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Montero y Belarra activan la estrategia de la tensión para quemar a Yolanda Díaz

Montero y Belarra activan la estrategia de la tensión para quemar a Yolanda Díaz

Ricardo Rubio | Europa Press

Podemos ha activado una estrategia de la tensión para debilitar a Yolanda Díaz aprovechando la polémica sobre la derogación de la reforma laboral. Los rumores que apuntan a un doble juego de Podemos sobrevuelan el partido desde hace meses, pero en los últimos días todo se ha acelerado. Cuando los socialistas mostraron su «unidad» en el Congreso de Valencia, los dirigentes de Podemos entendieron que era oportuno lanzar el primer aviso a Díaz. Su objetivo ahora es «quemar» a la ministra de Trabajo, sostienen fuentes del partido morado a THE OBJECTIVE. 

«Esto se va a reventar, quizás no hoy ni mañana. Pero se reventará». Fuentes de Podemos muestran con contundencia su preocupación ante la situación interna del Gobierno, que en realidad tiene mucho que ver con los equilibrios en Unidas Podemos. Para algunas fuentes el empujón de Pablo Iglesias a Yolanda Díaz tras su dimisión fue un regalo envenenado, que ahora el grupo de Irene Montero quiere aprovechar para debilitar a la ministra de Trabajo.

Todo empezó hace pocos días. Después de atacar a Felipe González recuperando los GAL para defender a Bildu, Podemos subió el nivel de enfrentamiento acusando a Nadia Calviño de «injerencias» en la negociación de la reforma laboral. Poco después, convirtió el juicio a Alberto Rodríguez en un pulso sin precedentes con la presidenta del Congreso, Meritxell Batet.

En siete días, la guerra interna en el Gobierno ha ido in crescendo y, según algunos miembros del partido morado, ahora lo que interesa a la cúpula de Podemos es «tumbar» a la ministra gallega. Podemos exigió a Pedro Sánchez una reunión extraordinaria para aclarar las posiciones. El encuentro que se celebró el lunes en el Congreso terminó sin acuerdo. «Por el momento no hay consenso sobre la reforma laboral», explicaron los morados tras dos horas de discusión.

Reforma laboral como trampa

Puede que todavía sea pronto para que la sangre llegue al río, pero el toque de atención de Podemos a Yolanda Díaz es notable. «Quieren atarla en corto y recordarle quién manda», se lanza un miembro de Podemos. Es una amenaza que sirve para demostrar que Podemos todavía tiene mucho poder y que Yolanda Díaz debe «obedecer». 

El planteamiento de Podemos consiste en poner el listón muy alto para frustrar, si lo quiere, el plan de Díaz de ‘vender’ a la opinión pública un acuerdo a la baja como un éxito. Podemos sabe que la Unión Europea exige al Gobierno negociar con la patronal las medidas en este ámbito y que los empresarios impondrán descafeinar el acuerdo que hace años casi alcanzó la exministra Magdalena Valerio y sobre el cual trabaja Díaz.

Irene Montero lleva meses incómoda con Díaz: ante los suyos se queja de los ataques que recibe de las feministas, mientras le irrita el apoyo mediático que cosecha la gallega. Si fracasa con la reforma laboral, será más fácil señalar sus errores y su falta de liderazgo. El partido morado preparaba ese conflicto desde hace tiempo. Y ahora quieren aprovecharlo para «atenazar a Yolanda», según desvelan desde el propio partido. «Si es por la reforma laboral, no puede desmarcarse de esta crisis», argumentan.

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«Si Díaz entra al trapo, está muerta»

«Yolanda está débil por esta bronca que ha organizado el ala dura de Podemos», admiten incluso desde el frente sindical. A nadie se le escapa que la polémica promovida contra Batet por Montero, Iglesias y Enrique Santiago, el líder del PCE que está alineado con Podemos, tiene un claro sabor político. El sector de afines a la gallega, de hecho, señala con vehemencia a Santiago como uno de los principales artífices de lo que consideran algo parecido a una traición. 

