La Justicia de Arizona permite al estado prohibir prácticamente todos los abortos
Las clínicas tendrán que cesar de inmediato las prácticas abortivas con medios químicos, farmacológicos o quirúrgicos bajo amenaza de penas de prisión
Una jueza del Tribunal Superior del condado de Pima, en Arizona, Kellie Johnson, ha dictaminado retirar la suspensión de una ley de antes de que Arizona fuera un estado que prohíbe en la práctica y bajo amenaza de consecuencias penales cualquier interrupción del embarazo salvo en casos de peligro para la madre, según informa Europa Press.
La norma había estado suspendida desde hace 50 años, pero ahora ha sido restaurada, por lo que las clínicas y su personal tendrán que cesar de inmediato las prácticas abortivas con medios químicos, farmacológicos o quirúrgicos bajo amenaza de penas de entre dos y cinco años de prisión, según recoge la radio pública estadounidense NPR.
El fiscal general del estado, el republicano Mark Brnovich, había solicitado anular la suspensión hace un mes después de que el pasado 24 de junio el Tribunal Supremo anulara el reconocimiento del derecho al aborto a nivel federal dejando su legislación a cada estado.
«Aplaudimos al tribunal por defender la voluntad del legislador y dar claridad y uniformidad a esta cuestión tan importante», ha apuntado Brnovich tras conocer el fallo.
Desde la derogación de la sentencia del caso Roe contra Wade, hasta 12 estados con gobiernos republicanos han impuesto normativas restrictivas sobre el aborto. Este domingo entra en vigor una nueva ley que prohíbe los abortos en Arizona a partir de las 15 semanas de embarazo.
La Casa Blanca ha advertido ya de que se trata de una decisión «peligrosa» y que «sitúa a las mujeres de Arizona hace más de un siglo, cuando Arizona ni siquiera era un estado». «Las consecuencias potenciales de esta decisión son catastróficas, peligrosas e inaceptables», ha añadido. «Las víctimas de violación e incesto es verán obligadas a gestar al niño de los agresores», ha destacado la Casa Blanca, que ha prometido que seguirá trabajando para que se apruebe una ley del derecho al aborto a nivel federal.