Chanel y Moncler nos inspiran para los 'looks' de ski más estilosos en la montaña

El esquí siempre ha sido mucho más que un deporte: es un estilo de vida que combina aventura, exclusividad y, por supuesto, moda. Esta temporada, las pistas no solo están cubiertas de nieve fresca, sino también de looks que redefinen el lujo funcional. Inspirándonos en la elegante colección Chanel Neige 2024-25 y en las impecables propuestas de Moncler para el otoño-invierno 2024-25, te traemos las claves para destacar en cualquier destino de montaña.

Aún quedan meses por delante para disfrutar del invierno en su máximo esplendor: la Semana Blanca, días festivos estratégicamente colocados y esas escapadas improvisadas a la Sierra, Baqueira, Chamonix, Gstaad o Colorado. No importa si eres más de carving o de snowboard, esta guía es para ti: una inspiración que mezcla piezas clásicas y contemporáneas, llevando tu armario de esquí al siguiente nivel. Porque si algo está claro es que, en la nieve, el estilo es tan importante como la técnica.

Estos son los ocho estilos que me inspiran dos de las colecciones más lujosas del mundo:

Estampados de flores

Aunque el invierno suele evocar tonos neutros y paisajes monocromáticos, los estampados florales están conquistando las pistas esta temporada, añadiendo un giro inesperado y femenino al tradicional armario de esquí. Desde delicados motivos de flores silvestres hasta patrones exuberantes y coloridos, esta tendencia trae un aire romántico y primaveral a las montañas, demostrando que la moda también puede florecer en el frío.

El secreto para dominar esta tendencia está en el equilibrio: combina un mono de esquí con estampado floral con accesorios sobrios y minimalistas, como gorros de lana en tonos neutros o gafas de esquí en negro o blanco. Si prefieres algo más discreto, apuesta por chaquetas acolchadas con pequeños detalles florales o capas interiores con prints que se asomen sutilmente bajo prendas técnicas.

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Estampados clásicos

Si hay algo que nunca pasa de moda, incluso en el frío extremo, son los estampados clásicos. Desde conjuntos de esquí completos hasta accesorios estratégicos, estos patrones añaden un toque de distinción y versatilidad a cualquier look invernal. La pata de gallo, con su aire chic y parisino, funciona de maravilla en chaquetas acolchadas o pantalones técnicos, especialmente en combinaciones en blanco y negro que evocan el contraste de las cumbres nevadas. Por su parte, los cuadros —ya sean tartán, príncipe de Gales o vichy— aportan una vibra cálida y nostálgica, perfecta para quienes buscan un look más acogedor. Imagina un abrigo acolchado con cuadros en tonos tierra o una bufanda oversized que combine con tus botas après-ski.

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‘Look’ de calle

¿Quién dijo que la ropa técnica no puede parecer sacada de tu día a día? Esta temporada, los looks de esquí toman inspiración de materiales típicos de la vida urbana, como la pana y el denim, reinventándolos con tecnología impermeable y térmica para adaptarse al entorno más extremo: la montaña. El resultado es un estilo híbrido que te permite ir de las pistas al après-ski sin necesidad de cambiar de outfit.

La pana, conocida por su textura cálida y retro, se presenta en monos y pantalones de esquí con tratamientos repelentes al agua, perfectos para mantenerte cómodo y estiloso mientras conquistas la nieve. Por otro lado, el denim, que jamás pierde su estatus de básico atemporal, se moderniza en chaquetas y conjuntos que combinan su estética relajada con acabados técnicos, como forros térmicos y cierres herméticos, diseñados para protegerte del viento y las bajas temperaturas.

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Cintura ceñida

El acolchado ha sido el rey indiscutible de los looks de esquí durante años, pero el giro que da con la incorporación de cinturones que definen la cintura, crea una fórmula que favorece a todas las siluetas. Este detalle, aparentemente simple, transforma las clásicas chaquetas oversize y los monos voluminosos en piezas elegantes que realzan la figura sin sacrificar comodidad ni funcionalidad.

Los cinturones, desde versiones técnicas con hebillas futuristas hasta opciones más sofisticadas en cuero o tejidos elásticos, añaden un toque estilizado que rompe con la monotonía del acolchado. Además, este diseño no solo cumple una función estética, sino que también ayuda a retener el calor en la zona central del cuerpo, lo que lo convierte en un aliado práctico en las bajas temperaturas.

