Xi Jinping abronca en público a Trudeau por filtrar a la prensa sus conversaciones
Ambos líderes han mantenido una breve discusión por el enfado de la delegación china ante la aparición de informaciones en la prensa sobre su encuentro
Momento de la discusión de ambos líderes. | RRSS
Esta semana se ha celebrado la cumbre del G20 en Bali (Indonesia) donde se han reunido los principales líderes mundiales. La guerra de Ucrania y el misil que ha caído en Polonia han sido los temas más debatido de la cumbre. A pesar de ello, la reunión ha dejado una conversación entre el presidente chino, Xi Jinping, y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, que no suele producirse en público por el contenido y el tono de reproche que ha usado el líder comunista, que le ha reprochado a su homólogo que se publicasen en la prensa de Canadá partes de la conversación que habían mantenido el día previo, algo que ha cabreado al líder chino.
«Todo lo que hemos hablado se ha filtrado y eso no es apropiado», comienza diciéndole Xi Jinping a Trudeau, en una grabación que parece buscada por la delegación china. «Esa no es la manera en la que se mantuvo la conversación, si hay sinceridad por tu por tu parte, podemos comunicarnos bien y con respeto mutuo, si no el resultado será difícil de predecir».
Trudeau, que escucha las palabras con un gesto adusto, le replica que «en Canadá creemos en un diálogo libre, abierto y franco que esperamos continuar teniendo. Seguiremos buscando trabajar juntos de manera constructiva, pero habrá cosas en las que no estaremos de acuerdo», todo ello, mientras Xi Jinping evita mirarle a la cara para acabar espetándole: «primero creemos las condiciones».
El encuentro finaliza con un apretón de manos por parte de ambos mandatarios y con la cámara, que recoge la conversación, apuntando hacia Trudeau que abandona solitario la sala.
Según Reuters, el descontento del presidente de China viene de las apariciones en la prensa canadiense de las informaciones relativas a la «preocupación» del Gobierno de Canadá por los casos de espionaje chino en su territorio y el temor a una «interferencia» china en las elecciones. Además, señalan que ni el ministerio de Exteriores chino ni ningún medio estatal han informado acerca de la conversación entre ambos líderes.
