¿Qué tienen en común las parejas duraderas?
Las relaciones no son simples de construir ni mantener, por ello no hay que descuidar aspectos importantes de la relación
Algunas parejas que han estado juntas durante mucho tiempo pueden creer que su relación funciona automáticamente y perdurará indefinidamente.
Sin embargo, como con todas las cosas valiosas, esto no es cierto, explica la psicóloga Iratxe López. Si no fortaleces y trabajas en tu relación de pareja, corres el riesgo de perderla o, peor aún, de caer en una relación poco saludable.
Es crucial ver el fortalecimiento de la pareja como una necesidad absoluta, incluso en momentos de estrés.
¿Qué es una relación sana?
Hablar de relaciones de pareja sanas podría llevar a pensar erróneamente que hay relaciones perfectas, lo cual no es realista.
Todas las relaciones tienen sus imperfecciones debido a que las personas no son perfectas. Lo crucial no es la ausencia de debilidades en una relación de pareja, sino que sea una relación en la que ambas partes estén comprometidas a trabajar juntas para abordar y resolver cualquier problema o debilidad que surja.
Es común empezar una relación impulsada por buenos sentimientos que nos hacen decir estoy enamorado/a u expresiones similares.
No obstante, es crucial recordar que las relaciones no son simples de construir ni mantener. Es importante estar alerta y no descuidar aspectos importantes de la relación.
Mantener una actitud crítica y atenta puede aumentar las posibilidades de tener una relación de pareja saludable, explican R&A psicólogos, expertos en psicología.
Esto es lo que tienen en común las parejas que duran
En el ámbito de las relaciones, hay mucho romanticismo que merece ser cuestionado, sobre todo cuando se tratan de parejas que llevan muchos años juntos.
Al observar este tipo de relaciones desde un punto de vista científico, según Sebastián Struck, autor de los libros Se buscan rebeldes y El poder de la credibilidad, pueden llegar a desarrollar estrategias para cultivar una intimidad más duradera y saludable, siendo más realistas con la vida.
Este enfoque nos permite llegar a tener éxito con nuestros vínculos, siendo más racionales y efectivos para fortalecer así relaciones más a largo plazo.
- La pasión se va: es normal, los químicos del enamoramiento duran de uno a cinco años, pero esa no es razón para cortar o buscar emoción en otro lugar, ya que la pasión es algo que se puede cultivar.
- No siempre están completamente enamorados: tal vez haya enfados o decepciones a lo largo de los años y en ese momento deja de ser tu persona favorita por el momento, pero la clave está en saber que son emociones pasajeras y a la larga se siguen eligiendo.
- Saben que las conversaciones incómodas son necesarias: todas esas charlas que son difíciles de tener con tu pareja hacen que a la larga la relación sea más fácil y llevadera.
- Tienen discusiones y conflictos: es normal y el punto clave está en aprender a escuchar y dialogar cuando la emoción baja. La idea es tratarse con amor y respeto e incluso cuando hay dolor y heridas.
- No tienen expectativas: no esperan que la pareja sea su fuente de felicidad, no tienen siempre las mismas actividades de diversión o intereses.
- Se proponen crecer juntos: todos tenemos defectos, errores, heridas y falsas creencias, la pareja duradera coge responsabilidad por igual para enfrentarse a cualquier cambio.
- Siempre se apoyan: en una relación larga, te tocará ver la mejor y la peor versión de alguien y habrá momentos en que uno de los dos necesite apoyo y la otra persona tendrá que poner más esfuerzo.
- Saben que la individualidad es sana y necesaria: es la única forma de que la relación permanezca sana, interesante y viva.
¿Por qué es importante mantener el vínculo con tu pareja?
La psicóloga Iratxe López destaca cómo la desconexión y la distancia pueden tener efectos muy significativos en nuestra relación.
Cuando el vínculo está vivo entre dos personas que se quieren, la comunicación fluye mejor, al igual que la confianza y el afecto.
Por otro lado, si la conexión con tu pareja está debilitada, predominan la distancia y la falta de entendimiento. Por eso es crucial nutrir y fortalecer los lazos constantemente.
Es evidente que el trabajo, las preocupaciones y el ritmo agitado de nuestras vidas pueden ser grandes obstáculos para las relaciones de pareja, pero no por ello debemos de abandonar y tumbarnos a la bartola. Al final y al cabo una relación se resume en trabajo, respeto y amor por parte de los dos.