La historia de Joaquín y Susana Saborido: cómo se conocieron, sus dos hijas y boda gaditana
La familia al completo, también sus hijas Salma y Daniela, visita esta noche ‘El hormiguero’ para hablar de su nueva docuserie
Joaquín y Susana Saborido celebran este año 25 años de casados. | Redes sociales
Joaquín y Susana Saborido forman una de las parejas más estables del mundo del fútbol. Llevan más de 25 años juntos pero siguen profesándose un amor como el primer día, en privado y ante las cámaras que les siguen allá donde vayan. Su carisma y el cariño que muestran públicamente les convierten en unos de los personajes más queridos del panorama mediático. En este último año les hemos visto más unidos que nunca, celebrando los logos de sus hijas Daniela y Salma y disfrutando de la vida retirada del gaditano. El pasado verano de 2023 colgó las botas tras dos décadas de carrera futbolística, en su mayoría dedicado al Betis. Desde entonces ha querido recuperar el tiempo perdido con su familia compartiendo viajes y planes de lo más especiales, algunos que han querido compartir con sus seguidores a través de las redes sociales y otros nuevos proyectos.
Esta noche visitan El hormiguero para promocionar su primer reality familiar, El capitán en América. Esta docuserie ha seguido el viaje que hicieron los cuatro por la costa oeste de Estados Unidos el pasado verano. Una ruta por California, Arizona, Utah y Nevada que retó a la familia a pasar 3.000 kilómetros conviviendo en una caravana y reconectar después de la intensidad de los últimos años. Hoy contarán algunos detalles de las grabaciones y las mejores anécdotas que les ha dejado esta experiencia, como la celebración del 43 cumpleaños del futbolista que les pilló en tierras americanas.
Su historia de amor desde Sevilla a Mallorca
Los Ángeles o San Francisco han sido testigos de esta historia de amor que ya cumple 25 años y empezó de forma inocente en Sevilla. Joaquín recién empezaba su carrera en el conjunto verdiblanco pero las gradas y los medios ya se hacían eco de su talento en el campo. A través de un amigo en común, Susana se presentó a esta estrella emergente del futbol sevillano aunque las primeras impresiones no adelantaban ningún romance. Estuvieron meses quedando mientras se conocían pero la sevillana seguía reticente por la mala fama que tienen los futbolistas en el mundo del amor. En el programa de Osborne contó lo que pasó en la noche que decidió darle una oportunidad: «Una noche coincidimos, pero él no me caía bien, nada, nada, nada, nada. Le veía muy espabilado, yo decía ‘este me va a coger y me va a soltar’. Ya una noche me quedé sola y él se acerca a mí y me dice: ‘¿Qué haces hablando conmigo si tú a mí no me puedes ver?’».
Esta frase tan pícara terminó por convencer a Susana y aceptó quedar con Joaquín en su primera cita formal. Ambos pasaron muchos nervios en este encuentro y han contado alguna vez que el futbolista no paraba de beber agua y tenía que levantarse cada rato. A pesar de las dificultades técnicas, la cita acabó bien y desde entonces empezaron una relación que no se ha roto hasta ahora. Los novios tenían 20 y 17 años cuando empezaron, una diferencia de tres años que no les impidió disfrutar de su juventud al mismo tiempo que empezaban a construir un futuro juntos.
La famosa boda de Joaquín y Susana Saborido
En 2005 decidieron pasar por el altar y su boda fue una de las pasaron a la historia. El Puerto de Santa María en Cádiz, el pueblo natal del futbolista, se llenó de los aficionados y seguidores de la pareja que no quisieron perderse el enlace. Susana estaba llegando en un coche de caballos cuando el futbolista le avisó de la gente que se encontraría al llegar a la iglesia de la Virgen de los Milagros. «Se desbordó porque no esperábamos a tanta gente. Mi hermano me dijo ‘Joaquín, que hay gente de la playa cogiendo sitio’. No he visto más gente en mi vida», señaló Joaquín en una entrevista. Después de la boda viajaron a Mallorca para disfrutar de su luna de miel aunque a ratos atendían a los fanáticos que se acercaban a saludarles.
Aunque desde sus inicios vivieron en Sevilla, la carrera de Joaquín les ha llevado a mudarse a Valencia e Italia junto a sus hijas. La mayor, Daniela, nació al año de su boda y acaba de cumplir 18 años, mientras Salma todavía tiene 14. Daniela está dedicada a su carrera universitaria aunque es muy activa en redes sociales, solo en Instagram tiene 87 mil seguidores. Uno de los detalles de su vida que más comparte es su relación con Javi Sánchez, un jugador de la cantera del Betis. Sin duda sus hijas son el mayor tesoro de Joaquín y ahora que está retirado puede disfrutar más de cerca de su adolescencia y sus primeros logros como adultas.
