Los supermercados Whole Foods se quedan sin alimentos
Estanterías vacías, productos agotados, clientes furiosos, empleados frutrados… Esa es la realidad que vive la cadena estadounidense de supermercados Whole Foods
Estanterías vacías, productos de primera necesidad agotados, clientes furiosos, empleados frutrados… Esa es la realidad que vive la cadena estadounidense de supermercados Whole Foods cuyas tiendas, desde hace varias semanas, brillan por la escasez de alimentos. «La semana pasada nos quedamos sin cebollas y patatas dos veces», cuenta un empleado de una tienda de Whole Foods en Brooklyn a Business Insider.
«Recibimos quejas constantes de los clientes por ausencia continua de productos básicos», señala otro empleado de Sacramento. «La sección de comida preparada no se repara, y la comida se ve rancia», apunta por su parte un cliente.
Muchos fueron los clientes que en un principio culparon a Amazon, que compró Whole Foods en agosto por 13.7 mil millones de dólares, de este desabastecimiento al especular que la escasez podría deberse a un aumento en el tráfico de compradores a raíz de la adquisición.
Sin embargo, los propios empleados aseguran que el problema es anterior a la compra y en realidad es causado por el nuevo sistema de administración al que han calificado de «militarista». Este nuevo sistema de inventario recientemente implementado y llamado Order-to-shelf (OTS) es un método estrictamente controlado de tecnología automatizada y que permite transportar los productos directamente desde los camiones de reparto hasta los estantes, de forma que las tiendas no necesitan almacenamiento interno. Algo, que para los propios empleados de Whole Foods, está generando problemas de almacenamiento en toda la tienda.
«En mi tienda constantemente nos estamos quedando sin productos en todos los departamentos», le dijo a Business Insider un gerente del departamento de la empresa en Illinois. «Todos sabemos que estamos perdiendo ventas y molestando a los clientes, pero tenemos las manos atadas».