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Detenido en Senegal el violador fugado de Cantabria

La Policía ha detenido en Senegal a un hombre que, a falta de comprobación a través del cotejo de sus huellas dactilares, podría ser Guillermo Fernández Bueno, el peligroso preso fugado en busca y captura internacional tras no regresar a la prisión de El Dueso, en Cantabria, tras un permiso de siete días.

Detenido en Senegal el violador fugado de Cantabria

La Policía ha detenido en Senegal a Guillermo Fernández Bueno, el preso fugado en busca y captura internacional que no regresó a la prisión de El Dueso, en Cantabria, tras un permiso de siete días, según han informado fuentes policiales a Efe. También ha sido detenida su novia, que lo acompañaba en Senegal.

La detención ha sido llevada a cabo por agentes de la Policía Nacional en colaboración con las fuerzas de seguridad senegalesas. La Policía detectó el domingo la entrada del sospechoso en Senegal a través de un paso no autorizado desde Mauritania y este lunes se ha producido la detención.

Las características físicas del detenido coincidían con las de Fernández Bueno, pero llevaba un pasaporte falso, por lo que la confirmación oficial no se ha producido hasta que han cotejado sus huellas.

Guillermo Fernández Bueno ha cumplido 14 años de condena por asesinato y violación y le quedan, al menos, otros ocho. El 15 de julio abandonó la prisión de El Dueso en un permiso y no volvió a la cárcel al acabar dicho permiso. Se fugó acompañado de su pareja, una educadora social que trabajó como voluntaria y a la que conoció en la antigua prisión provincial de Santander.

 

El preso fugado es un santanderino condenado a 26 años y seis meses de prisión por violar y asesinar en una cafetería de Vitoria a una empleada de la limpieza el 14 de diciembre de 2000. Este caso, conocido como el crimen del Acua, conmocionó a la ciudad. La sentencia de la Audiencia alavesa señalaba que este hombre actuó con una “violencia inusitada”, que la víctima asesinada murió asfixiada y que la violó. Además, indicaba que cuando ya había fallecido, el condenado le cortó el cuello.

Además, Fernández Bueno ya cumplía una condena de nueve años de cárcel por otra agresión sexual cometida un mes antes a otra mujer en una panadería.

Desde 2012, el preso había disfrutado de permisos penitenciarios, pero tanto Instituciones Penitenciarias como el juez de Vigilancia Penitenciaria habían rechazado su pretensión de obtener el tercer grado. En los últimos años, había seguido varios programas voluntarios de reinserción como el destinado a los agresores sexuales o el de «vivir sin violencia», así como uno de preparación para las salidas de permiso.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha felicitado a la Policía Nacional por la detención de Guillermo Fernández Bueno y a «la cooperación en este caso con Senegal, pero con todos los países del Magreb y del Sahel». Considera que esta cooperación ha permitido que «esta persona sea finalmente detenida en un tiempo récord».

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