El húngaro Orban impulsa un nuevo grupo parlamentario en la UE: Patriotas por Europa
Prometen «proteger la soberanía nacional, luchar contra la migración ilegal y revisar el Pacto Verde»
El derechista Partido de la Libertad de Austria (FPO) ha anunciado este domingo la creación de una alianza política con el partido Fidesz del primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, y con el populista partido checo de la Alianza de Ciudadanos Descontentos (ANO) de Andrej Babis, prolegómeno de Patriotas por Europa, un nuevo bloque de derechas en el Parlamento Europeo.
El líder del partido austriaco, Herbert Kickl, ha firmado este domingo en Viena junto a Orban y Babis lo que han descrito un «manifiesto patriótico», las líneas maestras del que pretende ser, en palabras del primer ministro húngaro, el bloque de derecha más grande del Parlamento Europeo; manifiesto que servirá de «cohete de lanzamiento» de este nuevo bloque, cuya creación ha sido alentada por el ascenso de la derecha más radical en las pasadas elecciones europeas del 9 de junio.
La intención de este futuro bloque, todavía en proceso de formación, es según Orban la de «combatir contra el establishment de Bruselas» que «sigue sin entender los deseos de votantes» expresados en los comicios y para representar «a los europeos que están en contra de la guerra, la migración, la inflación y el Pacto Verde».
«La élite de Bruselas se resiste», ha proseguido Orban, «porque Bruselas no es un constructo democrático así que, en esta situación, es nuestro deber imponer la voluntad de los votantes» a través de una alianza inicial que combina «a los partidos más fuertes de Austria, de República Checa y de Hungría» con la responsabilidad de lanzar «esta nueva plataforma».
Tras las «existenciales» elecciones europeas, los firmantes entienden que «la división política en Europa ya no es entre conservadores y liberales o derecha e izquierda, sino entre centristas – precursores de un nuevo «superestado» europeo- y patriotas y soberanistas, que defienden la preservación y el fortalecimiento de las naciones europeas que controlamos», de acuerdo con el manifiesto, publicado por Orbán en su página de Facebook.
En la rueda de prensa de presentación, Orban ha abundado en estos principios: «Vamos a detener la migración ilegal, somos los representantes de la familia tradicional y creyentes en la soberanía nacional», ha señalado el mandatario, que ha descrito estas ideas como «el motivo por el que Hungría es una isla en el mar de la Europa liberal». Sin embargo, Orban ha declarado que estos pilares «no son suficientes», y que «lo que hace falta es tener éxito y buena gobernanza».
El manifiesto firmado este domingo parte así con la idea de «recuperar las instituciones y redirigir la política europea en una dirección que sirva a nuestras naciones y pueblos» con prioridad de «la soberanía sobre el federalismo, la libertad sobre los dictados y la paz frente a la guerra: este es el manifiesto de los patriotas al servicio de Europa».
Un nuevo bloque
El Fidesz de Orban lleva huérfano en la UE desde que tuvo que abandonar el conservador y moderado Partido Popular Europeo en 2021. El Partido de la Libertad de Austria, por su parte, ha sido miembro del grupo Identidad y Democracia, encabezado por la formación francesa Agrupación Nacional, liderada por Marine Le Pen y Jordan Bardella.
ANO, del ex primer ministro checo Babis, abandonará el grupo liberal Renovar Europa para incorporarse a este nuevo bloque anunciado este domingo por los tres líderes políticos y que pretende incorporar nuevos miembros en los próximos días.
Sea como fuere, esta futura agrupación debe tener un mínimo de 23 escaños para crear formalmente un grupo separado dentro del Parlamento Europeo e incluir a diputados de al menos siete Estados miembro para ser reconocidos. Si bien cumplen el primer requisito, todavía necesitan el respaldo de diputados de otros cuatro países.
Este anuncio tiene lugar a menos de 24 horas de que Hungría asuma a partir de este lunes la presidencia de turno del Consejo de la Unión Europea para incomodidad de varios estados por la deriva antidemocrática de su primer ministro -un aliado de Donald Trump y próximo al Kremlin- y que el Parlamento Europeo ha intentado frenar.