800 millones de animales muertos y críticas al Gobierno: las claves para entender los incendios de Australia
¿Qué ha causado estos incendios? ¿A quién han afectado más? ¿Qué se está haciendo para evitarlos?
Las duras imágenes de koalas y canguros quemados llevan apareciendo en los telediarios y periódicos más tiempo del que podíamos esperar. Llevamos desde septiembre viendo cómo arde Australia por unas llamas que parecen no tener fin, cómo desaparecen bosques enteros, se queman hogares. Los incendios han causado la muerte de al menos 26 personas y un daño prácticamente incalculable para la flora y fauna del país.
¿Qué ha causado estos incendios? ¿A quién han afectado más? ¿Qué se está haciendo para evitarlos? Para entender mejor lo que está pasando en Australia, resumimos en seis claves lo que ocurre desde que comenzaron los incendios en septiembre.
Ocho millones de hectáreas quemadas
Los incendios que arrasan Australia son los más violentos de todos los que han ocupado titulares en los medios de comunicación en los últimos años. A principios de enero, las llamas habían quemado ya más de ocho millones de hectáreas, una superficie que equivale al tamaño de Austria. Para hacernos una idea, en España unos incendios de esta magnitud habrían quemado Andalucía casi por completo.
Los incendios de Australia han quemado ocho veces más superficie que los del Amazonas y diez veces más que los de California.
26 personas fallecidas
Las llamas que han quemado más de ocho millones de hectáreas también han afectado a algunas zonas pobladas y han provocado la muerte de al menos 26 personas, entre las que hay algunos bomberos que trabajaban para sofocar los incendios.
Además, miles de personas han tenido que ser evacuadas y más de 2.000 hogares han sido destruidos o dañados y el humo está afectando seriamente a ciudades como Sídney y Melbourne, donde los indicadores de la mala calidad del aire se han disparado.
Casi mil millones de animales muertos
A pesar del elevado número de pérdidas humanas, las imágenes que más circulan por las redes sociales desde que comenzaron los incendios son las de los animales quemados en los bosques australianos. Koalas, canguros, aves y todo tipo de especies están sufriendo las consecuencias de este devastador fenómeno, que los científicos estiman que ha provocado la muerte de más de 800 millones de animales y ha tenido un gran impacto en mil millones, según los datos proporcionados por la Universidad de Sídney.
En Nueva Gales del Sur, el área más afectada por el fuego, se estima que ha muerto cerca de un tercio de la población de koalas. Afortunadamente, a pesar de la desgracia, gracias a que estos emblemáticos animales se reparten por el país, los expertos no temen que haya un peligro de extinción de la especie.
Donde sí hay una situación de emergencia es en la Isla Canguro, conocida por ser el hogar de una gran comunidad de marsupiales, así como el hogar de otras muchas especies raras.
Un tercio de la isla ha sido arrasado por el fuego, según se puede ver en las imágenes tomadas por la NASA, que estima que esta “tragedia ecológica” ha afectado a unas 155.000 hectáreas de esta isla situada frente a la costa sur de Australia.
El cambio climático, principal culpable
Los incendios forestales son comunes en Australia, pero los que vive el país desde el mes de septiembre son mucho más severos e impredecibles de lo habitual, algo que se debe en gran parte a la grave y prolongada sequía y a las elevadas temperaturas, agravadas por el cambio climático, según explica Greenpeace. El sudeste del país sufre la peor sequía desde que hay registros y las temperaturas batieron récords en diciembre y siguieron subiendo en los primeros días de enero, cuando han alcanzado valores superiores a los 40 grados.
Aunque los bosques de Nueva Gales del Sur, los más afectados por esta oleada de incendios, tienen la suficiente biomasa para crear incendios de gran envergadura, no son habituales debido a que la vegetación no suele estar lo suficientemente seca para que se puedan producir. Las elevadas temperaturas y la grave sequía que vive el país han provocado que los bosques se quemen con mucha más facilidad.
Además, el cambio climático ha aumentado la inestabilidad de la atmósfera, lo que favorece la creación de nubes de humo que pueden crear verdaderas tormentas de fuego, como ha ocurrido en los los últimos incendios en Australia.
Ayudas recibidas
Cuando se quemó la Amazonía, los gobiernos de diferentes países se decidieron rápidos a enviar ayuda a Brasil para frenar la devastación que el fuego estaba causando en uno de los pulmones de nuestro planeta. Con los incendios de Australia, la respuesta internacional no ha sido tan sonada y, en su mayoría, las ayudas anunciadas proceden de personalidades famosas de distintos ámbitos, principalmente actores y artistas del mundo de la música.
Un ejemplo son Nicole Kidman y su marido Keith Urban, que han prometido 500.000 dólares al Servicio de Bomberos Rurales de Nueva Gales del Sur. También han anunciado que donarán medio millón de dólares para la extinción de los incendios las cantantes Kylie Minogue y Pink.
Lo más sonado en cuanto a las donaciones ha sido el caso de la modelo Kaylen Ward, que ha decidido enviar fotografías desnuda a todas las personas que se animen a hacer una donación para la lucha contra las llamas.
Además, más de un millón de personas se habían sumado en menos de una semana a la recaudación organizada por la cómica Celeste Barber para ayudar a los bomberos de Nueva Gales del Sur en su lucha para extinguir las llamas.
Críticas al Gobierno
El Gobierno de Australia ha enviado a fuerzas militares para ayudar en la extinción de los incendios y en las operaciones para evacuar a los afectados por las llamas. Sin embargo, el primer ministro, Scott Morrison, ha recibido duras críticas por su ausencia mientras el país no dejaba de arder.
En diciembre, Morrison fue criticado por pasar las vacaciones en Hawái mientras los incendios no dejaban de empeorar y eran los ciudadanos los que se desvivían por ayudar a los afectados con alojamiento, medicinas y alimentos.
Además, el Gobierno de Australia ha sido criticado a menudo por su escasa lucha contra el cambio climático. “En 2019 Australia fue el segundo mayor de exportador de carbón del mundo y el carbón es uno de los principales responsables del cambio climático”, denuncia la organización ecologista Greenpeace.
“Las emisiones de Australia han ido aumentando durante cuatro años y el Gobierno no tiene un plan creíble para revertir esta tendencia”, añade la organización, que denuncia que Morrison se negó durante mucho tiempo a relacionar estos incendios con el cambio climático.
En este vídeo están resumidas las claves para entender por qué se mantienen los incendios y cuáles son sus consecuencias:
