Rusia condena a siete años de cárcel a un diputado por denunciar la guerra de Ucrania
Las autoridades le acusan de conspirar junto a Kotiónochkina, quien presidía una sesión del Consejo Municipal en la que se criticó la campaña militar rusa
Un tribunal de Moscú ha condenado este viernes a siete años de cárcel al diputado municipal Alexéi Gorínov, acusado de difundir noticias falsas sobre las acciones del Ejército ruso durante la campaña militar rusa en Ucrania.
«El Tribunal dictamina: reconocer a Gorínov culpable del delito» de difundir públicamente informaciones falsas por medio de abuso de poder y por motivos de odio político «e impone una condena de siete años de privación de libertad», sentenció la jueza del Tribunal Meschanski de Moscú, Olesia Mendeléyeva, citada por Interfax.
Con este dictamen, el Tribunal satisfizo la demanda de la Fiscalía que pedía siete años de privación a Gorínov. El diputado, que fue detenido a fines de abril, no admitió su culpabilidad.
El proceso también incluye a la diputada Yelena Kotiónochkina, arrestada en ausencia ya que se encuentra fuera del país.
Gorínov fue acusado junto a su colega el pasado 26 de abril, después de que el 15 de marzo el diputado condenase la muerte de niños ucranianos durante la contienda.
Las autoridades le acusan de conspirar junto a Kotiónochkina, quien presidía una sesión del Consejo Municipal en la que se criticó la campaña militar rusa «para desacreditar a los militares utilizando su cargo oficial».
La detención y el procesamiento legal de Górinov fue denunciada en junio pasado por Amnistía Internacional (AI), que exigió su puesta inmediata en libertad y el cese de la persecución de quienes se opongan a la llamada «operación militar especial» rusa en Ucrania.
Según Marie Struthers, directora de AI para Europa del Este y Asia Central, cualquiera que se pronuncie en contra de la campaña militar rusa «corre el riesgo de ser procesado, ya sea un político electo, un activista, un maestro o un periodista».
«Los juicios de alto perfil como este tienen la intención de enviar un mensaje escalofriante a cualquiera que esté dispuesto a expresar pacíficamente sus opiniones», denunció la defensora de DDHH.