Las principales empresas españolas en Venezuela están alertas pero mantienen operaciones
El comercio entre Venezuela y España se ha venido encogiendo desde 2013, con saldo deficitario para la nación ibérica.
El comercio entre Venezuela y España se ha venido encogiendo desde 2013, con saldo deficitario para la nación ibérica. Sus empresas con presencia en Venezuela son prudentes ante el convulso clima político y social. Estas apuestan a mantener operaciones, reseña El Interés.
Tras la votación de la Asamblea Nacional Constituyente chavista el pasado domingo el panorama se ha tornado más oscuro para la nación suramericana, ya en el ojo del huracán por apartarse de la línea democrática.
Esta atmósfera se tornará aún más oscura este viernes cuando se instale la ANC en el Palacio Federal Legislativo donde opera el Parlamento de mayoría opositora que se niega a aceptar esta medida.
Así fue como GNB forzó puerta del Salón Elíptico de AN para realizar preparativos de cara a ilegítima instalación del fraude constituyente pic.twitter.com/nOg0Qe1S2z
— Asamblea Nacional (@AsambleaVE) 4 de agosto de 2017
No pocos países del mundo desconocieron los resultados de la Constituyente, sino que Estados Unidos ha impuesto sanciones a varios de sus funcionarios, incluyendo al propio presidente Nicolás Maduro, para ejercer presión y retomen el hilo constitucional.
Hasta ahora esas medidas no han dado resultados, por lo que se espera que en las próximas horas el gobierno de Donald Trump, dicte otras sanciones que podrían afectar a Petróleos de Venezuela (Pdvsa), la principal industria del país.
El portal español Cincodías consultó a representantes de las empresas hispanas instaladas en Venezuela, quienes se limitaron a destacar lo marginal que es este mercado dentro del negocio global de cada una de ellas y su intención de mantener operaciones en el país.
Aquí algunos números revelados a Cincodías:
Repsol, con presencia en Venezuela desde 1993, tiene derechos en ocho campos de petróleo y gas del país. En 2015, produjo 17,4 millones de barriles equivalentes de crudo procedentes de los proyectos de gas de Perla y Carabobo, con una participación del 11%, respectivamente.
Por su parte, la empresa de hoteles Meliá solo tiene uno en Caracas: El Gran Meliá Caracas, de cinco estrellas, que registró sucesivos descensos de ocupación en los últimos cuatro años.
La devaluación del bolívar supone un impacto en las cuentas de Meliá de 21,1 millones de euros en el primer semestre.
El NH (Hesperia) cuenta con cuatro hoteles de su marca Hesperia en Venezuela, tres en Isla Margarita y otro en la región de Valencia. Su negocio en Venezuela representa el 0,025% en ventas y el 0,016% en activos respecto del conjunto del grupo.
Otra de las empresas que continúan en el país en crisis es Air Europa. Es una de las pocas que enlaza Europa y Venezuela tras las fuertes protestas y enfrentamientos de los últimos meses.
Iberia, por la delicada situación del país canceló un vuelo programado para el pasado domingo, día de la elección Constituyente y la de este miércoles 2 de agosto.
Asimismo, Inditex, con 22 establecimientos frente a las 7.000 que tiene en todo el mundo, solo están tiene a las cadenas Zara, Bershka y Pull & Bear. En los últimos tres años el grupo se mantuvo con 25 locales, que este año redujo a 22.
En Venezuela Telefónica (Movistar) aporta el 0,25% de los ingresos consolidados del grupo (66 millones de euros) y el 0,24% del oibda -beneficios operativos antes de depreciaciones y amortizaciones- (20 millones) al cierre del primer semestre de 2017.
BBVA (Banco Provincial) señaló para el medio español que “en un entorno macroeconómico marcado por la incertidumbre, BBVA Provincial logró registrar una evolución favorable en el primer semestre de 2017, consistente con la evolución del sistema financiero nacional venezolano”.
Por su parte, Mapfre Seguros, tiene cerca de 1.000 empleados y sus ingresos en Venezuela representan menos del 0,2% del total del grupo.