David Muñoz, marido de Cristina Pedroche, ha tardado dos años en revelar el robo que sufrió en su restaurante DiverXO. Lo ha hecho esta semana, en la cadena SER, a colación del hurto sucedido en la bodega del restuarante Atrio, de Cáceres, de dos estrellas Michelín y tres Soles de Repsol, entre otros reputados premios.
«Nos robaron en la bodega de DiverXO justo antes de la pandemia. Estuve hablando con Toño [uno de los dueños de Atrio] ayer y al parecer son unas mafías de fuera de España que lo tienen todo organizado, saben perfectamente lo que quieren robar y saben perfectamente dónde robarlo. Nos robaron cosas muy caras y muy difíciles de conseguir, cosas muy guays, pero lo de Atrio ha sido diferente», ha dicho el chef, de 41 años.
A estas declaraciones se sumó el sumiller de DiverXO, Miguel Ángel Millán, quien ha añadido que el hurto se produjo durante un fin de semana, cuando el restaurante estaba cerrado, y que los ladrones se llevaron entre 30 y 40 botellas Burdeos, de gama alta y «difíciles de reponer». El valor de cada botella oscilaría los 1.000 y los 4.000 euros. Tras el robo, denunciaron ante la Policía, pero a día de hoy no han sabido nada y no esperan ya recuperar ninguna de las botellas sustraídas.
David Muñoz y su mala racha profesional
Este robo, del que la prensa no tenía constancia, se suma a otros sinsabores que le han dado a David Muñoz sus negocios, como el cierre de su restaurante StreetXO en Londres, a finales de 2020, tras cuatro años abierto, cuyo alquiler ascendía a 400.000 euros anuales. Esto les supuso pérdidas que se estiman en 6 millones de euros. A este barapalo hay que sumarle el incendio que sufrió una parte de DiverXO por un cortocircuito, en verano de 2020.
Ahora parece que la pareja ha dejado atrás la mala fortuna, pues han comenzado negocios en Barcelona y están ultimando la apertura de un nuevo restaurante en Dubái.
Una vida de lujo
A pesar de estos contratiempos y del robo mencionado, ni David Muñoz ni Cristina Pedroche pueden quejarse, pues no les va nada mal. De hecho, viven en La Finca, una exclusiva urbanización situada en Pozuelo de Alarcón (Madrid) que cuenta con extremas medidas de seguridad y donde viven algunas de las grandes fortunas de nuestro país. Las viviendas de La Finca cuestan millones de euros, pero ellos están de alquiler.
Hasta hace poco, la pareja vivía en Legazpi, un barrio de clase media de Madrid. A este cambio de alojamiento con la jet set se suman otros caprichos que se dan, sobre todo ella, que no para de lucir bolsos de lujo –como Louis Vuitton, Chanel o Saint Laurent–, a pesar de haber dicho –antes de ser rica– que nunca jamás la veríamos con un accesorio de este tipo. En concreto, estas fueron sus palabras: «No podría gastarme 3.000 euros en un bolso, sería reírme de muchos españoles». Desde aquellas declaraciones de 2014, ya se ha gastado el dinero en seis de esos bolsos de los que renegaba. La vida da muchas vueltas, y las cuentas corrientes de cada uno, también.
https://www.instagram.com/p/CVgCPPeL9H9/
Al margen de los negocios y los dineros, David Muñoz y Cristina Pedroche siguen tan enamorados como el primer día. Ya llevan seis años juntos y se espera que amplíen familia pronto, sobre todo por la insistencia de él.
