Risto Mejide y Laura Escanes, juntos una semana después de anunciar su ruptura
Siete días después de cortar públicamente, la influencer, de 26 años, y el publicista, de 47, se han vuelto a ver las caras por Roma
Laura Escanes y Risto Mejide, quienes formaban una de las parejas más unidas y enamoradas del panorama nacional, anunciaron el pasado domingo su separación después de siete años de relación y una hija de casi tres en común.
Ahora, una semana después de cortar públicamente, la influencer, de 26 años, y el publicista, de 47, se han vuelto a ver las caras por la hija que ambos tienen en común, Roma.
Risto Mejide y Laura Escanes, juntos por su hija
La pequeña cumplía este 2 de octubre 3 años de edad, y por ese motivo sus padres le han hecho una fiesta de cumpleaños, como todos los años. En esta ocasión, sin embargo, Risto Mejide y Laura Escanes ya no están juntos.
A pesar de eso, y tal y como anunciaron en sus respectivos comunicados, seguirán unidos de por vida por Roma, a quien le han organizado una sorpresa. En concreto, le han montado una especie de pastelería rosa con muchos dulces y una tarta de Minnie Mouse.
A la fiesta han acudido tanto Risto Mejide como Laura Escanes y Julio, el hijo que él tuvo de su anterior relación. En esta ocasión, y a diferencia de los años anteriores, los padres no han posado juntos.
Laura Escanes ya está buscando casa
Laura Escanes y Risto Mejide dejaron Barcelona y se instalaron en Madrid hace aproximadamente dos años, aunque siempre mantuvieron su conexión con la ciudad condal, sobre todo porque la influencer tiene ahí a sus amistades y familiares.
Sin embargo, la joven no baraja volver a vivir allí, al menos de momento, ya que ha sido vista mirando casas en la capital, tal y como detallan las fotos que publica la revista ¡Hola! este miércoles. La catalana estuvo mirando casas en una zona muy lujosa, cuyos precios oscilan entre los 918.000 y el millón cien mil euros.
En la búsqueda de un nuevo hogar para ella y para su hija, Roma, Laura Escanes se está dejando aconsejar por Pablo Castellano, el marido de María Pombo, que es arquitecto y conoce bien el mundo inmobiliario, ya que se dedica a ello.
Una separación extraña y sorpresiva
Si atendemos a los mensajes de ambos, lo único que se puede intuir es que la separación ha sido pactada y en buenos términos, pero llama muchísimo la atención que hace apenas dos semanas estuvieran de cena romántica juntos.
Es posible, pues, que el amor se haya acabado con el tiempo (de hecho, a los siete años es cuando la mayoría de las parejas cortan), pero también es probable que haya sucedido algo que no han contado, ya que, como hemos dicho, llama mucho la atención que pasen de cenas románticas y declaraciones públicas de amor a cortar una relación tan larga y con niños de medio.
Sea como fuere, suponemos que la verdad se acabará sabiendo.