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Economía

Un plan asequible para desintoxicar tu cuerpo tras el verano

Se terminan las vacaciones, regresamos a la temida rutina, los días de playa, de sol, de relax, de dormir hasta tarde han culminado y todos en casa debemos retomar el ritmo diario.  Han sido unas semanas de disfrute, de compartir con amigos, de comer de forma más relajada, de muchos helados y tragos viendo los atardeceres con los amigos y la familia, días de ejercitarnos menos. Al regresar además del estrés que puede ocasionar el volver a las tareas cotidianas, notamos que tenemos un par de kilos extra. En este INVESTIGATIONS te ofrecemos algunas recomendaciones que seguro te ayudarán a recuperar la figura y a adaptarte a la rutina.  

Arranca el día con el pie derecho

Comienza tu día tomando agua tibia con un chorrito de jugo de limón, nos ayuda a alcalinizar el cuerpo y a eliminar toxinas, además de hidratarlo.

Durante las vacaciones comemos más comida basura e ingerimos más alcohol de lo normal, por eso los probióticos son una buena fuente para ayudarnos a regular la flora intestinal que se ha visto afectada por estos excesos.

Aprovecha las frutas y vegetales de la estación. Incluye en tu desayuno un buen zumo para desintoxicarte. Puedes preparar zumos verdes. Mezcla por ejemplo, espinacas, con célery (apio), pepino y una manzana (pera o piña).  Si comes melón o sandía, cómelas solas, no las mezcles con otras frutas.

Espera una media hora después del zumo y luego desayuna, no salgas de casa sin desayunar, esta es la comida más importante. Agrega alguna proteína en el desayuno, esto nos mantiene satisfechos durante más tiempo.  Si no tienes tiempo de esperar entre el zumo detox y tu desayuno, llévalo contigo y tómalo como merienda de media mañana.

Evita los ataques de hambre llevando meriendas saludables

Puedes comer nueces si te da un ataque de hambre en la tarde. Recuerda ingerir no más de 12 al día ya que aunque son grasas buenas y necesarias, en exceso también engordan.  Además, una manzana a las 4 de la tarde te ayudará a llegar sin tanta hambre a la cena, y así evitarás comer algún dulce.

Elimina el alcohol por un par de semanas, olvida el aperitivo, y toma mucha agua durante el día. Incluye las infusiones y el té verde, este último hace maravillas pues, además de ser un diurético, te llena de energía.

Come muchas ensaladas, vegetales, pescados y carnes magras en general. Es importante que tu plato incluya durante el almuerzo, un pedazo de proteína, además de vegetales y ensaladas y algún carbohidrato como quinua, arroz integral, batata dulce.  Si puedes evita las patatas y las harinas procesadas.

¡A mover el esqueleto!

Ejercítate por lo menos treinta minutos diarios, no importa cual sea la actividad que hagas, ve caminando al supermercado o saca al perro, lo que importa es que muevas tu cuerpo.

La nutricionista y CEO de la página web yourdietmethod.com, Andrea Castellanos, explica sobre el ejercicio físico que es importante intentar ejercitarnos al menos 3 veces a la semana. “El mecanismo con el ejercicio es igual que con la comida. Tienes que planificarte. Lo más importante es tomar un calendario y escribir los días que puedas hacer actividad física y los días que no”.

No olvides descansar

Castellanos añade que para empezar la rutina con energía es fundamental retomar el orden en el dormir. Acuéstate más temprano, hasta que el cuerpo y la mente se acostumbren de nuevo a las actividades diarias. Para que el cerebro y cuerpo funcionen óptimamente tienen que estar descansados. Es necesario dormir entre 6 y 7 horas.

La experta también acota que un tip para lograr la meta de comer sano es que las comidas se planifiquen el día antes de empezar la rutina. Probablemente un domingo. “Escriban y cocinen las comidas que están a su alcance”, añade.

Otro consejo para perder peso es establecer una rutina de beber agua diariamente. Uno debe tomar entre 1 litro y medio a 2, para mantener el peso y 3 litros diarios si el objetivo es perder peso.

Cambia tu mentalidad y olvídate de la culpa

“Es necesario cambiar el “mindset” (mentalidad), es decir, dejar atrás lo que pasó: los dulces que comiste y las bebidas que ingeriste, y empezar de nuevo, sin culparte de nada. Es como cuando regresas de viaje, generalmente es necesario un día para entender que has regresado a casa”, acota Castellanos.

Para bajar los kilitos de más ganados en el verano, también ayuda mucho trazarse metas a corta plazo. Una meta a un mes, una a 3 meses y otra a 6 meses.  Para más consejos visita las páginas:  www.healzygusto.com y yourdietmethod.com/es/.

 

Por: Zuleima Mamie y Anna Carolina Maier

 

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