La vida de Carmen Sevilla, en imágenes: de sus inicios en el cine y la televisión a sus amores
Apodada ‘la novia de España’, la vida de la actriz estuvo marcada por su arte y sus amores, convirtiéndose en una de las figuras más importantes de nuestro país
Este martes ha fallecido ‘la novia de España’, la gran Carmen Sevilla. Corría 2009 cuando fue diagnosticada de Alzheimer, siendo seis años después trasladada a una residencia de Madrid para estar en las mejores manos.
La actriz, a sus 92 años, ha estado hospitalizada en estado grave durante dos días y, a pesar de llevar más de una década alejada del foco mediático, no ha dejado de recibir muestras de cariño y admiración.
Su nombre volvió a sonar con fuerza el pasado mes de septiembre, cuando su hijo Augusto rompió su silencio en Diez Minutos para informar a los medios de comunicación sobre el estado de salud de Carmen.
«Es una situación dura y difícil para todos, pero la llevamos lo mejor que podemos. Lleva ya mucho tiempo enferma», dijo entonces, añadiendo que la artista ya no le reconocía. Desde entonces, la familia ha llevado el asunto en el más absoluto hermetismo.
Una figura muy importante en nuestro país
Consolidada como ‘la novia de España’ entró en contacto con el mundo del arte desde bien temprano gracias a su padre, Antonio García, compositor y letrista. A comienzos de los años 40, se inició en la música y no tardó en dar el salto a la gran pantalla.
Su debut en la industria cinematográfica se dio en 1947 de la mano de Juan de Orduña y su película Serenata española. Durante las tres décadas siguientes, Carmen Sevilla se dedicó en cuerpo y alma a su profesión delante de las cámaras.
Entre sus películas más emblemáticas figuran La hermana San Sulpicio, La venganza, Pan, amor y… Andalucía o Camino del Rocío. Su carrera comenzó a caer en picado en la década de los 70 y, ocho años después, realizó su última película: Rostros.
De la gran a la pequeña pantalla
Dejando en el pasado su salto a Hollywood, Carmen adquirió el papel de presentadora en los años 90, estrenándose en Telecinco con el Telecupón. La actriz consiguió reunir a las familias españolas para ver el sorteo de la ONCE.
Durante esta trayectoria, participó en espacios como Date un respiro en 1993 – con Agustín Bravo y Laura Valenzuela– o La noche de Carmen en 1998. Este año, Sevilla se hizo con las tardes de los domingos, contando con la participación de grandes estrellas como Rocío Jurado o Sara Montiel.
Un año más tarde, la artista intentó volver a la interpretación con Ada Madrina, emitida en Antena 3, pero no salió bien. Entonces, volvió a ejercer de presentadora en Querida Carmen -en antena hasta el 2000- y en el show Cine de barrio, donde estuvo durante seis años.
Sus últimos trabajos
En 2005, la artista volvió a bailar gracias a Mira quién baila, presentado por Anne Igartiburu. Pero su vida cambió en 2009, cuando fue diagnosticada de Alzheimer, aunque no salió a la luz hasta tres años después. En febrero de 2011 fue entrevistada por María Teresa Campos en ¡Qué tiempo tan feliz! y en mayo de ese mismo año reapareció en Cine de barrio como invitada en la que sería su última aparición en la televisión.
Los dos amores de su vida
Carmen Sevilla, además conquistar a todos los españoles, se ganó el corazón de los dos hombres de su vida: Augusto Algueró y Vicente Patuel. Sin embargo, ‘la novia de España’ estuvo vinculada con nombres como el de Carlos Azurra, Carlos Herrera o Cantinflas.
En 1961, la actriz contrajo matrimonio con Algueró, el padre de su único hijo. Después de recibir un telegrama del Papa Juan XXIII felicitándoles por su enlace, sobre su relación sobrevoló la sombra de la infidelidad.
Tras separarse, Carmen Sevilla encontró la felicidad de la mano de Vicente Patuel, al que consideró el amor de su vida. La actriz mantuvo su romance oculto, viviendo su relación como dos jóvenes en un apartamento de la calle Princesa.
Trece años estuvieron juntos, trece años en los que la artista se retiró de la vida pública para comenzar una vida protagonizada por la tranquilidad en Herrera del Duque (Badajoz). Su marido falleció en abril del 2000 y decidió volver a la capital.