Cómo hacer filetes rusos
En España, se convirtieron en un plato casero, muy popular en la década de los años 50 y 60
Los filetes rusos son una receta clásica en la gastronomía española, que cualquiera puede preparar debido a su sencilla preparación y ese sabor a ajo y perejil tan característico. En España, los filetes rusos se convirtieron en un plato casero tradicional, muy popular en la década de los años 50 y 60, y que aún hoy es frecuente en los menús diarios de muchas familias. De hecho, es uno de los platos que mejor comen los más pequeños de la casa.
Y es que los filetes rusos son un plato que combina tradición, sabor y salud. Su fácil preparación y los beneficios que aporta a la dieta diaria lo convierten en una receta imprescindible en cualquier hogar. Suelen servirse acompañados de patatas fritas o como hacían nuestras abuelas, poniendo en la base del plato una cama de salsa de tomate casera y colocando encima los filetes rusos. Y como es una receta ideal para los más pequeños de la casa, esta especie de hamburguesa sin pan, gusta tanto a pequeños como a mayores.
Origen de los filetes rusos
El origen de los filetes rusos es algo incierto y está envuelto en varias teorías. Hay quienes creen que sí que proceden de Rusia, de la época de los zares cuando Rusia era una zona francófona y se valía de las recetas de la gastronomía del país galo para crear nuevos platos. Otros en cambio, a pesar de su nombre, creen que este plato no procede de Rusia, sino que es una receta tradicional, muy popular entre los platos clásicos de la gastronomía casera, que cocinaban las abuelas.
Pero lo cierto es que la mayoría de la gente opina que este plato no proviene de Rusia, sino que se cree que es una creación europea, probablemente de Francia o Alemania, adaptada al gusto español. Una teoría popular es que el nombre «filete ruso» podría haberse utilizado para darle un aire exótico y refinado a lo que en esencia es una hamburguesa sin pan.
Si los filetes rusos, se han mantenido en nuestras mesas, durante nuestras comidas diarias desde hace años, se debe a lo fácil que resulta seguir la receta. Su elaboración no es nada compleja, por lo que aunque no seas muy duxo en la cocina, las posibilidades de que no te queden en su punto y se pasen son mínimas. Este plato ha sabido mantener su popularidad debido a su versatilidad, ya que se puede acompañar de diversas guarniciones como puré de patatas, ensaladas o incluso ser parte de un bocadillo.
Receta de los filetes rusos
Los filetes rusos son un plato sencillo para el que se necesitan ingredientes básicos, fácilmente disponibles en cualquier despensa. Los ingredientes principales son los siguientes: carne picada, para prepararla se utiliza carne de ternera, pero también se puede mezclar con carne de cerdo para obtener un sabor más jugoso; un diente de ajo picado finamente para aportar un toque de sabor; media cebolla picada muy fina para añadir jugosidad y dulzura a la carne; un huevo para ligar la mezcla y darle consistencia; unas cucharadas de pan rallado para compactar la masa; perejil fresco picado para un toque de frescura; sal y pimienta al gusto para sazonar la carne y aceite de oliva para freír los filetes.
Para comenzar coloca la carne picada en un bol grande. Añade la cebolla y el ajo finamente picados, el perejil, el huevo, el pan rallado y sazona con sal y pimienta al gusto. Mezcla todo bien con las manos hasta obtener una masa homogénea. Es importante trabajar la mezcla lo suficiente para que los ingredientes se integren bien, pero sin pasarse para evitar que la carne quede dura.
Una vez que la mezcla esté lista, forma bolas del tamaño de una nuez grande. Luego, aplástalas ligeramente con las manos para darles la forma característica de los filetes rusos, que es similar a la de una hamburguesa pequeña. Y en una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio. Cuando el aceite esté caliente, coloca los filetes en la sartén, dejando suficiente espacio entre ellos para que se frían por ambos lados hasta que estén dorados y cocidos por dentro, durante tres o cuatro minutos por cada lado. Recuerda cuando los filetes ya estén fritos, colocarlos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Beneficios para la salud
Los filetes rusos, cuando se preparan de manera adecuada, pueden ser una opción saludable y nutritiva. Y es que, estos filetes que nos preparaban nuestras abuelas hace años, gracias a la carne picada nos aportan una fuente de proteínas de alta calidad, necesarias para la reparación y el crecimiento muscular, así como para el buen funcionamiento del sistema inmunológico. Además de proteínas, la carne también proporciona vitaminas del grupo B, como la B12, que es fundamental para la producción de glóbulos rojos y el mantenimiento del sistema nervioso.
Al no incluir pan ni salsas azucaradas, los filetes rusos son una opción baja en carbohidratos, lo que puede ser beneficioso para quienes siguen dietas cetogénicas o bajas en carbohidratos. Y como se forman de manera individual se puede poner la cantidad de carne picada que se quiera en cada filete. De tal modo, que controlas el tamaño de la porción, lo que ayuda a mantener un equilibrio adecuado en la ingesta calórica.