La DGT endurece las multas por llevar ciertos objetos en carretera
La nueva Ley de Tráfico endurece las sanciones con el objetivo de reducir el número de accidentes
Una de las principales preocupaciones de la Dirección General de Tráfico (DGT) es la seguridad vial, pero esto es algo que depende también de todas las personas y de que cumplan las normas en la carretera. El año pasado tuvo lugar un aumento del 5% de los accidentes en España con respecto al anterior, por lo que el organismo se ha puesto serio para intentar reducir los siniestros en carretera.
La nueva Ley de Tráfico, que ha entrado en vigor en 2023, recoge multas más elevadas para aquellas personas que no cumplan con la normativa. Según datos de la DGT, una gran cantidad de los accidentes ocurren porque el vehículo está en mal estado. Por ello, han recordado la importancia de llevar todos los elementos correctamente, tanto las luces como los neumáticos, los frenos y demás partes del vehículo. La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) también ha ido poco a poco endureciendo sus medidas, lo que ha hecho que cada año sea más estricta a la hora de dar el visto bueno al coche.
Pero los elementos del vehículo no son lo único que hay que tener en cuenta. A esto hay que sumar la necesidad de que los conductores cumplan con las leyes de tráfico. El exceso de velocidad, por ejemplo, es una de las principales causas detrás de los accidentes.
En este sentido, han eliminado la norma de poder superar en 20 kilómetros por hora a la hora de adelantar a otro vehículo en carreteras convencionales. La DGT también ha querido recordar que, al ir en carretera, hay una serie de elementos que está prohibido llevar.
Multas de hasta 500 euros
El organismo de tráfico ha recordado que usar detectores de radares en los vehículos está prohibido. Estos elementos emplean un sistema de detección en tiempo real que permite saber que hay un radar, ya sea fijo, móvil o de tramo, permitiéndole a los conductores frenar antes de llegar al momento justo.
El empleo de este tipo de dispositivos es ilegal y hacerlo conlleva una multa de 500 euros, además de la retirada de tres puntos del carnet. La DGT ha recordado que sólo el llevarlo en el vehículo ya supone una infracción, incluso si no está en uso en ese momento. Por ello, lo mejor es no tenerlo.
A pesar de las advertencias continuadas de la DGT, hay muchos conductores que siguen sin ser conscientes de lo importante que es cumplir con los límites de velocidad en todas las vías de España. Por ello siguen teniendo tanta importancia los radares de tráfico, que los hay de tres tipos: móviles, fijos y de tramo. Los últimos son, probablemente, los más efectivos a la hora de controlar lo rápido que van los conductores.
Los nuevos márgenes de velocidad que establece la DGT
Los radares, en España, no suelen saltar justo al alcanzar el límite de velocidad. Estos mecanismos de la DGT siguen la regla del 5 y del 7. Es decir, en mediciones inferiores a 100 km/h, +/- 5 km/h los radares fijos y +/- 7 km/h los móviles instalados en un vehículo.
Pero la nueva normativa al respecto también ha cambiado estas cifras. Ahora, el margen para los radares fijos de instalación estática, en mediciones inferiores a 100 km/h, es de 3 km/h. En las superiores, es del 3%. Aparte de esto, los radares móviles pasarán a tener un error máximo de 5 km/h para las mediciones que no excedan los 100 km/h y de un 5% para situaciones en las que se superen.
En total, en España hay 2.010 radares fijos, 167 de tramo y 243 radares móviles y de cinturón, que están distribuidos por todas las carreteras del país. Pero es que, además, la DGT incrementó el año pasado el número de radares en un 7% con el fin de evita futuros siniestros en carretera.