La arquitecta Marta Montecucco avisa que tener «el lavadero en la cocina es un error»
Tradicionalmente la lavadora se coloca en la cocina pero esto puede ser incómodo y antihigiénico

Señora haciendo la colada. | (Canva)
Contar con un espacio dedicado exclusivamente al lavado y cuidado de la ropa es un deseo común en muchas casas. Sin embargo, la falta de metros cuadrados suele llevar a colocar la lavadora en la cocina. Una solución que, según la arquitecta Marta Montecucco, es un error. Montecucco, fundadora de MAO Studio, enfatiza la importancia de disponer de un lavadero independiente para optimizar las tareas domésticas y mantener el orden en el hogar.
La colada es una actividad cotidiana que, si no se organiza adecuadamente, puede convertirse en una fuente de desorden y estrés. Disponer de un espacio específico para esta tarea facilita el proceso y contribuye a una mejor gestión del hogar. Puesto que, si está en la cocina la ropa adquirirá olores.

Cómo hacer la colada
Una gestión eficiente de la colada implica una serie de pasos que, al seguirse correctamente, pueden ahorrar tiempo y esfuerzo:
- Clasificación de la ropa: separar las prendas por colores y tipos de tejidos.
- Revisión de etiquetas: consultar las instrucciones de lavado de cada prenda para determinar la temperatura y el ciclo adecuados.
- Carga adecuada de la lavadora: no sobrecargar el tambor permite que el detergente y el agua circulen correctamente.
- Uso de productos adecuados: según las necesidades específicas de las prendas y el nivel de suciedad.
- Secado apropiado: optar por el secado al aire libre siempre que sea posible y utilizar secadora solo cuando sea necesario.
- Planchado y almacenamiento: planchar las prendas si es posible con plancha de vapor.
El lugar correcto del lavadero en casa
Marta Montecucco propone tres alternativas para situar el lavadero en casa. La primera de ellas consiste en aprovechar el baño para instalar la lavadora, ya que este espacio cuenta con las tomas de agua y desagües necesarios. Además, al ser una zona húmeda, es compatible con las actividades relacionadas con la colada.
También, integrar el lavadero en un armario permite ocultar los electrodomésticos y mantener la estética del hogar. Ubicar este armario en un pasillo cercano a las habitaciones facilita el acceso a la ropa sucia y reduce los desplazamientos, optimizando el tiempo dedicado a las tareas domésticas.
Aprovechar espacios como terrazas es otra alternativa. Estos rincones, a menudo sin uso, pueden convertirse en áreas funcionales para la colada, siempre que se estudie cuidadosamente el espacio disponible.
Los muebles columnas
Además de las sugerencias de Montecucco, otros profesionales del diseño de interiores ofrecen ideas para integrar el lavadero en el hogar de manera práctica y estética:. Es el caso, María del Valle, interiorista y fundadora de María del Valle Interior Staging, que recomienda la instalación de un lavadero en un mueble de columna. Esta solución permite ocultar la lavadora y la secadora detrás de puertas, manteniendo la armonía visual del espacio.
Lavaderos de la diseñadora Mónica Garrido
Mónica Garrido propone varias soluciones para integrar el lavadero. Como instalar una barra que abarque toda la longitud de una pared para facilitar el secado. O diseñar el lavadero con módulos independientes facilita su adaptación a diferentes espacios y necesidades, permitiendo una configuración personalizada y flexible.
También, recomienda aprovechar paredes sin uso instalando estanterías o soportes verticales que permiten organizar los elementos del lavadero sin ocupar espacio en el suelo, ideal para viviendas con limitaciones de espacio. En forma de L, que aprovecha dos paredes contiguas, creando un espacio de trabajo eficiente y permitiendo la incorporación de zonas de almacenamiento.
Otra opción es la de separar el lavadero del resto de la vivienda mediante una puerta de cristal mantiene la independencia del espacio sin sacrificar la luminosidad ni la sensación de amplitud.
Como ves, integrar el lavadero fuera de la cocina, contribuye a una mejor organización y eficiencia en las tareas domésticas. Las recomendaciones de expertos como Marta Montecucco, María del Valle y Mónica Garrido ofrecen diversas alternativas adaptables a las necesidades y posibilidades de cada vivienda, permitiendo crear espacios funcionales y estéticamente agradables para el cuidado de la ropa.