Un grupo de sanitarios catalanes pide expulsar a sus compañeros castellanoparlantes
«Aunque el médico hable en castellano, puedes hablarle en catalán y él tiene la obligación de entenderte», argumentan
Un grupo de sanitarios catalanes pertenecientes al colectivo ‘Metges pel Català’, que se unieron en 2023 para imponer el uso del catalán en los hospitales y centros sanitarios de Cataluña, se ‘dan cita’ cada día en Telegram para exponer los «agravios» que sufre el catalán en la Sanidad de la comunidad de Pere Aragonès. Así las cosas, su última conclusión ha sido que, ante la negativa, según ellos, de muchos facultativos a atender a los pacientes en catalán, estos deben ser amonestados y, si en un periodo de tiempo «no hacen ningún esfuerzo en hablarlo», deben ser «expulsados».
Este grupo, al que pertenecen ya más de 2.100 facultativos y que el 17 de abril se presentará como asociación, exige, por ejemplo, escribir siempre en catalán en la historia clínica; dirigirse a todo el mundo en catalán a la hora de empezar una conversación «independientemente de su origen o aspecto externo», realizar las recetas en catalán, llamar a los pacientes en catalán a las salas de espera o atender en catalán a los pacientes.
Sin embargo, ahora dan un paso más allá y proponen «expulsar» a cualquier profesional que pasado un tiempo en el centro u hospital no atienda al paciente en catalán: «Se debe establecer un tiempo para que lo aprendan, como hacen en todos los países, ofreciéndoles todas las herramientas, desde cursos hasta parejas lingüísticas y poniendo el catalán como requisito para acceder a plaza», explican, y agregan: «Si pasado ese tiempo siguen en una actitud contraria a que el paciente hable su lengua y ellos no hacen ningún esfuerzo en hablarlo, aunque no sea correcto del todo, hay que llamarle la atención y ponerle un plazo, advirtiéndole de que pasado este plazo, la próxima vez será expulsado. Se columpian y se creen que ellos son los que tienen los derechos».
El 60% de nuevos colegiados no son catalanohablantes
Un argumento que sostienen, en su opinión, en base a los artículos 33 del Estatuto de Autonomía de Cataluña, 11 de la Ley 1/1998 de política lingüística y el artículo 19 de la Ley 8/2007 , de 30 de julio del Instituto Catalán de la Salud. Normas que, aseguran, respaldan que «aunque el médico hable en castellano, puedes hablarle en catalán y él tiene la obligación de entenderte».
«Así lo determina la legislación. Los Centros de Atención Primaria (CAP) están mayoritariamente gestionados por el Instituto Catalán de la Salud (ICS), empresa pública adscrita al Departamento de Salud. Por eso podemos dirigirnos en catalán y tenemos el derecho a ser atendidos también en catalán. El catalán es la lengua de uso de estas administraciones», argumentan también desde ‘Plataforma Per la Lengua’, una organización creada en 1993 para garantizar la presencia de la lengua catalana en todos los ámbitos.
En este sentido, a pesar de que más de un 60% de nuevos colegiados no son catalanohablantes, o más del 50% de los estudiantes que cursan medicina en Cataluña son de otras comunidades autónomas o extranjeros, según datos del Colegio de Médicos de Barcelona, desde ‘Metges pel Català’ siguen focalizados en establecer el catalán en los centros sanitarios de Cataluña poniendo su diana sobre los trabajadores sanitarios.
Por ello también defiende crear un modelo de texto marco para facilitar una plantilla de denuncias y quejas por «discriminación lingüística» ante la Consejería de Salud. «¡El goteo de casos de discriminación y agravio lingüístico hacia los catalanohablantes es insostenible! Y tan sólo se visibilizan una pequeña parte», señala el grupo en esta red social.
Hay que recordar que este grupo se creó semanas después de que saliera a la luz el polémico caso de una enfermera andaluza en el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona, que se quejó de la obligatoriedad del C1 de catalán para acceder a una plaza pública mediante unas oposiciones.
Copia en Baleares
Recientemente, como adelantó THE OBJECTIVE, nacía en Baleares ‘Sanitaris per la Llengua’, una copia de ‘Metges pel Català’ que se han unido para «fomentar» el catalán ante el «retroceso importante del uso habitual del catalán en el ámbito sanitario».
Según los profesionales que conformar este colectivo, que ya cuenta con más de 500 facultativos, se ha producido un «abandono progresivo» del uso del catalán en el ámbito sanitario. Algo que ha sido propiciado, en su opinión, por «la incorporación de un número sustancial de profesionales que no conocen el catalán», además de por el «uso restringido» que los sanitarios catalanohablantes hacen del idioma en sus puestos de trabajo.
Este grupo, que se identifica con un pin verde en sus batas con la insignia «Sanitaris per la Llengua. Fes servir la teva llengua» (Sanitarios por la Lengua. Usa tu lengua) plantea, al igual que sus colegas catalanes: dirigirse en catalán entre sanitarios, «aunque respondan en castellano»; hablar al paciente en español solo si lo pide; emplear el catalán en sesiones clínicas, cursos y reuniones de profesionales; escribir en catalán en la historia clínica de los hospitales y de atención primaria, al igual que en los informes de ingreso, alta o consulta; comunicarse con las instituciones y organismos administrativos en catalán, «incluso cuando respondamos a una comunicación en castellano» y redactar en catalán los certificados que soliciten tanto pacientes como administraciones.