The Objective

Espacio patrocinado por

The Positive
Lifestyle

'Meraki': descubre la fórmula griega (que está arrasando) para trabajar con éxito y felicidad

Esta corriente nos empuja a diferenciarnos de los demás sacando nuestra esencia personal en cada tarea

‘Meraki’: descubre la fórmula griega (que está arrasando) para trabajar con éxito y felicidad

Te puede ser de mucha ayuda

Para la mayoría el lunes es un día duro, el martes también pero un poco menos; el miércoles ya empezamos a remontar; el jueves estamos muy arriba y el viernes a mediodía no queremos saber ni a qué nos dedicados profesionalmente. Esta realidad, palpable en casi cualquier rincón de las grandes ciudades, ha hecho que muchas personas se replanteen su relación con su trabajo. Y así ha empezado a surgir con fuerza el término meraki, un concepto de la Grecia clásica que capturaba la idea de volcar el corazón y el alma en cada tarea.

Aunque en español no hay un equivalente exacto de meraki, su significado—«hacer algo con amor, pasión y creatividad, dejando una parte de uno mismo en lo que se hace»—se ha hecho un hueco indiscutible hoy en todo lo relativo a la creatividad y bienestar, ya que impulsa a los profesionales a reconectar con lo manual y lo sensorial.

Este fenómeno, al que algunos llaman «desconexión meraki», funciona de forma similar a la atención plena o mindfulness. Según un estudio, centrar la atención en los detalles de una actividad mejora el bienestar y reduce el estrés. Y meraki incentiva precisamente esa atención plena, apostando por disfrutar del proceso en lugar de perseguir únicamente resultados.

Meraki y la importancia de fluir: lo que dicen los estudios

El concepto «fluir» fue acuñado por el psicólogo Mihály Csíkszentmihályi en 1990 para describir un estado mental en el que la persona está totalmente inmersa en la actividad, experimentando una concentración intensa, pérdida de la noción del tiempo y satisfacción total. Estudios posteriores han relacionado este estado con una mayor creatividad y bienestar general. De hecho, quienes practican tareas artísticas, deportivas o laborales con frecuencia describen experiencias muy cercanas a lo que los griegos condensaron en meraki: un compromiso que trasciende la simple ejecución de una tarea.

felicidad eudaimónica

Aunque no es habitual encontrar el término meraki en estudios académicos, existen investigaciones que apoyan su trasfondo conceptual. Una de ellas es la teoría de la autodeterminación de los psicólogos americanos Edward L. Deci y Richard M. Ryan, quienes sostienen que la motivación intrínseca surge cuando las personas sienten autonomía, competencia y conexión con los demás. Meraki—’poner corazón y creatividad en la tarea’—es una manifestación clara de esta motivación intrínseca, pues no se trabaja para obtener reconocimiento externo, sino porque la actividad en sí resulta satisfactoria. Para que podamos entenderlo, cuando, por ejemplo, un artesano crea un objeto «con meraki», está satisfaciendo esas tres necesidades: decide libremente (autonomía), demuestra destreza (competencia) y, con frecuencia, comparte su creación con otros (vínculo social).

Otras investigaciones sobre creatividad y bienestar laboral, como la realizada por la académica Teresa Amabile en 1996, sugiere que los entornos que favorecen la pasión por la tarea y ofrecen libertad para explorar generan resultados más creativos.

Cómo aplicar ‘meraki’ en la vida cotidiana

Aunque la aplicación del término meraki, así como las investigaciones que hay al respecto, aún está en fases iniciales, son muchas las personas que ya lo aplican en su vida cotidiana. En talleres creativos, por ejemplo, los profesores animan a los alumnos a buscar su toque o sello personal y a no limitarse a copiar modelos, sino a hacer su propia obra.

En el mundo laboral, empresas de sectores como la moda o el diseño adoptan meraki como filosofía de marca, ya que se cree que hacerlo genera una conexión más íntima con los clientes, aumenta la fidelidad y diferencia el producto en un mercado saturado. Meraki también es algo que aplican cada vez más chefs y personas que, como tú y yo, tenemos que trabajar día tras día.

Así, este término griego sugiere que la motivación intrínseca y la atención plena en una tarea, sea cual sea, mejora nuestra calidad creativa y nuestro bienestar personal. Para la mayoría de nosotros—seamos artista, diseñadores, emprendedores o empleados de oficina—incorporar meraki a nuestro trabajo implica valorar tanto el camino como la meta. Dejar que cada proyecto lleve «algo de nosotros» y no sea una copia más no solo realza el resultado final, sino que fomenta una satisfacción que se sostiene en el tiempo y que actúa como cadena, pues nos seguirá llevando por el mismo camino. A fin de cuentas, ¿quién no quiere ser feliz, que el trabajo le apasione (más o un poco aunque sea) y diferenciarse de los demás?

Publicidad