Si tu piel no es igual todo el año, ¿por qué utilizas siempre los mismos productos?

Si tu objetivo es lucir una piel joven, radiante y luminosa, entonces es imprescindible que adaptes tu rutina de belleza a cada estación del año. Es un pilar fundamentar en términos de cosmética pero, en la mayoría de los casos, no resulta tan obvio como debería de ser y caemos en el error de ser fieles a nuestros productos favoritos a los largo de los 12 meses del año.

Lo recomendado por los especialistas es tener dos formas de cuidarse, una correspondería a la época de primavera y verano y, la otra, al otoño e invierno. ¿Sabes realmente por qué es necesario reformular y cambiar los productos para el cuidado de la piel dos veces al año? Es muy sencillo. Las condiciones climatológicas no son las mismas en verano que en invierno y, en consecuencia, nuestra piel necesita distintos nutrientes para mantenerse hidratada.

Ahora que lees esta realidad entenderás por qué muchas veces has tenido que cambiar tu crema habitual en invierno porque notabas que no hidrataba lo suficiente. También ocurre lo contrario, productos que nos han funcionado de maravilla y, al llegar el buen tiempo, dejan un exceso de grasa en la piel.

Si estás cometiendo el error de continuar utilizando los mismos productos cosméticos que en septiembre, hoy en THE OBJECTIVE te damos las claves para corregir tu rutina de belleza en los meses más fríos del año.

Adapta tus cuidados al invierno

Durante el invierno la piel necesita un extra de hidratación porque venimos de un clima más cálido y nuestra piel puede sufrir en su primer encuentro con las temperaturas más bajas. Para cuidarla de forma óptima, es importante adaptar la rutina facial y corporal a las necesidades de cada momento, siempre utilizando productos específicos y de la mejor calidad. 

La doctora María Segurado, experta en dermocosmética y consejera del grupo Nivea, señala como factores muy peligrosos durante estos meses el frío, el viento, los cambios bruscos de temperatura y la sequedad ambiental  que producen las calefacciones. Estos elementos son causantes de que la piel pierda más agua favoreciendo su deshidratación.

Por estos motivos, la doctora nos recomienda adaptar nuestra forma de cuidarnos. Si nos fijamos en la limpieza, es aconsejable seguir llevándola a cabo por el día y la noche para retirar el maquillaje y la suciedad. Sin embargo, en invierno puedes apostar por productos de limpieza que sean más nutritivos y emolientes, como los aceites, y evitar jabones muy agresivos.

Después de la ducha, es el momento perfecto para hidratar en profundidad el cuerpo ya que nos encontramos con la piel húmeda. Resérvate unos minutos para utilizar una crema enriquecida y mimarte a nivel corporal.

La tercera recomendación de la experta de Nivea es seguir utilizando protección solar. Aunque ya no veamos tanto el sol, es clave seguir usando a diario un protector. A nivel facial resulta imprescindible pero también es aconsejable no descuidar tus manos. Proteger la piel de las manchas es uno de los deberes que debemos cumplir los 365 días del año.

La rutina beauty del invierno

Los expertos en el cuidado de la piel de la firma de perfumería y cosmética Equivalenza nos dan todas las claves para cuidar nuestro rostro y cuerpo durante los meses más fríos. Para ellos, lo más importante es seguir una rutina. Aunque pueda parecer una obviedad, es importante establecer una serie de cuidados faciales y corporales que cumplamos de manera diaria y semanal. De este modo, será más fácil llevarla a cabo y nos aseguraremos de tener en cuenta todos los pasos que nuestra piel necesita.

Una rutina corporal óptima empieza con una buena limpieza e hidratación

Según Mónica Castro, experta en el cuidado de la piel de Equivalenza, «una rutina corporal óptima empieza con una buena limpieza e hidratación de la piel, seguido del uso de productos que intensifican el cuidado de esta, como por ejemplo los anticelulíticos y reductores». También es importante tener en cuenta los pies, las axilas y las manos, ya que suelen ser los eternos olvidados. Además, una o dos veces por semana, es recomendable exfoliar la piel con una manteca exfoliante corporal para dejarla suave, renovada y libre de células muertas.

