Roberto Verino cumple 40 años: pasado, presente y futuro de una marca histórica
Hablamos con el diseñador gallego para conocer de primera mano su trayectoria, cómo va a celebrar este especial aniversario y sus planes para el futuro
El 2022 es un año especial para Roberto Verino, un año en el que celebrará cuatro décadas en la moda defendiendo un estilo sencillo, funcional y sereno. Sin duda, uno de los grandes nombres de la moda española que, lejos de retirarse, ha decidido aprovechar este cumpleaños redondo para preparar su relevo generacional y ceder parte de las riendas del negocio a su hija.
Las creaciones de Verino forman parte del legado cultural en España. Su empeño durante estos 40 años de profesión ha sido apostar por un fondo de armario emocional que trasciende el paso del tiempo y las tendencias. Por ello, sus dos señas de identidad más características son la atemporalidad y la calidad de sus diseños. Además, puede presumir de ser un adelantado a preocupaciones actuales como la sostenibilidad, la producción en cercanía o la búsqueda de nuevos tejidos.
Con un trabajo sin descanso, Verino es uno de los mejores testigos de la evolución de la moda en las últimas décadas. Ante sus ojos profesionales ha visto desfilar revoluciones absolutas como la llegada del fast fashion o la venta online. THE OBJECTIVE se entrevista con uno de los grandes diseñadores de la moda para conocer más sobre el pasado que celebra, el presente del que disfruta y el futuro con el que sueña.
40 años de moda
Roberto Verino comenzó su andadura allá por el 1982, en una España completamente diferente a la actual. Con la perspectiva del paso del tiempo, es un buen momento para saber cómo fueron sus comienzos en la profesión y los momentos más especiales que ha vivido a lo largo de su carrera.
PREGUNTA. ¿Cuándo se dio cuenta que quería dedicarse a ser diseñador de moda?
RESPUESTA. No fue algo premeditado, la vida me llevó a trabajar para una empresa de moda en París mientras estudiaba Bellas Artes. Durante ese tiempo me dediqué a aprender el oficio y, sobre todo, el negocio. Por un lado, quería crear una marca que diese la oportunidad de vestir como las europeas a una mujer que empezaba a emanciparse en España y no podía acceder a las grandes firmas internacionales. Por el otro, quería crear una empresa en Verín, mi pueblo, para que las mujeres no tuviesen que irse a vivir fuera.
P. En los primeros años, ¿pensó en algún momento en tirar la toalla?
R. Nunca, de la misma manera que tampoco lo he hecho después de esta pandemia y con muchos más años. Los momentos más duros son siempre aquellos en los que la situación te pide un cambio y debes adaptarte a la nueva realidad sin perder tu esencia. A lo largo de nuestros 40 años hemos tenido que hacerlo varias veces. Algo habremos hecho bien porque seguimos aquí y no hay duda que con una propuesta relevante.
Mi proyecto pasaba por generar trabajo en mi pueblo
P. ¿Cuál fue el primer gran triunfo que recuerda?
R. Montar Roberto Verino en Verín en contra de todos los asesores. Fue crear una industria en un pueblo de Galicia donde no había preparación, pero tenía muy claro que tenía que ser allí, mi proyecto pasaba por generar trabajo en mi pueblo. Y lo conseguimos, fue un trabajo de todos porque los equipos pusieron mucho de su parte para formarse y hacer de Verino lo que hoy conocemos.
P. A lo largo de estos 40 años, ¿cuál cree que ha sido el mejor momento que ha vivido la moda española?
R. Los años ochenta, cuando empezamos a despertar del letargo que habíamos vivido y esa energía se respiraba en todas las facetas creativas. Luego, los noventa nos dieron la visibilidad que necesitábamos.
P. ¿Cuál cree que es el secreto para mantener una firma viva durante cuatro décadas?
R. Saber adaptarse a los tiempos siendo fiel a uno mismo.
P. En toda su carrera ha podido ver grandes transformaciones en el mundo de la moda. ¿Qué opina del fast fashion?
R. Creo que el fast fashion ya pasó, ya tuvo su momento. El sentido común se está volviendo a imponer y la moda de valor vuelve a recuperar terreno.
P. ¿Y su postura ante las influencers de moda?
R. Siempre ha habido influencers, ya lo fue María Antonieta en la corte de Versalles. Solo que ahora hay más, y no todas tan interesantes como ella.
P. De la nueva hornada de jóvenes diseñadores. ¿Tiene algún favorito al que siga con especial interés?
R. Creo que hay talento joven muy potente con las ideas muy claras. Me gustan todos aquellos que están trabajando con artesanos locales y nuevos materiales. Esa unión es el camino de futuro. En Verino estamos desarrollando un proyecto para defender los oficios de moda porque nos parece clave para el futuro de la industria.
Así es Roberto Verino en 2022
El diseñador ha querido celebrar su 40º aniversario con un evento en el que ha reunido a 40 amigas que admira y que simbolizan a la mujer Verino. 40 mujeres diferentes y especiales que simbolizan las cuatro décadas de la firma y que reunieron a rostros como María Castro, Antonia San Juan o Nuria March.
