La nueva generación de los condones: veganos, feministas y de 60 tamaños
El diseño del condón ha cambiado muy poco desde 1950. A pesar de ser uno de los mejores preservativos para prevenir embarazos e infecciones de transmisión sexual, lo avances que buscan romper tabúes, que parecían ya rotos, apenas comienzan a escucharse con más fuerza gracias a numerosos startups.
El diseño del condón ha cambiado muy poco desde 1950. A pesar de ser uno de los anticonceptivos más fiables y de prevenir infecciones de transmisión sexual, lo avances que buscan romper tabúes, que parecían ya rotos, comienzan a escucharse con más fuerza gracias a numerosos startups.
Condones veganos, de más de 60 tamaños y otros que pretenden empoderar más a la mujer sobre su vida sexual están entre los más codiciados.
Aunque parezca extraño, ya que estamos en 2017, el diario británico The Guardian ha hecho referencia a un estudio de la organización benéfica de salud sexual inglesa FPA en Reino Unido, que destaca que comprar condones todavía genera vergüenza en la gente.
La encuesta, realizada el año pasado a 2.000 personas, reveló que casi uno de cada cinco ciudadanos se siente avergonzado al comprar condones. Además, casi uno de cada 10 entrevistados señaló que creía que todavía era un tabú que las mujeres los compraran y los llevaran a las citas.
Más de uno de cada cinco respondió que al menos en alguna ocasión había dejado de usar condones durante el sexo porque no lo disfrutaba tanto. «Necesitamos reconocer que algunas personas tienen experiencias desagradables ante el uso del condón», ha dicho para el medio inglés Bekki Burbidge de FPA.
Romper las barreras
Farah Kabir y Sarah Welsh, creadoras de la marca Hanx, han relatado cómo este fue el principal argumento para lanzar su producto. Una nueva empresa de condones que busca que la mujer “tome el control de su vida sexual” y se sienta “orgullosa de hacerlo”, según su web.
Kabir le contó a Welsh, que es ginecóloga y su amiga, que había ido en un descanso del trabajo a comprar condones y en la fila de la caja de la farmacia se encontró con su jefe. Sintió una profunda vergüenza y a su vez la necesidad de cambiar sus propias barreras.
Es así como en 2017, este par creó lo que llamaron “condones de lujo para hombres, diseñados por mujeres”. Vienen en unas cajitas discretas y elegantes, de modo que las mujeres se sienten bien al comprarlos, aseguran sus creadoras. Además, se pueden adquirir través de internet, en tiendas de ropa interior o centros de yoga, por lo que puede resultar menos vergonzoso para aquellas que, como Welsh, no se sienten tan cómodas yendo a una farmacia para adquirirlos.
Estos condones son veganos. No es que sean para comer, sino que el material es más sano, tanto para el que los usa, como para los que los producen. La mayoría de los condones contienen un subproducto animal llamado caseína, que ellas han reemplazado con una alternativa de planta, por lo que han sido aprobados por The Vegan Society.
Su web también destaca que están hechos de látex 100% natural, su producción funciona bajo la filosofía del “comercio justo” y tienen un aroma a «limpio», ya que la misma investigación de la FPA reveló que muchas mujeres se desaniman a usar condones por su olor.
De todos los tamaños
Otra de las innovaciones para la nueva generación de condones va más dirigido al público masculino. Se trata de la marca myONE, lanzada en Estados Unidos a inicios de este mes y que llegará a Reino Unido en San Valentín del próximo año.
La web promociona sus condones bajo la campaña «Perfect Fit» (que te van perfecto). Incluye 60 tamaños de preservativos gracias a las combinaciones para 10 longitudes y 9 anchuras. Su CEO ha criticado que los existentes tan solo logran quedarle perfectamente al 12% de la población. “(myONE) Incluye tamaños más pequeños y más grandes de lo que anteriormente estaban disponibles para los usuarios de condones en los Estados Unidos. Con 60 tamaños de preservativos, myONE está diseñado para abordar finalmente las principales quejas sobre los condones: que no se ajustan y que son incómodos”.
Otros que se unen a esta nueva generación, son los condones Hex, creados por la marca de juguetes sexuales sueca Lelo. La estructura molecular hexagonal fue la inspiración para la invención. Un paquete de 36 cuesta 29.90 libras esterlinas, pero la web asegura que son la última tecnología en sensaciones. “La estructura de 350 hexágonos interconectados permite transmitir el calor corporal para obtener mayor sensibilidad”, destaca.
Hex explica su origen: “Existe una razón por la que los panales de abejas tienen la forma que tienen. La Naturaleza es sabia, las libélulas lo saben, Fibonacci (el matemático italiano) lo sabía, y nosotros lo sabemos: los hexágonos son fuertes, simétricos, regulares y forman teselados perfectos para combinar ligereza y resistencia”, destaca la página.
Entre la lista de estos startups también está la marca TheyFit, con una propuesta similar a la de myONE. La empresa ha creado condones de 66 tamaños distintos utilizando 10 tipos de largos y 10 distintas anchuras. Además, el hombre puede entrar en la página web para saber cuál es que mejor le queda e incluso crear uno de su tamaño.
Entre toda esta variedad, hay unas desarrolladoras que esperan transformar la vida sexual por otros medios. Es el caso de las fabricantes de Flex, un dispositivo al que llaman disco menstrual -parecido a un anillo pero que protege como si fuese un tampón- para que las mujeres lo coloquen en la base del cuello uterino y puedan tener relaciones sexuales mientras tienen el periodo sin causar «desórdenes», como reseña su sitio web.
Por 15 dólares se puede recibir un paquete de 24 anillos de prueba. Cada uno dura hasta 12 horas puesto. Le hace una fuerte competencia a los tampones.