Quienes vivieron en primera fila la desavenencia con Errejón van más allá. Sostienen que el método empleado para «quemar» a Yolanda Díaz es el mismo que se empleó contra Errejón entre 2017 y 2018. Se trata de una manera de promoverla, pero sin ofrecer el apoyo de cuadros necesarios para que su propuesta tenga éxito. Con la diferencia, admiten, de que Yolanda Díaz se ha dado cuenta de la trampa. La clave para los políticos de Unidas Podemos con más experiencia es sencilla: «El PSOE sabe que en Podemos la quieren debilitar. Pero mientras ella no entre al trapo le irá bien. Si entra, está muerta. Esto es una carrera de fondo».

Pero la situación es «delicada». La ministra de Trabajo lo admite pública y privadamente. Se ha desmarcado de Podemos pidiendo bajar los tonos con la polémica sobre Batet. Tampoco se involucró en la defensa de Bildu como socio de Gobierno, y en Podemos asisten a sus movimientos cada vez con más cansancio.

La portavoz de Podemos, Isa Serra, negó el lunes que los afines de Díaz no fueron informados de que se anunciaba una querella contra la presidente del Congreso. Según su versión, sí se adelantó; otra cosa es que los demás, entre ellos Alberto Garzón, no dijeran nada. Serra también avisó a Díaz: «No vamos a permitir que Nadia Calviño haga una reforma laboral al servicio de la patronal».

Para Podemos, en efecto, el pulso a Batet está vinculado a la reforma laboral. «Es una estrategia arriesgada porque si Sánchez se niega a echar a Batet, ¿qué pasa con Podemos? Sería una humillación. Pero si Sánchez cede, entonces Podemos podrá aceptar una reforma laboral descafeinada poniéndose incluso una medalla. Y, en caso contrario, pararlo todo y señalar a Yolanda Díaz por traidora», reflexiona un dirigente regional del partido. 

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¿Elecciones adelantadas?

Pero en el sector cercano a Díaz todo se interpreta como un planteamiento dirigido a torpedearla. De no ser así, no entienden por qué pasar de amenazar con una querella (que muchos avisaron que no prosperaría) con una petición pública de dimisiones. Díaz sabe que para los socialistas esta exigencia es inasumible, y su táctica se limita en este momento a buscar un acuerdo «como sea» sobre la reforma laboral. «Yolanda necesita ponerse una medalla, aunque sea rebajando el pacto con respecto a lo que planteó Magdalena Valerio», comentan fuentes conocedoras de la negociación. El problema, repiten, es si Podemos la desautoriza. 

El pasado sábado, Pablo Bistinduy, un exdirigente muy conocido en Podemos, escribió un mensaje en las redes sociales que se movió de chat en chat. «Quienes hayan visto aquí una oportunidad para debilitar a Yolanda Díaz han cometido un grave error y una irresponsabilidad con el país. En política hay que creer en algo y tener las prioridades claras. Pase lo que pase, Yolanda tiene hoy más credibilidad y más fuerza que ayer», escribió. Bustinduy dejó el partido en pleno enfrentamiento con Errejón en 2019, y para muchas fuentes internas de Podemos ese mensaje representa una crítica a Belarra y Montero.

De ahí que hay quien habla de forzar un adelanto electoral. Internamente la cúpula de Podemos está hablando de ello. Un sector apuesta por dinamitar la legislatura y volver a las urnas antes de que Yolanda Díaz se organice. Cada día que pasa la gallega cosecha más apoyos y su plan es relegar a los morados en las listas electorales, como desveló este diario. Díaz ya tiene de su lado a Ada Colau y a un sector de Compromís. En Galicia está movilizando a sus afines y ya controla Asturias. Así que para algunos en Podemos conviene actuar antes de que sea demasiado tarde. Como decía Iglesias, que lo observa todo desde la retaguardia, la política es una cuestión de tiempos. 

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