'Beauty coach': descubre a los profesionales que pueden ayudarte a cambiar tu aspecto
Los entrenadores de belleza se han puesto de moda entre celebrities, políticos y empresarios y su función es cambiar la imagen que proyectas hacia los demás
El término coach se ha implantando en nuestro vocabulario diario. Lo solemos relacionar con un entrenador, pero el coaching va mucho más allá ya que consiste en ayudar, orientar y formar a una o más personas a conseguir sus objetivos. En la actualidad se ha puesto muy de moda en diversos campos como el deportivo, el empresarial, el educativo… pero recientemente ha aparecido la figura del beauty coach, que está especializado en el mundo de la belleza.
En algún momento de nuestra vida, cuando sobre todo queremos dar un giro personal o profesional, necesitamos de un guía personal que nos ayude a superar obstáculos y poder reflejar con nuestra imagen lo que verdaderamente queremos comunicar. Para lograrlo con éxito, nada mejor que ponerse en manos de profesionales que utilizaran unas herramientas y estrategias personalizadas para cada individuo.
A la hora de cambiar nuestra imagen, siempre hemos pensado en la figura del personal shopper, ese profesional encargado de asesorarnos sobre la forma de vestir que más nos favorece. Pero, ¿qué hay de otros aspectos relacionados con la belleza? Igual de importante que las prendas que usamos, puede ser el peinado, el maquillaje o el cuidado de la piel. Ahí es donde entra en juego el trabajo de un beauty coach.
Desde THE OBJECTIVE vamos a analizar más en profundidad este nuevo servicio de beauty coach que cada día es más demandado. Conoceremos en qué consiste su trabajo y cómo se consigue cambiar la forma en que nos ven los demás (y nosotros mismos), aumentando nuestra confianza y autoestima.
¿Qué es un ‘beauty coach’?
Un beauty coach se podría traducir como un entrenador de belleza. Se trata de un profesional que tiene como objetivo que su cliente conozca bien cómo es su piel y su cuerpo para detectar sus problemas y ponerles solución a través del uso de cosméticos, práctica de ejercicio físico y unas nuevas pautas de alimentación.
Su ámbito de trabajo es tan amplio que el beauty coach necesita contar con una diversa formación profesional en distintos campos de la belleza para saber detectar los problemas de cada persona e identificar sus causas para encontrar la mejor solución. Así, estos expertos están a la orden del día sobre estética, cosmética, deporte o nutrición.
Sus funciones son asesorar y formar a las personas que contratan sus servicios. Con las pautas que te brinda el beauty coach puedes conseguir detectar también tus virtudes y puntos fuertes para potenciarlos al máximo. El fin es proyectar una imagen que se ajuste a tus características físicas y a tu estilo de vida. Por ello, es un trabajo totalmente individualizado en el que experto y cliente van de la mano en un proceso de conocimiento personal.
Actualmente es un servicio demandado y ofertado mayoritariamente por mujeres. El trabajo de un beauty coach arranca con una entrevista personal con el cliente para conocer sus necesidades y aspiraciones. En este encuentro inicial se realiza un estudio en profundidad sobre la piel y se lleva a cabo un cuestionario para conocer el estilo de vida y los hábitos de alimentación.
Pero una buena beauty coach no se queda sólo en el aspecto físico sino que trabaja también la parte emocional. Para que una mujer se sienta mejor con su imagen no todo es saber recomendar qué cosméticos debe usar, también hay que tratar la autoestima y el autoconocimiento.
Motivos para contratar sus servicios
Ahora que ya conoces en qué consiste el trabajo de un beauty coach, puede que te estés planteando el contratar sus servicios. Para servirte de ayuda, te aportamos los cinco principales motivos para contratar la experiencia de un profesional de la belleza:
- Conseguirás ofrecer la mejor versión de ti misma lo que influirá positivamente en todas las emociones relacionadas con el aspecto físico.
- Con el extra de autoestima lograda, te verás más capacitada para conseguir tus objetivos lo que se puede traducir en un giro profesional o personal.