Junto a ellas, ha presentado su colección primavera – verano 2022 con una performance que refleja la filosofía de la firma por hacer algo más que ropa, prendas que acompañan en momentos felices y que hacen sentir bien. Con esta puesta en escena, el diseñador gallego inicia una serie de celebraciones que se sucederán a lo largo de este año para conmemorar el aniversario de la marca.
P. ¿Qué acciones tiene planteadas la firma para llevar a cabo este año y celebrar su aniversario?
R. Hemos planteado una serie de acciones que se iniciaron en enero. Desde una colección cápsula de iconos de la marca, una exposición de fotografía itinerante por diversos lugares de España, hasta un evento que reunirá a antiguos trabajadores de la firma.
P. ¿Cómo afronta la empresa los retos económicos actuales?
R. Con mucha cautela y contando con los equipos más que nunca. Creemos que solo el talento y la capacidad de trabajar en equipo nos ayudará a salir de esta situación.
Nuestras clientas resaltan que nuestros diseños perduran en sus armarios durante años
P. ¿Cómo definiría a la mujer Verino?
R. Nuestra mujer se define claramente por su gusto por las prendas de estilo atemporal y una belleza equilibrada. Prendas que hablan más en el cuerpo que en la percha y que se adaptan como un guante. De ahí que nuestras clientas resalten que nuestros diseños perduran en sus armarios durante años y que incluso tienen algunos heredados de su madres que todavía se ponen regularmente. En Verino creemos en los fondos de armario emocionales porque se crean con prendas que forman parte de nuestra vida.
La mujer Verino, en general es una mujer segura, emprendedora, profesional y, en la mayoría de casos, busca que su armario no le falle porque tiene muchas otras cosas importantes de las que preocuparse.
Su colección para esta temporada
Las nuevas propuestas de Roberto Verino para esta primavera – verano sirve de homenaje a todas las cosas eternas, capaces de mantenerse en el tiempo porque saben adaptarse sin perder su esencia. En Belleza Serena, el nombre con el que ha sido bautizada la colección, destacan las piezas de sastrería, sobre todo el traje tres piezas. También hay una apuesta por el color block en prendas holgadas y con movimiento y, llegada la noche, se otorga el protagonismo al negro con detalles de brillos y tejidos bordados.
P. ¿Qué prendas destacaría de la colección?
R. Creo que Roberto Verino, si ha destacado en algo siempre, es en sus prendas de sastrería como los blazers y trajes chaquetas. En esta colección son especialmente maravillosos. También destacaría las prendas amplias como los caftanes.
P. ¿Se vive con igual ilusión la preparación de una nueva colección después de tantos años de trabajo?
R. Eso nunca cambia y es concretamente esa misma ilusión la que te engancha a este oficio.
P. ¿Cuáles son las mayores diferencias entre las colecciones que se diseñan en la actualidad y las que se podían hacer hace 20, 30 o 40 años?
R. En nuestro caso, lo que más ha cambiado es que las prendas pierden estructura y se vuelven más ligeras para una vida más activa. Los abrigos se hacen en tela de doble faz para quitarles estructura y que, por ejemplo, puedan meterse en una maleta. Ahora buscamos la versatilidad y la facilidad por encina del encorsetamiento y los protocolos.
Sus planes de futuro
Este año, Roberto Verino vive un relevo en la dirección de la compañía. El diseñador ha decidido ceder el testigo a su hija, Cristina Mariño, quien lleva junto a él desde que terminó la universidad y que se pondrá al frente de la dirección de la marca. La directiva se complementa con Dora Casal, quien se hará cargo de la parte ejecutiva. El objetivo es afrontar los nuevos retos con los que se enfrenta la marca en el siglo XXI, como la digitalización, la innovación y la internacionalización de la firma, sin perder sus valores.
P. Ahora cede el testigo de la dirección. ¿Cómo ha sido tomar esta decisión?
R. Fácil. Cuando tienes delante de ti a dos claras ganadoras uno no se lo piensa mucho. He tenido mucha suerte con ellas. No hay duda de que por su personalidad y experiencia, representan el Verino del siglo XXI.
Todavía me quedan muchas batallas que dar como Director Creativo
P. A partir de ahora, ¿qué funciones desempeñará dentro de la firma?
R. Todavía me quedan muchas batallas que dar como Director Creativo de la marca. Yo seguiré en la firma hasta que pueda, dando mayor protagonismo a las nuevas caras.
P. ¿Cuáles son los proyectos que la firma tiene de cara a los próximos años?
R. Como en los inicios, nuestro proyecto se enfoca en seguir ofreciendo un servicio social, esta vez con proyectos vinculados a la protección de los oficios de moda. Es, a su vez, una forma de frenar la España vaciada. Otro proyecto es continuar nuestra expansión internacional para llevar la marca a muchas más mujeres y hombres.
P. ¿Qué sueño aún le quedaría por cumplir?
R. Los gallegos solemos decir que si descubres tus sueños no se cumplen; así que…..
Con los cambios realizados en la cúpula directiva, Roberto Verino se propone volver a disfrutar de otros 40 años de éxitos. Una fórmula para seguir engrosando vivencias en una de las firmas con más historias de la moda española. ¡Feliz aniversario!