Es importante ser constantes y aplicar los tratamientos anticelulíticos durante todo el año para que los resultados sean visibles. Una manera fácil de conseguirlo es utilizar un sistema en roll-on que permite una aplicación rápida, cómoda y sencilla.

En el momento de la ducha, podemos aprovechar para usar productos con texturas cremosas y suaves. Es recomendable no utilizar agua demasiado caliente ni demasiado fría, ya que pueden  resecar aún más la piel y hacerla más frágil. Conviene intensificar la hidratación en las piernas y los pies. ¡Y no olvides los talones! Es una zona muy susceptible a la sequedad. Además, la piel de las manos es especialmente sensible, lo ideal sería hidratarla cada vez que nos las lavamos.

Si atendemos a nuestro rostro, la experta advierte que debemos tener en cuenta el momento del día porque las funciones y necesidades de la piel cambian. Por la mañana, el objetivo es hidratar y proteger la piel de todas las agresiones externas, por lo que recomienda el uso de cremas ligeras con protección solar. Por la noche, en cambio, la rutina facial debe centrarse en reparar y renovar la piel. Para ello, utilizaremos productos antiaging que trabajarán mucho mejor mientras dormimos porque los tratamientos son más efectivos durante la noche.

Para realzar la mirada utilizaremos un contorno de ojos reafirmante con una fórmula antifatiga y antienvejecimiento que conseguirá despertar y rejuvenecer el aspecto cansado. Otro producto ideal son las ampollas faciales que iluminan y mejoran la apariencia de la piel de manera inmediata.

La cosmética estacional para la piel

La mayor diferencia entre los cosméticos del invierno y los del verano se encuentra en las texturas porque las cremas pasarán de ser serum a geles transparentes. También existe cambios en la densidad del producto ya que en verano se busca una menor densidad y frescura para obtener un resultado más fluido. Por último, el color y olor también varían porque se adaptan a los tonos y las notas olfativas propias de cada estación.

Una de las firmas que tienen en cuenta este tipo de variaciones es Derma Reset que llega a España con un proyecto único y ambicioso que consiste en una línea de cosméticos estacionales.  Su trabajo se basa en la idea de que la belleza no reside solamente en la superficie de la piel, la clave se encuentra en cuidar nuestro organismo por dentro. Por ello, y conscientes de la influencia de las agresiones del entorno y la climatología, apuestan por reformular todos sus productos dos veces al año ajustándolos a las necesidades de la piel en cada época.

Derma Reset también se diferencia en el sector por ser una marca de cosmética natural que tiene en cuenta la genética y los cambios hereditarios que pueden influir en nuestra piel. Con estos principios lanzan al mercado tres líneas de producto: facial, corporal y serum. Estos cosméticos se reformulan dos veces al año manteniendo sus eficaces componentes activos pero variando el nivel de absorción e hidratación para adaptarlos al cambio de temperatura de cada temporada.

La línea de cuidado corporal está compuesta por una crema corporal reafirmante y otra anticelulítica de uso diario. Por otro lado, la línea facial la componen dos cremas hidrantes y un agua micelar. Tres propuestas perfectas para combatir los signos de estrés o cansancio de nuestro rostro y aportar los nutrientes necesarios para mantener la elasticidad y firmeza de la piel. También podemos utilizar su línea de serums donde encontraremos uno reafirmante, otro blanqueante e hidratante antiarrugas y un contorno de ojos de triple acción.

Hay que destacar que estas tres líneas de producto están formuladas con entre el 95% y el 98.8% de ingredientes naturales de origen vegetal. Si quieres conseguir una rutina facial de sobresaliente este invierno, desde la marca nos aconsejan la triple combinación de su crema hidratante, el agua micelar y el contorno de ojos.

¿Preparada para adaptar tus neceser a las bajas temperaturas?