La NASA cancela por segunda vez el lanzamiento de Artemis I a la Luna
Otra fuga de hidrógeno líquido en la fase de llenado del combustible del cohete SLS ha sido el motivo
La NASA vuelve a cancelar por segunda vez el lanzamiento de Artemis I a la Luna tras una fuga de combustible, así lo ha confirmado la agencia en un comunicado. «La misión #Artemis I a la Luna ha sido pospuesta. Los equipos técnicos intentaron solucionar un problema con una fuga en el hardware que transfiere combustible al cohete, pero los intentos fueron infructuosos», se puede leer en el comunicado difundido por redes sociales.
Además, han informado que realizarán una rueda de prensa «más tarde», sin dar muchos más detalles.
El despegue del cohete SLS, de color naranja y blanco y que es el más potente del mundo, estaba previsto para las 14.17 hora local (18.17 GMT). En un primer momento se informó que se iba a producir un retraso de dos horas en el lanzamiento, sin embargo, finalmente la NASA ha optado por suspender el lanzamiento sin especificar cuando podrían volver a retomar la operación, que ya fue suspendida el pasado lunes «por problemas técnicos», especialmente con la refrigeración de los motores.
No obstante, el lanzamiento del Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) podría reprogramarse para el lunes o martes ya que, si no, la fecha más temprana sería el 19 de septiembre, debido a las posiciones de la Tierra y la Luna.
Poco antes de las 06.00 hora local, la directora de lanzamiento, Charlie Blackwell-Thompson, dio el visto bueno para comenzar a llenar los tanques del cohete con su combustible criogénico: en total, unos tres millones de litros de hidrógeno y oxígeno líquidos ultrafríos. Poco más de una hora después, se detectó una fuga al pie del cohete, en la tubería por la que el hidrógeno fluye hacia el depósito. El flujo se detuvo mientras los equipos buscaban una solución. La NASA no indicó inmediatamente cómo este problema podría afectar al tiempo de lanzamiento.
El objetivo de esta misión no tripulada, bautizada Artemis 1, es verificar que la cápsula Orion situada en la parte superior del cohete es segura para el futuro envío de astronautas. Con esta misión, la NASA pretende renovar su compromiso con la exploración humana lejana, ya que la Luna está 1.000 veces más lejos que la Estación Espacial Internacional. La agencia busca ahora establecer allí una presencia humana duradera, con el fin de convertirla en un trampolín para un viaje a Marte.
Apolo transportó a la superficie lunar, entre 1969 y 1972, solo a hombre blancos y ahora la NASA pretende que una primera mujer y una primera persona negra lleguen al satélite de la Tierra.