía voluntaria para amputar la parte de su pierna izquierda afectada por una malformación
La modelo, cantante y bailarina Viktoria Modesta es todo un ejemplo de superación. Con una pierna biónica ha logrado subirse al escenario del cabaret Crazy Horse de París, con casi siete décadas de historia.
Nació en Letonia en 1988 pero ha pasado una gran parte de su vida en Reino Unido. Sin embargo, los años que pasó en su país de origen, entonces una república soviética, marcaron para siempre su vida.
Debido a una negligencia médica durante el parto, Viktoria Modesta tuvo que vivir durante años con una malformación en la pierna que provocó el rechazo de la sociedad y que la obligó a pasar gran parte de su infancia ingresada en hospitales. “La vida de Viktoria Modesta es un camino de exploración y de sobrepasar las barreras humanas”, explica en su página web.
La amputación, el comienzo de una nueva vida
A los 15 años, comenzó a trabajar como modelo para “marcas de ropa alternativa”, según explica en su web, y fue ahí cuando se dio cuenta de que “realizar sus sueños y explorar su potencial no era posible con la incertidumbre de su pierna disfuncional”, que se había convertido “en una barrera después de 15 operaciones”. Por eso, tras pasar toda su vida de hospital en hospital y después de cinco años tratando de convencer a los médicos, a los 20 años, la artista se sometió a una cirugía voluntaria para amputar la parte de su pierna izquierda afectada por la malformación.
“En muchas formas, este fue el verdadero comienzo de la vida creativa de Viktoria Modesta y el final de las frustrantes limitaciones”, explica en su página web.
Poco después de la “transformación”, como ella lo llama, se embarcó en diferentes proyectos creativos que “dieron forma a su identidad”. “Después de años sin participar en las cosas que le gustaban, empezó a desarrollar el mundo artístico que durante mucho tiempo había querido crear”.
En el año 2012, Viktoria Modesta actuó con una prótesis de cristales de Swarovski en la clausura de los Juegos Paralímipicos de Londres ante un público formado por 90.000 personas.
Más tarde, en 2014, su fama creció gracias al vídeo de su canción Prototype, en el que aparecía con una pierna protésica con diferentes formas y adornos.
Desde entonces, su nombre ha aparecido en numerosas publicaciones, especialmente en las especializadas en moda, y ha participado en desfiles y espectáculos como el Bionic Showgirl del cabaret Crazy Horse.
Redefinir la discapacidad
Viktoria Modesta no solo ha hecho de su discapacidad su trampolín hacia la vida que quería como artista, sino que además ha decidido llevar a cabo actividades de concienciación y asesoramiento para tratar de mejorar la vida de personas con una discapacidad similar. Con frecuencia, la artista da charlas en las que asesora a las marcas sobre el futuro del estilo de vida de las personas con discapacidad e inversiones con un impacto social.
Además, está trabajando en un negocio de moda y prótesis con la esperanza de mejorar la vida de mujeres con miembros amputados como ella.