La Justicia belga prorroga un mes la prisión provisional de Eva Kaili por el 'Qatargate'
Los abogados de la exvicepresidenta del parlamento informaron al término de la vista de que había solicitado que se le concediera libertad vigilada
El Tribunal de primera instancia de Bruselas ha prorrogado por un mes la prisión provisional para Eva Kaili, la vicepresidenta del Parlamento Europeo, cesada tras su imputación en el caso de corrupción que investiga la Fiscalía belga por el presunto pago de sobornos de Qatar a eurodiputados y asistentes parlamentarios.
Kaili compareció ante el tribunal a primera hora de la mañana en una vista celebrada una semana más tarde que la del resto de imputados, ya que la socialista griega pidió un aplazamiento para preparar su defensa.
Los abogados de Kaili informaron al término de la vista de que había solicitado que se le concediera libertad vigilada. Así, subrayaron que su defendida está cooperando con la investigación y rechazaron todos los cargos por corrupción.
Sin embargo, el tribunal ha decidido mantener a la política griega en prisión preventiva al menos un mes más en una decisión que la imputada puede recurrir en el plazo de 24 horas, según ha informado la Fiscalía federal en un comunicado.
La defensa de Kaili pidió esta misma mañana ante el juez su libertad vigilada con brazalete electrónico dado que, según argumentaron sus abogados, está colaborando con la investigación y no participó de la red corrupta.
En declaraciones a la prensa en el Palacio de Justicia de Bruselas, uno de sus abogados, André Risopoulos, informó anteriormente de que han solicitado para Kaili el «régimen de vigilancia telemática».
Asimismo, el letrado también expuso que su defendida rechaza «todos los cargos de corrupción» que se le imputan y que está «participando activamente» en la investigación, aunque no dio más detalles de la vista, celebrada a puerta cerrada, molesto por las filtraciones del caso que ha habido a la prensa y que la Fiscalía belga ya está investigando.
Según detalles de la investigación publicados durante la semana por el diario Le Soir, Kaili ha admitido ante los investigadores que pidió a su padre que escondiera parte de los miles de euros que había en su domicilio, aunque niega haber participado en la organización criminal que movió los sobornos.
Kaili está acusada de pertenencia a organización criminal, corrupción y blanqueo de capitales, al igual que su pareja, el asistente europarlamentario italiano Francesco Giorgi, y el exeurodiputado socialista Pier Antonio Panzeri, ambos en prisión preventiva. También se encuentra bajo libertad vigilada un cuarto imputado.
Giorgi, para quien el Tribunal confirmó la prisión provisional el pasado día 14, ha confesado ante el juez de instrucción su participación en una organización que recibía presuntamente sobornos de Qatar y de Marruecos para ganar peso político y económico en la UE a través de su influencia en el Parlamento Europeo.