Polonia planea construir un muro para impedir que los migrantes crucen su frontera con Bielorrusia, según un proyecto de ley debatido este miércoles en el Parlamento.
El coste de la construcción de esta infraestructura se estima en 353 millones de eurosy también incluirá la puesta en marcha de sensores de movimiento.
El Gobierno polaco, de tendencia nacionalista, aprobó el proyecto el martes y este debería ser votado por los diputados el jueves a más tardar. «El número de intentos de atravesar la frontera va en aumento», ha declarado el Ejecutivo para justificar el proyecto. El texto estipula que nadie podrá acercarse a menos de 200 metros del muro.
Desde agosto, miles de migrantes, la mayoría procedentes de Oriente Medio y de África, han intentado cruzar la frontera polaca desde Bielorrusia. Según la Unión Europea (UE), el régimen bielorruso ha organizado este aflujo para vengarse por las sanciones europeas. Polonia reaccionó desplegando soldados en la frontera, decretando un estado de emergencia en la zona y levantando una alambrada.
Polonia es uno de los 12 Estados que la semana pasada pidieron que la UE financie «barreras» fronterizas para impedir que los migrantes entren en territorio del bloque comunitario.
El proyecto del muro ha sido duramente criticado por distintas ONG, que han acusado al Ejecutivo polaco de reaccionar de manera brutal a la migración y que advirtieron de una posible «catástrofe humanitaria» por las condiciones en que sobreviven los migrantes, bloqueados en los bosques y terrenos pantanosos de la frontera.
El estado de emergencia, que impide que periodistas y organizaciones de caridad se acerquen a la frontera, ha despertado una gran controversia y ha llevado a la UE a reclamar «transparencia».
Este nuevo desencuentro entre Polonia y la UE llega tan solo unos días después de que el Tribunal Constitucional del país declarara que algunos tratados europeos van en contra de su carta magna.