Anna Delvey, la estafadora que conquistó Nueva York será protagonista de la nueva serie de Shonda Rhymes en Netflix
Tal vez tenía tanto dinero que perdió la cuenta. Alguien tenía que pagar las cuentas de la fabulosa vida de Anna Delvey, la ciudad estaba llena de posibles víctimas. De artículo de historia real a The Cut a serie de Netflix.
Se hizo pasar por heredera y vivió de lo grande en las altas esferas de Nueva York. Su historia se convirtió en un artículo viral de The New York Magazine y ahora será serie.
Desde hace unas semanas una historia ronda con fuerza Internet. De hecho, ha tenido tanto éxito que los derechos para adaptarla han sido adquiridos por Netflix, que ya tiene a Shonda Rhymes a bordo para contarla a través de una serie. El reportaje fue publicado por The New York Magazine y escrito por Jessica Pressler, aunque Vanity Fair también sacó una historia escrita por una de las personas involucradas.
“Tal vez tenía tanto dinero que perdió la cuenta. Alguien tenía que pagar las cuentas de la fabulosa vida de Anna Delvey, la ciudad estaba llena de posibles víctimas”, el artículo de Pressler, es una extensa revisión de la impresionante historia de esta joven estafadora que durante meses se hospedó en un caro hotel, organizó cenas, consiguió el apoyo de bancos para establecer una “fundación de arte”, hizo compras en tiendas de diseñador, pagó en efectivo cuentas exorbitantes y luego hizo a más de una persona normal (nada de millonarios) desembolsar cantidades absurdas de dinero para pagar por ella (los detalles es mejor no saberlos antes de leer el artículo… o ver la serie).
Una vez leída es fácil entender por qué se llevará a la televisión. Igualmente, revisemos por qué Anna y su historia estarán muy a gusto en la pantalla.
La protagonista es joven y guapa
Anna Delvey, una joven veinteañera originaria de “Alemania”, era fotogénica, guapa y se vestía bien. Rubia, con ojos claros (normalmente cubiertos por enormes gafas de sol) y siempre ataviada de los últimos diseños de los mejores diseñadores, Delvey proyectaba a la vez vulnerabilidad y distancia. De hecho, uno de los comentarios comunes entre quienes la conocieron es que tenía pocos modales y siempre quería que se hiciese lo que ella quería (¿y qué heredera joven no es así?).
Este perfil permite a una serie tener una protagonista atractiva y seleccionada entre las actrices más populares de menos de 30 años (que hay bastantes) y además hacer un diseño de vestuario alla El sexo y la ciudad o Gossip Girl. Y además, la historia provee una antiheroína a la cabeza, algo muy de moda últimamente.
El estilo de vida
Como probaron las mismas El sexo y la ciudad o Gossip Girl, entre otras muchas ficciones centradas en la vida de gente con dinero, el #wealthporn (porno millonario) ha probado que funciona y seguir a una “socialité” en sus cenas, fiestas, compras, viajes e inauguraciones de galerías rodeada de la crema y nata de Nueva York es algo a lo que pocos pueden resistirse, solo aunque sea por el componente de chisme y de visitar un mundo desconocido.
La estafa
Como han probado películas como Ocean’s 11, y hace unos días, Ocean’s 8, o Atrápame si puedes las historias sobre elaboradas estafas siempre tienen público. Hay algo seductor en el personaje de alguien capaz de pensar maneras retorcidas de conseguir dinero que no se le ocurren a alguien normal y que precisamente por ello funcionan. Es una suma de envidia, desprecio y admiración que, si se maneja bien, asegura espectadores.
La creadora
No sólo está el reportaje original, escrito de manera genial y muy lleno de detalle, sino que la adaptación cuenta con Shonda Rhymes, quien sabemos es capaz de sumar melodrama, comedia, humor negro y surrealismo en una misma narración sin ningún problema. Y además, tiene en su equipo a la cineasta Neff Davies, amiga cercana de Delvey, que aparece en la historia como la concierge de su hotel mientras estudiaba en la escuela de cine.
El personaje original
Delvy, aka Anna Sorokin, está actualmente en prisión mientras espera por la condena que se le asigne por sus delitos de estafa, pero Anna es todo menos discreta o silenciosa. Como la describían quienes la conocieron, es una persona que piensa que la vida le debe cosas ¿por qué? Nadie lo sabe. De hecho, Delvey le contó a Davies desde la cárcel que espera que la interpreten Jennifer Lawrence o Margot Robbie. Sobre la posibilidad de que sea Lindsay Lohan: “¡Por dios! Sin ánimo de ofender, ¿no tiene como 30 años? Mi pelo ya no es ni siquiera pelirrojo. ¿Les dijiste eso?”. Delvey garantiza titulares, incluso detrás de las rejas.
