Nigeria confirma la desaparición de 110 niñas tras el ataque de Boko Haram a una escuela
El Gobierno de Nigeria ha confirmado la desaparición de 110 estudiantes de la escuela de secundaria femenina atacada el pasado lunes por el grupo yihadista Boko Haram, según han informado a EFE este lunes fuentes del Ministerio de Información.
El Gobierno de Nigeria ha confirmado la desaparición de 110 estudiantes de la escuela de secundaria femenina atacada el pasado lunes por el grupo yihadista Boko Haram, según han informado a EFE este lunes fuentes del Ministerio de Información.
Tras una reunión con las familias de las desaparecidas tras el ataque en el pueblo de Dapchi, al noroeste de Nigeria, el director del centro y las autoridades locales, el ministro de Información, Lai Mohammed, confirmó este domingo que 110 de las 906 estudiantes matriculadas en la escuela siguen desaparecidas.
El ataque provocó la huida de cientos de alumnas y profesores, tras lo que el presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, informó de que reforzaría el número de tropas en el área y enviaría vigilancia aérea para conseguir que las chicas vuelvan a casa seguras y que los atacantes “sean arrestados y se haga justicia”.
Tras la desaparición, sigue la confusión sobre el paradero de las niñas, pues las autoridades negaron el secuestro en un primer momento y aseguraron que cientos de ellas habían escapado al bosque con los profesores. Más tarde anunciaron el rescate de algunas de ellas, sin precisar el número, pero no aclaró si el resto habían sido secuestradas.
Este suceso se produce a dos meses de que se cumplan cuatro años de un secuestro que conmocionó al país. En abril de 2014, más de 200 estudiantes fueron secuestradas en un colegio de Chibok. De todas ellas, más de cien han sido liberadas, pero 112 permanecen aún en cautiverio.
En los últimos meses, ha crecido el número de ataques suicidas en Nigeria, a pesar de que los terroristas han perdido presencia en algunos de sus territorios. En represalia a las operaciones de las fuerzas de seguridad, Boko Haram ha adaptado sus ataques a lugares como escuelas, centros de oración o campamentos de refugiados.
Boko Haram trata de imponer un Estado de corte islámica en Nigeria, donde hay una mayoría musulmana en el norte y una cristiana en el sur. Desde que comenzó la insurgencia yihadista, más de 20.000 personas han muerto y alrededor de 1,6 millones han tenido que abandonar sus hogares, según las últimas cifras de la ONU.