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Internacional

Detenido el hombre que amenazaba con inmolarse en el consulado de Irán en París

El sujeto que amenazaba con inmolarse se ha entregado a la Policía que ha comprobado que iba desarmado

París.

La policía francesa ha detenido al individuo que accedió al consulado iraní en París, amenazando con inmolarse, si bien más tarde se ha evidenciado que iba desarmado. El arresto se produjo después de que el hombre abandonase la sede por su propio pie, según ha informado Le Figaro.

Según publicaron en un primer momento los medios galos, el sujeto había penetrado en el edificio a las 11 horas portando una supuesta granada o un dispositivo explosivo. Después de producirse la amenaza, la policía ha evacuado los alrededores de la sede diplomática, situado a un escaso kilómetro de la Torre Eiffel, y ha desplegado a la unidad de élite de los cuerpos de seguridad franceses.

Varios testigos afirmaron en un primer momento que el hombre había colocado banderas en el suelo del consulado asegurando que quería vengar la muerte de su hermano, según ha informado Le Parisien.

Finalmente, las autoridades galas han detenido al sospechoso, que se ha entregado voluntariamente a la Policía, recoge BFMTV. La Jefatura de Policía parisina había hecho un llamamiento a la población para que evitara la zona, cerca de la plaza del Trocadero.

El sujeto está bajo custodia de la BRI, que también está analizando el vehículo en el que ha llegado esta mañana al Consulado iraní. De acuerdo con la Jefatura de Policía, se están llevando a cabo investigaciones en el interior de la sede diplomática.

La Fiscalía de París ha identificado al detenido como un ciudadano iraní de unos 60 años que había sido condenado previamente a ocho meses de prisión con suspensión de libertad condicional por dos años por prender fuego al Consulado iraní en septiembre de 2023.

Fuentes cercanas a dicha investigación han informado a la mencionada cadena que el sospechoso debía declarar el lunes ante el Tribunal de Apelaciones. En aquel entonces, el detenido aseguró que su acción era una muestra de apoyo a las movilizaciones sociales que se producían en aquel entonces en Teherán.

El sospechoso abandonó su país de origen en 1979 después de haber sido acusado de apoyar al sha de Mohamed Reza I Irán, el último monarca iraní antes de la revolución islámica que erigió al ayatolá Ruholá Jomeini como líder supremo.