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¿Qué pasa tras el fracaso de la investidura de Sánchez? ¿Es inevitable ir a elecciones?

El artículo 99 de la Constitución es el que regula este procedimiento: da un plazo de dos meses para los partidos vuelvan a negociar y elijan a un presidente

¿Qué pasa tras el fracaso de la investidura de Sánchez? ¿Es inevitable ir a elecciones?

Pedro Sánchez ha fracasado en su intento de ser investido como presidente del Gobierno. ¿Qué pasa, entonces, ahora? ¿Estamos abocados a unas nuevas elecciones?

El artículo 99 de la Constitución es el que regula este procedimiento. En caso de una investidura fallida, la Constitución da un plazo de dos meses para los partidos vuelvan a sentarse a negociar y traten de elegir a un presidente.

Será el Rey, de nuevo, quien haga su ronda de consultas y proponga un candidato. Así, tanto Pedro Sánchez puede volver a presentarse como otro representante político puede intentarlo.

De momento, el monarca ha decidido no abrir una nueva ronda de consultas con los partidos para dar un margen para negociar a las formaciones políticas.

El procedimiento es el mismo: una primera votación en la que se necesita mayoría absoluta, fijada en 176 votos, y una segunda, que se realizará 48 horas después, en la que hacen falta más síes que noes, es decir, una mayoría simple.

El cronómetro de estos meses empezó a contar desde el martes 23 de julio, fecha de la primera votación. Por lo que el plazo termina el 23 de septiembre. Si entonces el Congreso no ha aprobad la investidura de un presidente, el rey disolverá las Cortes —tanto el Congreso como el Senado— ese mismo día.

El 24 de septiembre, al día siguiente, el BOE publicará el real decreto de una nueva convocatoria electoral. El 25 empieza otra cuenta atrás: 47 días para volver a ir a votar. Esto supone que la fecha de unas nuevas elecciones sería el 10 de noviembre.

Al ser una repetición electoral por una investidura fallida, los plazos son más cortos 47 días en vez de 54 para convocarlas, y ocho jornadas de campaña, en vez de 15 días. Así quedó recogido en la modificación de la Ley del Régimen Electoral General (LOREG) en 2016, cuando había riesgo de que Mariano Rajoy no pasara la investidura y la repetición de las elecciones cayera el 25 de diciembre.

Si se llama a las urnas este noviembre de 2019 serían los cuartos comicios generales en los últimos cuatro años. Además, se convertiría en la primera vez en democracia que hay dos elecciones generales en el mismo año.

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