Los millonarios de un pueblo suizo pagarán para no acoger refugiados
El Gobierno suizo prometió acoger 50.000 refugiados dentro del acuerdo europeo de cuotas. Para cumplir la promesa ha pedido a los 26 cantones del país aceptar cuotas proporcionales de acogida. Sin embargo, la pequeña localidad de Oberwil-Lieli ha votado «no» a la petición con un 52% en un referéndum. Los habitantes jutifican el rechazo por miedo a perder su calidad de vida y su 0% de tasa de crimen. «No les queremos aquí, tan simple como esto”, ha dicho uno de los residentes al Daily Mail. “Hemos trabajado duro toda nuestra vida y tenemos un pueblo precioso que no queremos que se estropee. No somos el lugar adecuado para aceptar refugiados. Aquí no encajarían”, ha añadido. Organizaciones de Derechos Humanos como Amnestía Internacional han denunciado esta falta de solidaridad y algunos habitantes han mostrado su desaprobación y reconocen que se sienten «avergonzados». “Sí, hay que ayudar a los refugiados sirios, pero es mejor si se les ayuda en los campos de refugiados cercanos a su país”, ha declarado el alcalde Andreas Glarner.
Oberwil-Lieli, es un pueblo situado a 16 kilómetros de Zúrich con unas imponentes vistas de los Alpes. Una localidad con paisajes de ensueño y uno de los pueblos con más ricos de Europa -300 de sus 2.200 habitantes son multimilloarios-, pero desde hoy es el lugar más insolidario del viejo continente. Sus habitantes han votado en contra de acoger a 10 refugiados y para ello están dispuestos a pagar una multa de 240.000 euros por no cumplir la cuota de acogida impuesta desde la Unión Europea.
El Gobierno suizo prometió acoger 50.000 refugiados dentro del acuerdo europeo de cuotas. Para cumplir la promesa ha pedido a los 26 cantones del país aceptar cuotas proporcionales de acogida. Sin embargo, la pequeña localidad de Oberwil-Lieli ha votado «no» a la petición con un 52% en un referéndum. Los habitantes jutifican el rechazo por miedo a perder su calidad de vida y su 0% de tasa de crimen. «No les queremos aquí, tan simple como esto”, ha dicho uno de los residentes al Daily Mail. “Hemos trabajado duro toda nuestra vida y tenemos un pueblo precioso que no queremos que se estropee. No somos el lugar adecuado para aceptar refugiados. Aquí no encajarían”, ha añadido. Organizaciones de Derechos Humanos como Amnestía Internacional han denunciado esta falta de solidaridad y algunos habitantes han mostrado su desaprobación y reconocen que se sienten «avergonzados». “Sí, hay que ayudar a los refugiados sirios, pero es mejor si se les ayuda en los campos de refugiados cercanos a su país”, ha declarado el alcalde Andreas Glarner.