Estos son los tres pueblos de España más fresquitos en verano
Puebla de la Sierra goza de un clima fresco y agradable durante todo el año, con temperaturas medias de 20°C
El verano ya está aquí, y con él, las altas temperaturas que pueden llegar a ser agobiantes. Si buscas un refugio del calor, España ofrece una gran variedad de pueblos con climas más frescos, perfectos para disfrutar de unas vacaciones o escapadas de fin de semana.
Los Picos de Europa
Los Picos de Europa son un macizo montañoso situado en el norte de España, entre las comunidades autónomas de Asturias, Cantabria y Castilla y León. Declarado Parque Nacional en 1918, este enclave natural ofrece un paisaje impresionante de montañas escarpadas, valles profundos, ríos caudalosos y bosques frondosos.
Un clima fresco en verano
A pesar de estar situados en la Península Ibérica, los Picos de Europa gozan de un clima fresco en verano, gracias a su altitud y a la influencia de los vientos del Cantábrico. Las temperaturas medias en julio y agosto rondan los 20°C, lo que convierte a esta zona en un refugio ideal para escapar del calor agobiante de otras regiones de España.
Un paraíso para los amantes de la naturaleza
Los Picos de Europa son un paraíso para los amantes de la naturaleza. En este parque nacional se pueden realizar todo tipo de actividades al aire libre, como senderismo, montañismo, escalada, espeleología, descenso de barrancos, rafting y piragüismo. Además, también se puede disfrutar de la observación de la fauna salvaje, en la que destacan especies como el rebeco, el oso pardo y el lobo.
Pueblos con encanto
Además de su impresionante paisaje natural, los Picos de Europa también cuentan con una gran variedad de pueblos con encanto. Algunos de los más destacados son:
- Sotres: situado en el concejo de Cabrales (Asturias), es el pueblo más alto de los Picos de Europa, a 1.504 metros de altitud. Es un lugar ideal para disfrutar de la tranquilidad de la montaña y de unas vistas impresionantes.
- Cangas de Onís: capital del concejo del mismo nombre (Asturias), Cangas de Onís es un pueblo histórico que alberga la Basílica de Santa María la Real y la Cueva de Covadonga, donde se encuentra la Santina, patrona de Asturias.
- Potes: situado en la comarca de Liébana (Cantabria), Potes es un pueblo medieval con un casco histórico muy bien conservado. Es un buen punto de partida para realizar rutas de senderismo por los Picos de Europa.
Puebla de la Sierra
Puebla de la Sierra, situada en el corazón de la Sierra de Gredos, en la provincia de Madrid, es un pueblo encantador que ofrece un refugio ideal del calor del verano. A una altitud de 1.490 metros sobre el nivel del mar, Puebla de la Sierra goza de un clima fresco y agradable durante todo el año, con temperaturas medias en julio y agosto de alrededor de 20°C.
Un entorno natural impresionante
Rodeado de bosques de pinos, praderas y montañas, Puebla de la Sierra es un paraíso para los amantes de la naturaleza. Se pueden realizar numerosas actividades al aire libre, como senderismo, montañismo, ciclismo, observación de aves y pesca. En las proximidades del pueblo se encuentra el Pico Almanzor, la cima más alta de la península ibérica, a la que se puede acceder a través de varias rutas de senderismo.
Un pueblo con encanto
Puebla de la Sierra conserva un trazado urbano medieval, con calles empedradas y casas de piedra y madera. La Plaza Mayor, presidida por la iglesia parroquial de San Miguel Arcángel, es el centro neurálgico del pueblo. En ella se puede disfrutar del ambiente tranquilo y acogedor de la localidad.
Los Pirineos
Los Pirineos, frontera natural entre España y Francia, son una cordillera montañosa que ofrece un sinfín de posibilidades para disfrutar de un verano fresco y agradable. Sus cimas nevadas, valles verdes, ríos caudalosos y bosques frondosos crean un paisaje impresionante que atrae a amantes de la naturaleza, senderistas, ciclistas y aficionados a los deportes de aventura.
Clima fresco
A diferencia de las zonas costeras y de las llanuras interiores de España, los Pirineos gozan de un clima fresco en verano. Las temperaturas medias en julio y agosto rondan los 20°C, lo que convierte a esta zona en un refugio ideal para escapar del calor agobiante.
Paisajes diversos
Los Pirineos ofrecen una gran variedad de paisajes, desde las altas cumbres nevadas como el Aneto (3.404 m), la cima más alta de la península ibérica, hasta los verdes valles salpicados de pueblos pintorescos. Los amantes del senderismo y la montaña podrán disfrutar de una amplia red de rutas señalizadas que les permitirán explorar los diferentes rincones de esta cordillera.
Los Pirineos están salpicados de pueblos con encanto que conservan su arquitectura tradicional y sus costumbres ancestrales. Algunos de los más destacados son:
- Jaca (Huesca): situada al pie del Pirineo Aragonés, Jaca es una ciudad histórica que alberga la catedral románica de San Pedro y el Museo Diocesano.
- Vielha (Lérida): capital del Valle de Aran, Vielha es un pueblo de montaña con un ambiente animado y una amplia oferta de actividades.
- Puigcerdà (Gerona): conocida como la «capital del Alto Ampurdán», Puigcerdà es una ciudad medieval con un bonito casco antiguo y un lago rodeado de montañas.