Podcast | La depresión en los futbolistas

El último ha sido Danny Rose. El futbolista del Tottenham, que disputa el Mundial de Rusia con Inglaterra, anunció públicamente que pasó por una depresión. Todo se vio agravado con la muerte de su tío, una lesión de larga duración, un ataque racista a su madre y un asalto armado a su hermano. Su mente dijo basta. En la vida, hay cosas más importante que el dinero y la fama. Rose no es el único futbolista de élite que ha sufrido esta enfermedad.

Tenemos casos igualmente reseñables. Robert Enke, quien fue portero del Barcelona y de la selección alemana, se quitó la vida en 2009 tras una profunda depresión. Los jugadores del club catalán André Gomes y Andrés Iniesta también saben lo que significa lidiar con la presión, tener la autoestima por los suelos. El portugués explicó que tiene problemas para salir a la calle, que su mal rendimiento le hundió anímicamente. El manchego habló de cómo algunas circunstancias particulares, como la muerte de su amigo Dani Jarque, le condujeron a ponerse en manos de profesionales.

En cualquier caso, no son relatos anecdóticos, son únicamente los que han salido a la luz. En gran medida por su valentía. La Unión Internacional de Futbolistas denuncia que casi cuatro de cada futbolistas sufre problemas psicológicos, muchos de ellos depresión y ansiedad. Una encuesta de la revista británica FourFourTwo desveló que el 78% de los futbolistas profesionales de Inglaterra y Escocia consideraban la depresión como uno de los principales problemas a los que se enfrentan.