- Evitarás pensamientos negativos o dañinos, tanto hacia ti misma como a los demás
- Servirá para recuperar la motivación por aquello que antes te hacía sentir bien
- Conseguirás beneficiarte de todas las ventajas de llevar un estilo de vida saludable con un cambio en la alimentación y la práctica de ejercicio físico que también te ayudará a descansar mejor.
Así es su día a día
Nade mejor que hablar con un profesional del sector para conocer de primera mano cómo es su trabajo diario. Piluka de Echegaray lleva más de 20 años como profesional de la imagen personal y corporativa. Por sus manos han pasado famosos personajes públicos como actores, influencers y cantantes así como políticos, empresarios o deportistas de élite. Hoy día dirige el Instituto Piluka Echegaray en el que imparte cursos, tanto online como presenciales.
PREGUNTA: ¿En qué consiste el trabajo de un beauty coach?
RESPUESTA: El trabajo de un asesor de imagen personal consiste en analizar las características físicas, intelectuales y sociales del cliente y valorar su estilo de vida. Por último, junto con él, se marcan metas y objetivos. En base a todo ello, se realiza un estudio y se crea una estrategia para crear esa imagen que realmente le representa.
P: ¿Sobre qué aspectos trabaja un beauty coach?
R: Se debe trabajar todo. Un buen asesor de imagen tiene formación en distintas materias: vestimenta, peluquería, maquillaje, implantes capilares, medicina estética, comportamiento, expresión verbal y no verbal, etc. El asesor aconsejará y derivará a los profesionales necesarios en cada caso. Te puede aconsejar en el peinado que más te favorece, pero no te peina.
P: ¿Cómo influye el aspecto físico en nuestra autoestima?
R: De forma directa y constante. Verte bien te hace sentir bien. Es como si tu cerebro recibiera el mensaje de «tranquilo, ahí fuera todo está bien». Por supuesto la autoestima requiere de más trabajos, no solo de la imagen, pero el aspecto tiene un peso importante.
P: ¿Se puede reflejar nuestra personalidad a través de la forma en que nos vestimos o arreglamos?
R: Absolutamente. En eso consiste una buena asesoría y eso hará que atraiga situaciones, personas y cosas que tienen que ver con nuestra verdadera realidad.
Es un trabajo que a todos nos iría bien
P: ¿Qué tipo de personas acuden a la ayuda del beauty coaching?
R: El perfil es muy variado, pero sobre todo los que, por su profesión, su exposición en medios es más exigente. Después de una ruptura sentimental, un ascenso profesional, pérdida o aumento de peso… cualquier cambio importante puede ser excusa para acudir a un asesor. Es un trabajo que a todos nos iría bien.
P: ¿Qué formación suelen tener este tipo de coaches?
R: Formación en imagen personal, ciertos conocimientos en sociología y comportamiento social, protocolo social, algunos conocimientos en determinados aspectos de la psicología, lenguaje no verbal y, por supuesto, estar al día en tendencias. Pero solo tener conocimientos en tendencias le convertiría en estilista de moda pero no en asesor de imagen, este es un error muy común.
P: ¿Es un servicio puntual o se mantiene a lo largo del tiempo?
R: Puede ser un servicio puntual, como para un evento concreto, o puede mantenerse en el tiempo. Va a depender de la comodidad, disponibilidad y economía del cliente. Mi recomendación es mantenerlo un año para que el asesor pueda acompañar al cliente en el recorrido de las cuatro estaciones y ayudarle a adaptar su imagen de forma paulatina a cada clima y situación social.
P: ¿Es necesario que el cliente se involucre activamente en este proceso de cambio?
R: Depende del cliente y del asesor. Yo siempre involucro bastante al cliente pues debo meterme en sus zapatos y entender su propia percepción de la estética. Tiene que enviar un mensaje a los demás pero, el más importante, es el que se envía a sí mismo.
P: ¿Cuánto puede costar los servicios de un beauty coach?
R: En mi caso, un análisis de imagen tiene un coste de 650€, un análisis de armario 490€ y un shopping una media de 390€. No es algo costoso.
Si alguna vez has pensado en ponerte en manos de un profesional para hacerte un cambio de imagen, ahora ya conoces la figura del beauty coach que podrá ayudarte en un proceso que abarca todos los ámbitos de tu aspecto físico.