El general Joseph Dunford, jefe del Estado Mayor de EEUU, ha mantenido un encuentro en Pekín con su homólogo chino, Fang Fenghui, en el que ambas partes han acordado desarrollar lazos militares e intercambios frente a las crecientes tensiones en la península de Corea, ha informado la prensa oficial. La gira de Dunford se produce poco después de que los cruces de amenazas entre Trump y el régimen norcoreano de Kim Jong-un hicieran temer el estallido de un conflicto bélico entre EEUU y Corea del Norte.
Dunford, quien este miércoles visitará una base militar y asistirá a maniobras del ejército chino, ha mantenido este martes este encuentro con el general Fang, en el que los dos jefes castrenses también han firmado un acuerdo para crear un nuevo mecanismo de comunicación entre las dos Fuerzas Armadas.
Con ese mecanismo se busca «reducir los malentendidos y mejorar la gestión de riesgos en el crecientemente complejo clima geopolítico de Asia», ha señalado el diario China Daily. Aparte de la crisis norcoreana, China mantiene conflictos marítimos con vecinos como Japón, Filipinas o Vietnam, en los que EEUU ha presionado contra las reivindicaciones de Pekín.
Esas tensiones, así como la cuestión taiwanesa y el conflicto en Corea del Norte por sus ensayos nucleares y balísticos, han sido algunos de los principales temas en la agenda de las conversaciones, ha destacado China Daily.
Fang ha subrayado en el encuentro que la cooperación «es la única opción adecuada para China y EEUU» y ha asegurado que ambas potencias tienen potencial para ser buenos socios en el campo militar.
La visita de Dunford forma parte de una gira por Asia Oriental que se inició a principios de semana en Corea del Sur y proseguirá en Japón. El militar es el cargo de más alto rango que viaja a China desde la llegada a la presidencia de EEUU de Donald Trump. La gira de Dunford se realiza una semana antes de que EEUU y Corea del Sur celebren maniobras militares conjuntas que se teme podrían nuevamente causar la ira de Corea del Norte y desatar otra oleada de amenazas belicistas.
Pekín, aliado tradicional de Pyongyang, votó a favor de la última remesa de sanciones contra Corea del Norte en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, y reiteró su compromiso con esas resoluciones prohibiendo desde ayer, martes, toda importación de carbón, hierro, plomo y pescado norcoreano, informa Efe.