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Motivos alpinos

Nada evoca el espíritu de la montaña como los tradicionales motivos alpinos. Desde copos de nieve delicadamente bordados hasta renos, abetos y cenefas geométricas, estos estampados traen consigo un aire de nostalgia y calidez que combina a la perfección con las vibraciones invernales. Esta temporada, estos diseños regresan con fuerza, renovados para adaptarse tanto a los puristas del estilo clásico como a los amantes de la moda contemporánea.

Lo mejor de esta tendencia es su capacidad para mezclar funcionalidad y estética, convirtiéndose en un guiño al legado del esquí sin perder de vista la innovación. Desde prendas exteriores hasta accesorios como guantes y bufandas, los motivos alpinos son el detalle perfecto para transmitir esa sensación de refugio cálido en mitad de un paisaje nevado.

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‘Total look’ rojo

El rojo, con su intensidad vibrante y su capacidad de llamar la atención, se posiciona como uno de los colores estrella de la temporada en los looks de esquí. Apostar por un total look en este tono no solo es una declaración de estilo audaz, sino también una elección práctica: imposible perderse en la montaña con un color tan llamativo.

Desde monos de esquí ajustados hasta chaquetas acolchadas oversized y accesorios a juego, este color lo envuelve todo con una elegancia que no pasa desapercibida. Además, las distintas tonalidades, desde el rojo cereza hasta los más oscuros como el burdeos, ofrecen opciones para adaptarse a cualquier estilo. Para equilibrar el total look, apuesta por detalles en negro o blanco que creen contraste, como guantes, botas o gafas de esquí. Si prefieres un enfoque más moderno, añade un toque metálico o texturas como el charol.

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Camuflajeados

Para quienes buscan un estilo discreto pero igualmente sofisticado, los tonos camuflajeados en blanco, beige y grises pálidos son una apuesta segura para estar a juego con la nieve. El secreto de esta tendencia está en las texturas y los matices. Desde chaquetas acolchadas en tonos crudos hasta pantalones técnicos en gris perlado, la clave es jugar con diferentes capas que aporten profundidad al look. Además, los acabados mate o ligeramente brillantes, como los tejidos satinados o metalizados en tonos pálidos, añaden un toque moderno y refinado sin perder esa esencia minimalista. Con estos tonos suaves, el camuflaje deja de ser militar para convertirse en una oda a la naturaleza, perfecta para deslizarse por las pistas con sutileza y estilo.

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Faux Fur

La piel sintética, o faux fur, se consolida como un imprescindible para quienes buscan añadir un toque de lujo y calidez a sus looks de esquí. Desde capuchas con borde de pelo en chaquetas acolchadas hasta abrigos oversized en tonos neutros o atrevidos, la faux fur aporta una textura suave y elegante. Incluso los accesorios, como guantes, orejeras o bolsos de piel sintética, se convierten en protagonistas, añadiendo ese toque acogedor y chic que todos queremos en pleno invierno.

Lo mejor de esta tendencia es su versatilidad: funciona igual de bien con un total look técnico que con prendas más relajadas para descansar junto al fuego después de un día en las pistas. Además, las versiones en tonos naturales como blanco, crema o marrón chocolate son ideales para un aire sofisticado, mientras que las opciones en colores vivos o pastel añaden un toque divertido y contemporáneo.

Ideas de shopping:

Queda comprobado que esta temporada, los looks de esquí no solo buscan ofrecer rendimiento, sino también marcar tendencia en las pistas. Desde los estampados florales que aportan un aire romántico hasta los clásicos motivos alpinos y los tonos camuflajeados que se fusionan con la nieve, la moda invernal se reinventa con toques de elegancia, comodidad y funcionalidad. Ya sea apostando por un total look rojo vibrante o envolviéndote en la suavidad de la faux fur, cada elección es una oportunidad para expresar tu estilo personal, sin perder de vista la protección que el clima de montaña exige. Porque, al final, esquiar también es una forma de vestir para destacar, tanto en las alturas como en el après-ski.

¿Quién dijo que la ropa técnica no puede parecer sacada de tu día a día? Esta temporada, los looks de esquí toman inspiración de materiales típicos de la vida urbana, como la pana y el denim, reinventándolos con tecnología impermeable y térmica para adaptarse al entorno más extremo: la montaña. El resultado es un estilo híbrido que te permite ir de las pistas al après-ski sin necesidad de cambiar de outfit.